Neumólogos del país piden ser escuchados en la discusión del cannabis de uso recreativo; este jueves, en Senado, es el último debate

Este jueves 15 de junio tendrá lugar en la plenaria del Senado el último debate del proyecto de acto legislativo que busca regularizar el comercio de cannabis de uso adulto en Colombia, autoría del representante Juan Carlos Losada.

Como se sabe, en el país es legal consumir marihuana, pero es ilegal venderla y comprarla, por lo que los consumidores se ven obligados a recurrir a redes ilegales del narcotráfico para obtener esta sustancia. Con este proyecto de ley se busca entonces subsanar ese vacío y regular esta parte del proceso.

De esta manera la legalización de la venta y compra de cannabis para uso adulto sería una realidad en el país. “#EsHoraDeRegular para avanzar en una nueva política de drogas, alejada del prohibicionismo y enmarcada en un modelo de regulación”, sostuvo Lozada en su cuenta de Twitter, al finalizar el séptimo debate la semana pasada.

A su turno, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, señaló que la legalización del comercio del cannabis recreativo es otra forma de combatir la delincuencia y las multimillonarias ganancias que generan las organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico.

De lograrse la aprobación de este proyecto de ley, se permitirá su venta abierta. Ahora, el siguiente y último paso se dará con el debate en la plenaria del Senado.

De acuerdo con la senadora María José Pizarro, de la coalición Pacto Histórico y ponente de la iniciativa, las bondades del mercado legal del cannabis le permitirían a Colombia ingresos superiores a los 400 millones de dólares anuales y se generarían alrededor de 17 puestos de trabajo por hectárea de marihuana sembrada.

“Estamos a un paso de empezar a abordar de una manera distinta la fracasada lucha contra las drogas en Colombia. La última discusión se dará antes del 20 de junio en plenaria del Senado”, comentó la congresista este martes.

Por su parte, el senador Carlos Fernando Motoa, de Cambio Radical, sostuvo que “está claro que esta regulación no puede significar un impulso ni una normalización al consumo, hay que señalar que el uso del #cannabis de manera recreativa trae consecuencias a la salud física y mental de las personas que lo consumen”.

Agregó que actualmente existe un vacío legal, pues se permite el porte y el consumo, pero no la comercialización del cannabis. “Estamos en la discusión de despenalizar su consumo de uso recreativo, pero, no podemos desconocer sus afectaciones”.

Cabe recordar que, desde 1986, es legal en Colombia el consumo adulto de cannabis y tener un cultivo de hasta 20 plantas, entre otros asuntos.

Lo que exigen los neumólogos

Sin embargo, el tema es visto con preocupación por varios neumólogos en el país. “Mañana (jueves) es el último debate del Proyecto del Ley para el uso del Cannabis recreativo. Nunca invitaron a las sesiones del Congreso y Cámara a la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas que reune a las diferentes sociedades de especialistas del país. (neumólogos, neurólogos, etc). Tampoco invitaron a psicólogos y exadictos para escuchar su experiencia y testimonio”, asegura la cirujana Elizabeth Garcés.

También se pronunció José Gabriel Bustillo, neumólogo e integrante de la Asociación Colombiana de Neumología y Cirugía de Tórax, entidad sin ánimo de lucro que promueve la investigación científica en estas áreas de la salud. Y también la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades pulmonares. La entidad lidera actualmente la campaña ‘Un respiro de vida’.

“En nombre de la asociación me permito expresar la preocupación por la promoción de cualquier iniciativa que ponga en riesgo la salud respiratoria de los colombianos, tal como el consumo inhalado de la marihuana, sobre todo en momentos los que la investigación científica dedica todos sus esfuerzos a hacer claridad sobre la relación entre dichas sustancias y enfermedades como bronquitis y cáncer de pulmón”, sostiene el especialista.

Y agrega que “parece que parece contradictorio que en momentos en que la atención primaria en salud se presenta ante el país con su bandera de prevención, se le haga contrapeso con la promoción del cannabis inhalado. Todo esto, sin detenernos a considerar el impacto ambiental negativo que generan estas conductas”.