Salud
Presidenta de Acemi habla sobre los puntos clave para el diálogo
La salud en el país vive un momento demasiado tensionante.
En los últimos días estalló la grave situación financiera que aseguran tener las EPS, principalmente las tres más grandes del país, que atienden a 13 millones de afiliados: EPS Sura, EPS Sanitas y Compensar EPS.
Sobre la carta enviada por los directivos puntualmente al ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, en que se advirtió que podrían dejar de operar en el mes de septiembre, el jefe de esta cartera manifestó que se ha pagado de manera anticipada mensualmente (2 billones de pesos, que fue lo estipulado en el Plan Nacional de Desarrollo para este 2023).
Además, dijo: “Que una EPS (en el caso hipotético) por alguna razón no puede seguir en el sistema y por alguna razón se quebró, aquí ya estamos listos”.
Por su parte, la presidente ejecutiva de la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi), Ana María Vesga, expresó este domingo 27 de agosto, mediante un pronunciamiento ante medios, al respecto del inicio de mesas de trabajo que se inician “para hacer conciliación de cuentas con las EPS, pero también para revisar de manera técnica la suficiencia de la UPC en el presupuesto del sistema de salud”.
“Creemos que la conversación es del mayor interés de todos los actores del sistema, que es una conversación que tiene que involucrar a todas las partes, y que, desde luego, no atiende a un problema puntual de este Gobierno (únicamente), pero que sí se viene acumulando de años atrás”, indicó.
“Nos hemos referido insuficiencia de la UPC, que es particularmente la incapacidad que tiene la cápita, la prima, de absorber todo el gasto en salud y que en lo que va acumulado del año lleva una simestralidad cercana al 102 %”, agregó la presidente de la agremiación.
De igual manera, afirmó que se han referido a “la necesidad de revisar los recursos que se destinan al pago del no PBS (Plan de Beneficios de Salud), es decir, a esas tecnologías que se reconocen a través de los presupuestos máximos, que para el año 2022 fueron de más de 3.7 billones de pesos y que dejaron en las EPS un saldo -aún no pago-, de cerca de 1.5 billones de pesos”.
Sin embargo, frente a este panorama - añadió Vesga-, “rescatamos la importancia de ese mensaje que ha dado el ministro Guillermo Alfonso Jaramillo: Estamos listos desde las EPS a iniciar esa conversación no solamente sobre suficiencia sino sobre las cuentas que están pendientes de pago por la Adres (del estado) a las EPS”.
La ejecutiva de la agremiación concluyó que, “desde ahí, resolviendo los problemas de suficiencia, se resuelven también problemas de atención de oportunidad para los usuarios, que es finalmente lo que nos debe motivar y mover a todos los actores del sistema de salud”.
Por su parte, Juan Pablo Rueda, presidente de Sanitas EPS, en entrevista con SEMANA, manifestó: “Lo que anunciamos no es un cierre de la operación nuestra, ni que no vamos a atender más, sino que estamos llegando a un punto en que va a empezar a ser muy difícil responder por las obligaciones que tenemos. Lo que hicimos con el Gobierno fue pedirle un espacio para plantearle soluciones”.
“Las EPS tenemos dos tipos de reservas, dos tanques de oxígeno. Uno es el patrimonio. Entre 2022 y 2023 este disminuyó en más de 400.000 millones de pesos. Hemos agotado nuestros recursos en pagar atenciones de servicios que no se cubren con la financiación del Gobierno”, añadió.
“Ls reservas técnicas. Son recursos para las atenciones en salud que se han prestado, pero que aún no se han pagado. Esa reserva se puede agotar pronto. Si eso pasa, y realmente no queremos llegar a allá, no podremos pagar oportunamente a nuestros prestadores. Si eso llega a ocurrir, ya existiría un riesgo real de que alguno de ellos no pueda atender a nuestra población”, aseguró.