Salud
Revelan qué se debe comer para mejorar la salud del corazón
La alimentación saludable es un factor esencial a la hora de prevenir afecciones cardiovasculares.
Las enfermedades cardiovasculares pueden presentarse de distintas formas, entre ellas, por medio de la presión arterial alta, los accidentes cardiovasculares, colesterol elevado, las arritmias cardíacas, entre otras afecciones. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), este tipo de patologías cardiovasculares causan el fallecimiento de más de 17 millones de personas en el mundo cada año y es responsable de la mitad de las muertes que ocurren en los Estados Unidos.
Para prevenir esta clase de afecciones que impactan la salud del corazón, es importante adecuar buenos hábitos de salud que incluyan una alimentación rica en vitaminas y minerales, buena actividad física y mental y tener buenos hábitos de sueño. Con respecto a la alimentación, el portal web Infosalus señala que se debe limitar las grasas no saludables y reducir el consumo de carbohidratos en exceso para tener un corazón saludable.
El doctor Christopher D. Gardner, presidente del comité de redacción de la nueva declaración científica y Catedrático Rehnborg Farquhar de Medicina de la Universidad de Stanford (California), en Estados Unidos, indica con respecto a las dietas alimenticias que“en los últimos años ha proliferado el número de pautas alimentarias diferentes y populares, y la cantidad de información errónea sobre ellas en las redes sociales ha alcanzado niveles críticos”.
Así las cosas, la salud cardiometabólica refiere a factores que afectan al metabolismo y aumentan el riesgo de enfermedades cardiacas y vasculares. Por lo anterior, Infosalus señala las dietas más saludables y mejor valoradas para la salud cardiovascular, según la guía de la Asociación Americana del Corazón:
Dieta 1
Los alimentos bajos en sal, azúcar añadido, alcohol, aceites tropicales y alimentos procesados, y ricos en verduras sin almidón, frutas, cereales integrales y legumbres benefician la salud del corazón. Asimismo, esta dieta contiene proteínas, las cuales suelen proceder principalmente de fuentes vegetales (como legumbres, alubias o frutos secos), junto con pescado o marisco, aves y carnes magras y productos lácteos descremados o bajos en grasa.
Dieta 2
La dieta mediterránea también está muy bien valorada para la salud del corazón. “Como no aborda explícitamente la sal añadida e incluye el consumo moderado de alcohol (en lugar de evitarlo o limitarlo), tiene una puntuación ligeramente inferior a la de DASH”, indica Infosalus.
Dieta 3
Como tal, las dietas veganas bajas en grasas también referencia al consumo de verduras, frutas, cereales integrales, legumbres y frutos secos. Se limita el consumo de alcohol y los alimentos y bebidas con azúcar añadido. “Sin embargo, las restricciones del patrón alimentario vegano pueden dificultar su seguimiento a largo plazo o cuando se come fuera de casa” destaca el portal en mención.
Dieta 4
Específicamente, varios estudios han demostrado que las dietas muy bajas en grasas y en carbohidratos ayuda a ralentizar la progresión de la acumulación de grasa en las arterias. ”Se ha demostrado que un patrón de alimentación saludable bajo en carbohidratos afecta por igual a la pérdida de peso, la tensión arterial, el azúcar en sangre y el colesterol en comparación con una dieta saludable baja en grasas”, indica Infosalus.
Dieta 5
Las dietas paleolítica y cetogénica, son muy utilizadas para perder peso. Este tipo de dietas hace referencia al consumo de verduras sin almidón, frutos secos y pescado, junto con la reducción al mínimo del consumo de alcohol y azúcar añadido. “Son muy restrictivas y difíciles de seguir a largo plazo para la mayoría de las personas. Aunque es probable que se produzcan beneficios a corto plazo y una pérdida de peso sustancial, no son sostenibles. Una dieta que sea eficaz para ayudar a una persona a mantener sus objetivos de pérdida de peso, desde una perspectiva práctica, tiene que ser sostenible”.