OMS dice que 152 millones de niños nacieron prematuros en la última década: estas son las regiones más afectadas

La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó un informe en el que se analizan los datos más recientes sobre los nacimientos prematuros a nivel global. De acuerdo con las cifras compartidas por el documento, cerca de 152 millones de niños nacieron prematuros entre el 2010 y el 2020.

De hecho, advirtió que solo en 2020 se documentaron alrededor de 13,4 millones de niños nacidos de forma prematura en todo el mundo. Y agregó que alrededor de un millón de bebés fallecieron a raíz de complicaciones propias de esa condición, según los datos que recogió junto al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

Estas estimaciones a partir de las cuales se realizó el estudio fueron preparadas de la mano con la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres (Inglaterra).

“El nacimiento prematuro es ahora la principal causa de muerte infantil y representa más de 1 de cada 5 de todas las muertes de niños que ocurren antes de cumplir 5 años. Los sobrevivientes prematuros pueden enfrentar consecuencias para la salud de por vida, con una mayor probabilidad de discapacidad y retrasos en el desarrollo”, explicó la OMS a través de un comunicado de prensa en el que dio detalles del informe.

Se trata de un fenómeno que impacta profundamente en las condiciones de vida de las mujeres y las familias.

Uno de los datos más inquietantes que arrojó la OMS dio cuenta de la desigualdad en el acceso a los servicios de salud, que a su vez tiene efectos en la calidad de vida de los niños y sus madres.

“Con demasiada frecuencia, el lugar donde nacen los bebés determina si sobreviven. El informe señala que solo 1 de cada 10 bebés extremadamente prematuros (<28 semanas) sobrevive en países de bajos ingresos, en comparación con más de 9 de cada 10 en países de altos ingresos. Las enormes desigualdades relacionadas con la raza, el origen étnico, los ingresos y el acceso a una atención de calidad determinan la probabilidad de nacimiento prematuro, muerte y discapacidad, incluso en países de altos ingresos”, sostuvo el organismo multilateral.

Entre las regiones más afectadas, la OMS mencionó el sur de Asia y el África subsahariana, donde la tasas de nacimiento de bebés prematuros son las más altas del mundo. Solo en esas dos partes del mundo las autoridades sanitarias reportan alrededor del 65 % de los nacimientos prematuros que hay en todo el mundo. A su vez, en esas dos regiones los bebés se enfrentan a un mayor riesgo de morir por complicaciones relacionadas con esta condición.

“El informe también destaca que los impactos de los conflictos, el cambio climático y el daño ambiental, la covid-19 y el aumento del costo de vida aumentan los riesgos para las mujeres y los bebés en todas partes. Por ejemplo, se estima que la contaminación del aire contribuye a 6 millones de nacimientos prematuros cada año. Casi 1 de cada 10 bebés prematuros nace en los 10 países más frágiles afectados por crisis humanitarias”, detalló la OMS.

Asimismo, hizo referencia a las amenazas que enfrentan las mujeres que tienen partos prematuros. Incluso advirtió que hay condiciones que aumentan la probabilidad de que las madres tengan a sus bebés antes de tiempo como el embarazo adolescente y la preeclampsia.

Por ello, la OMS indicó que es clave garantizar que las mujeres puedan tener un acceso oportuno a servicios de salud sexual y reproductiva, planificación familiar y “atención de calidad” una vez quedan en embarazo y cuando se acerca el momento del parto.

Uno de los puntos que destacó el organismo multilateral fue la necesidad de que las comunidades sean más conscientes de la necesidad de prevenir los partos prematuros y las muertes fetales.

“En todo el mundo, los grupos de familias afectadas por nacimientos prematuros han estado a la vanguardia de la defensa del acceso a una mejor atención y el cambio de políticas y el apoyo a otras familias”, puntualizó la OMS, que les pidió a los estados nacionales mayor inversión en las políticas de salud pública para reducir la cantidad de bebés que nacen prematuramente.