Semana Mundial Lactancia Materna

Semana Mundial de la Lactancia Materna: experta explica en SEMANA por qué este alimento es insustituible para los bebés

Según la nutricionista, este alimento contiene además la combinación perfecta de proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales

Redacción Semana
1 de agosto de 2023
Lactancia materna
La leche materna brinda todos los nutrientes esenciales y en las cantidades adecuadas que el bebé necesita para un crecimiento y desarrollo adecuados. | Foto: Getty Images/Image Source

Desde 1992, del primero al siete de agosto se celebra a nivel internacional la Semana Mundial de la Lactancia Materna, una estrategia promovida por la Alianza Mundial pro Lactancia Materna, WABA, y la Organización Mundial de la Salud, OMS.

La colombiana Paula Andrea Ardila es nutricionista-dietista y consejera en lactancia materna y alimentación del preescolar de la Universidad Nacional de Colombia. Cuenta además con experiencia en alimentación infantil, crianza afectiva y psicología de la alimentación.

Su larga trayectoria la ha llevado a trabajar como nutricionista clínica infantil y consejera en lactancia materna y alimentación infantil para varias ONG con población vulnerable y migrante. Actualmente, es candidata a magister en alimentación y nutrición humana de la Universidad estatal de Milán.

Lactancia materna
La leche materna contiene anticuerpos y otros componentes inmunológicos que ayudan a proteger al bebé contra una amplia variedad de enfermedades y a fortalecer su sistema inmunológico. | Foto: Getty Images

En SEMANA, la doctora Ardila despejó las dudas más comunes alrededor de la lactancia materna.

SEMANA: ¿Cuál es la importancia de la lactancia materna?

Paula Andrea Ardila (P.A.): La lactancia materna es de vital importancia debido a los numerosos beneficios que aporta tanto al bebé como a la madre, la familia y la sociedad. Por mencionar algunas de sus principales ventajas para el bebé están la nutrición completa, ya que la leche materna brinda todos los nutrientes esenciales y en las cantidades adecuadas que el bebé necesita para un crecimiento y desarrollo adecuados. Contiene además la combinación perfecta de proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales. Los protege contra diversas enfermedades tanto en la infancia como en la edad adulta: La leche materna contiene anticuerpos y otros componentes inmunológicos que ayudan a proteger al bebé contra una amplia variedad de enfermedades y a fortalecer su sistema inmunológico. Los bebés amamantados tienen menos probabilidades de sufrir infecciones respiratorias, gastrointestinales, otitis media, alergias y enfermedades crónicas no trasmisibles como cáncer y diabetes.

SEMANA: ¿Qué beneficios tiene concretamente para la madre?

(P.A.): La lactancia materna también aporta beneficios a la madre. Ayuda a contraer el útero después del parto, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de hemorragia posparto. Además, amamantar puede ayudar a las madres en la recuperación del postparto y reducir el riesgo de desarrollar ciertas enfermedades, como la diabetes tipo 2 y el cáncer de mama y ovario. Para la familia y la sociedad también existen beneficios pues se ve favorecida la economía de la familia en materia de alimentación y de salud; adicionalmente, se reducen costos en salud y se reduce el impacto ambiental al reducir la contaminación.

SEMANA: ¿Qué nutrientes tiene la leche materna que son insustituibles?

(P.A.): Aunque la industria farmacéutica ha intentado imitar la leche materna, existen cientos de componentes de la leche de las madres que no creo que se lleguen a replicar. Entre ellos, anticuerpos y factores inmunológicos, hormonas y enzimas, factores de crecimiento para el desarrollo y la maduración de los tejidos y órganos del bebé. Y los probióticos, que son baterías y sus productos metabólicos que ayudan a establecer una microbiota intestinal saludable en el bebé, promueven la salud digestiva, refuerzan el sistema inmunológico y pueden tener efectos protectores contra ciertas enfermedades como el asma, por nombrar alguna.

En el binomio madre-hijo la lactancia materna fomenta un vínculo emocional único entre la madre y el bebé. El contacto piel con piel, el hablarle y ver al bebé y en general la cercanía durante la lactancia fortalecen el apego y la conexión emocional entre ambos. | Foto: Revista Fucsia.com

SEMANA: ¿Hasta qué edad se aconseja lactar al bebé?

(P.A.): La Organización Mundial de la Salud y la mayoría de las asociaciones expertas en salud infantil recomiendan la lactancia materna exclusiva (es decir sin ningún alimento o bebida) durante los primeros 6 meses de vida. Después este tiempo, se aconseja continuar la lactancia materna junto con la introducción gradual de alimentos complementarios hasta al menos los 2 primeros años de edad. Estos alimentos son complementarios porque complementan la leche materna y no al contrario.

SEMANA: ¿Tiene la leche materna alguna semejanza con la llamada ‘leche de fórmula’?

(P.A.): Empezaría aclarando que no se debería nombrar ‘leche de fórmula’, porque aunque dentro de sus componentes puede contener leche, en realidad ya no es leche. Al utilizar el término “sucedáneo de la leche materna”, enfatizamos en que estos productos son una alternativa temporal cuando la lactancia materna no es posible. Con esto se busca promover y apoyar la lactancia materna como la mejor opción para la nutrición y el bienestar del bebé. Al evitar el uso del término ‘leche de fórmula’, se evita la idea de que estos productos son equivalentes o iguales a la leche materna. Como semejanza tendrán algunos elementos puntuales como proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales, pero son más las diferencias que encontramos. La leche materna es un alimento vivo que se adapta a las necesidades cambiantes en el día a día y a medida que el bebé crece. Contiene componentes inmunológicos y nutrientes únicos que no se encuentran en la fórmula.

Desde hace 45 años la Liga de la Leche trabaja en Cali, Medellín, Bogotá y Pasto para acompañar a las mujeres durante la lactancia.
La OMS recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses de vida. Después este tiempo, se aconseja continuar la lactancia junto con la introducción gradual de alimentos complementarios hasta al menos los 2 primeros años del niño. | Foto: Amanda Caroline Da Silva

SEMANA: ¿Qué puede hacer una mamá que no puede lactar y debe recurrir a la ‘leche de fórmula’?

(P.A.): Como consejera en lactancia materna y alimentación infantil, recomiendo primero buscar apoyo. Sea de manera presencial o virtual, actualmente existen grupos de apoyo a la lactancia materna que pueden ser de ayuda a una madre que crea que está teniendo dificultades con su lactancia. Por nombrar algunos: La liga de la leche y Mama informada. De igual manera, se puede buscar apoyo con consejeras en lactancia materna particulares.

SEMANA: Muchas mujeres que no pueden lactar se sienten malas madres por ello...

(P.A.): Una vez agotadas todas las posibilidades, si una madre debe brindar la fórmula es importante que sepa que eso no la hace menos ni mala mamá. Se puede tener un vínculo y un apego teniendo en cuenta que al momento de alimentar al bebé se haga contacto físico, visual y auditivo con el o la bebé. Se debe conservar siempre la interacción y la estimulación, pues esto permite a la mamá de igual manera entender las necesidades del bebé y atenderlas con mayor facilidad. Igualmente se debe entender que hay que conservar todas las medidas de higiene, como lavado de manos y de utensilios, para la preparación, se deben seguir las indicaciones de preparación que pueden variar con cada marca al igual que las cucharadas medidoras. Se recomienda brindar la fórmula con vaso, cuchara o jeringa y evitar el uso de chupos y biberón, ya que se ha encontrado que están asociados con impacto negativo para el desarrollo dental, oral y del habla del bebé, además de mayor riesgo de infección de oído.

SEMANA: ¿Cómo la leche materna contribuye a afianzar lazos de la mamá y su bebé?

(P.A.): En el binomio madre-hijo la lactancia materna fomenta un vínculo emocional único entre la madre y el bebé. El contacto piel con piel, el hablarle y ver al bebé y en general la cercanía durante la lactancia fortalecen el apego y la conexión emocional entre ambos. El acto de amamantar satisface las necesidades emocionales del bebé, brindándole consuelo, seguridad y calma. La madre también experimenta una sensación de satisfacción al poder atender las necesidades de su hijo. Y las diversas hormonas que se liberan, como la oxitocina, favorece los sentimientos de apego, amor y conexión emocional entre ambos.