Salud
Usar el horno microondas puede ser peligroso para su salud. Estas son las razones
Este electrodoméstico se ha vuelto cada vez más popular debido a las ventajas que tiene para calentar las comidas.
El horno microondas es uno de los electrodomésticos más populares de los últimos años y su uso está cada vez más extendido. Esto se debe, sobre todo, a que resulta muy práctico para calentar comidas en poco tiempo e incluso permite preparar productos específicos que de otra forma tardarían más en estar listos.
No obstante, utilizarlo de forma adecuada es clave para evitar complicaciones de salud. Para empezar, hay que decir que funcionan a partir de radiación de microondas, que son ondas electromagnéticas que se transmiten hacia los alimentos para aumentar su temperatura en períodos cortos. Son conocidas porque tienen una frecuencia bastante alta.
No solo se usan en hornos, sino que también pueden usarse en otros dispositivos como satélites, radares e incluso en la industria armamentística.
De acuerdo con una guía elaborada por el California Childcare Health Program, impulsado por la Universidad de California en San Francisco, la radiación de microondas puede generar múltiples afectaciones en la salud, como la aparición de cataratas en los ojos y la esterilidad en los hombres.
“Sin embargo, el uso correcto de un horno de microondas en buenas condiciones no causará ninguno de estos problemas. Más preocupantes son los problemas relacionados con el calentamiento desigual de alimentos”, señala la guía pedagógica.
Entre otras cosas, esa fuente cita riesgos como las quemaduras que se producen cuando las personas consumen alimentos que están demasiado calientes, se salpican con grasa o están expuestas a vapor que se encuentra a altas temperaturas.
Esto es especialmente importante en el caso de los bebés que ingieren alimentos como leche o bebidas que se han puesto a hervir.
Así mismo, es fundamental verificar que los alimentos estén bien cocidos antes de consumirlos. La guía señala que entre los riesgos más frecuentes está el “calentamiento irregular de los alimentos que puede dejar ‘zonas sin cocinar’ y donde bacterias peligrosas para la salud podrían sobrevivir y causar enfermedades que se trasmiten por alimentos”.
Así mismo, es posible que las personas usen recipientes de plástico que en realidad no son aptos para dejarse dentro de los hornos microondas y, por tanto, pueden desprender sustancias químicas peligrosas que contaminen los alimentos y resulten tóxicas para el organismo.
Es crucial saber que las microondas que producen estos electrodomésticos tienen la capacidad de penetrar en los alimentos y hacer que estos se calienten. Sin embargo, hay algunos materiales que generan un efecto de rebote en estas microondas como el aluminio o distintos tipos de metal. Esto puede generar daños graves en los electrodomésticos.
“No existe ninguna evidencia de que cocinar con microondas disminuya el valor nutricional de los alimentos más que la cocina convencional. De hecho, los alimentos preparados en el horno de microondas conservan mejor las vitaminas y los minerales porque se cocinan más rápidamente y sin añadir agua”, señala la guía de la Universidad de Chicago.
Consejos útiles a la hora de usar un horno microondas
El California Childcare Health Program señala que hay algunas recomendaciones que las personas pueden seguir para mitigar los riesgos que implica el uso de los hornos microondas y que podrían ayudar a sacarles provecho al máximo.
Una de las medidas más importantes es seguir con atención las instrucciones que están incluidas con el electrodoméstico y son cuidadosamente redactadas por los fabricantes.
“No use el horno si la puerta no cierra bien, está doblada, deformada o dañada. No permita que nadie se coloque directamente enfrente de un horno de microondas cuando esté en funcionamiento”, sostiene la guía pedagógica.
Es fundamental utilizar solo los recipientes que están recomendados para almacenar alimentos dentro de los hornos microondas, pues si no están diseñados para ese fin pueden derretirse o dañarse. Y se aconseja que solo se empleen una vez las bandejas y los platos de comidas que están hechas para prepararse en el horno microondas.
“Si emplea una envoltura de plástico, no la ponga en contacto directo con los alimentos. No caliente botellas y alimentos infantiles en el horno de microondas. En su lugar, utilice agua templada del grifo”, advierte la guía.