Salud
No confunda el reflujo con la acidez estomacal; estas son las diferencias y así puede sentirse mejor
Se calcula que, por lo menos, una de cada diez personas en Colombia sufre de reflujo gastroesofágico.
Esa molesta afectación de ardor en el pecho o en la garganta que puede empeorar en la noche o al estar acostado, sumado a la regurgitación o sensación de que se devuelven alimentos o líquidos agrios, describen situaciones más bien comunes. Tanto así que, de acuerdo a la encuesta publicada por la Revista Colombiana de Gastroenterología, se estima que el 12 % de la población colombiana sufre de reflujo gastroesofágico, aunque los expertos aseguran que pueden ser más.
Pero ahora, ¿es lo mismo la acidez estomacal y el reflujo gastroesofágico?. El Dr. James East, gastroenterólogo de Clínica Mayo sede Londres, explica que no se deben confundir.
“La acidez estomacal es un síntoma clave de la enfermedad por reflujo, pero la enfermedad en sí es mucho más que eso. Se produce cuando el ácido y los químicos dañan el revestimiento del esófago. Algunas personas que padecen enfermedad por reflujo podrían sentir un bulto en la garganta, tener dificultad para tragar, dolor de pecho, tos o síntomas tipo asma que pueden empeorar”, indicó el Dr. East.
¿Por qué se siente reflujo?
Ahora, en detalle, lo que pasa en el cuerpo cuando una persona siente el reflujo es sencillo.
“El músculo esfínter que se encuentra en la parte inferior del esófago se relaja en el momento incorrecto y permite el regreso del ácido gástrico al esófago. Esto puede ocasionar acidez estomacal y otros signos y síntomas. El reflujo constante o frecuente puede generar enfermedad por reflujo gastroesofágico”, indicó MedLine Plus.
Complementa Clínica Mayo que se produce cuando el ácido del estómago regresa hacia el esófago y la afectación se siente porque el estómago puede resistir el ácido, pero el esófago no tiene tanta resistencia.
Profundizando en los signos y síntomas más comunes de la enfermedad por reflujo gastroesofágico, además de los ya mencionados están el dolor de pecho o en la parte alta del abdomen, la dificultad para tragar (disfagia) y la sensación de nudo en la garganta. Además, si la afectación es nocturna, hay tos continua, inflamación de las cuerdas vocales (laringitis), problemas de asma por primera vez o asma que se agrava.
También es válido tener en cuenta que fumar, comer grandes comidas o comer tarde de noche, comer alimentos detonantes como grasos o frituras, ciertas bebidas, como alcohol o café o medicamentos, como la aspirina, agravarían el reflujo gastroesofágico y a su vez la acidez estomacal. Además, la persistencia de la afectación puede llevar a otras complicaciones como el esófago de Barrett.
Esófago de Barret
Según el especialista de Clínica Mayo, las alteraciones de la enfermedad por reflujo incluyen la inflamación del esófago, lo que lleva a desarrollar cicatrices y constricción o estrechamiento en esta parte del cuerpo
“El revestimiento del esófago puede cambiar y presentar una forma más resistente al ácido, lo que se conoce como esófago de Barrett, una complicación muy común de la enfermedad por reflujo”, explicó en un comunicado oficial la entidad de origen estadounidense.
En términos prácticos, entre más veces el ácido y los químicos se “devuelven desde el estómago, hay más probabilidad de que el revestimiento del esófago se engrose y adquiere un color rojo. Esto afecta del 10 por ciento al 15 por ciento de las personas que padecen enfermedad por reflujo gastroesofágico”.
El experto concluyó que “existen tratamientos innovadores y medicamentos para la enfermedad por reflujo, como medicamentos llamados inhibidores de la bomba de protones. Pero primero se deben evitar los desencadenantes, como el café, el alcohol y fumar. La recomendación es no asumir que se trata de algo simple y consultar al médico para encontrar el tratamiento más adecuado”, indicó.