AL ATAQUE
“Nunca he visitado a Monsalve en la cárcel”: Prada sobre caso Uribe
El parlamentario del Centro Democrático, señalado de participar en la manipulación de testigos que hoy enreda al expresidente, habla en exclusiva con Salud Hernández-Mora.
El representante Álvaro Hernán Prada es investigado por la Corte Suprema de Justicia en el mismo proceso que adelanta el alto tribunal contra el expresidente Álvaro Uribe por los presuntos delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal.
El alto tribunal investiga a Prada por el delito de soborno en calidad de cómplice, sin embargo, decidió no dictarle medida de aseguramiento, como lo hizo con el exmandatario.
"En algunos de los comportamientos investigados habría intervenido el representante a la Cámara Álvaro Hernán Prada, a quien por ello la sala le imputa el delito de soborno en calidad de cómplice, conducta que legalmente no cumple requisitos para imponerle medida de aseguramiento, aunque sigue vinculado al proceso", señaló la Corte en el comunicado en el que se pronunció sobre la situación jurídica de exmandatario el pasado 3 de agosto.
En la edición de este miércoles de Al Ataque, el congresista del Centro Democrático reveló detalles de su caso y se defendió de las acusaciones en su contra.
A continuación, la primera parte del diálogo que sostuvo con Salud Hernández-Mora.
SALUD HERNÁNDEZ-MORA: El congresista Álvaro Hernán Prada es una de las personas que la Corte Suprema considera que tuvo que ver en todo el montaje de Álvaro Uribe contra el senador Iván Cepeda con un testigo que se llama Monsalve. Lo que dice la Corte es que usted intentó que Monsalve cambiara su testimonio para favorecer a Uribe. Que usted presionó para que él grabara una declaración diciendo que lo que había dicho antes era falso y que quería rectificar porque nunca lo habían presionado.
ÁLVARO HERNÁN PRADA: Salud, permíteme hacer una aclaración a los televidentes. He decidido hacer esta entrevista con gratitud con el medio. Pero lo hago básicamente por dos cosas: porque esta situación no solo me afecta a mí sino que afecta a mi familia, a mis amigos, el caso del presidente Uribe y a muchos seguidores que están pendientes de lo que está pasando y, por otro lado, porque este proceso está en la calle. Estas 1.554 hojas del auto donde definen la situación jurídica tanto al presidente Álvaro Uribe Vélez como la mía, está en los celulares rodando por todas partes. Lamento que se haya filtrado de esa manera, por eso mediante los apoderados le hemos solicitado a la honorable Corte levantar la reserva y que permita que todos los colombianos sepan el contenido del expediente.
SHM: Yo conozco las 1.500 páginas y lo que está en los medios. Es decir, yo no tengo filtración directa como tienen otros colegas. Yo no tengo esa suerte. Ellos dicen que usted fue una persona clave para intentar conseguir esa rectificación de Monsalve, que usted por medio de otro personaje que se llama Caliche intentó presionar a Monsalve.
AHP: Primero, yo soy congresista del Centro Democrático. Llevábamos cuatro años en oposición a un Gobierno, nos tocó con responsabilidad y firmeza decirle al país lo que estaba sucediendo, especialmente sobre el proceso de paz. Y tuve una confrontación democrática con el presidente de la república de ese entonces, Juan Manuel Santos. Había denunciado penalmente su participación con lo de Odebrecht. Estaba en pleno ejercicio para revalidar mi credencial como representante a la Cámara. A pocos días de las elecciones cualquier persona que ha hecho política sabe que su prioridad es la campaña, es el resultado. La preocupación es conseguir los votos y también estructurar el día de las elecciones para que los seguidores puedan salir a votar.
SHM: Para aclarar, estos hechos se remontan a 2018. Estamos en campaña electoral. Los hechos que a usted le atañen son desde febrero 20. Estamos a pocos días de las elecciones.
AHP: Menos de 20 días para las elecciones. Febrero tiene 28 días y las elecciones fueron los primeros días de marzo. Estando en Bogotá, en la sede del Centro Democrático, me pone un mensaje una persona reconocida en el departamento (del Huila) para que reciba un amigo de él. Luego me llaman de la sede y me pasan a Mauricio Marroquín, quien hacía parte de la campaña de un candidato al Senado del Partido Conservador, Hugo Tovar Marroquín, y me dice: es importante que usted reciba a Rodrigo Vidal (Rodrigo Vidal es un ganadero de Garzón). Rodrigo tiene un amigo que tiene una información muy importante para su jefe. Yo le dije: si es muy importante, llegue al aeropuerto porque yo tengo vuelo de las 5:00, pero tengo que irme inmediatamente a la comuna 9, tengo en un asentamiento una jornada y no voy a llegar tarde. Así que con mucho gusto le dedico unos minutos. Yo no sabía de qué se trataba esto. El día 20 de febrero llegué a Neiva, 5:00 de la tarde, yo tenía una van para mi traslado de campaña con las personas que trabajan conmigo. Me cambio y luego los hago pasar. Y ahí el señor que se presenta nos dice el motivo, lo que necesitaba de mí. Básicamente lo que expresa es ser amigo de un señor de apellido Monsalve que, a su vez, era hijo de unas personas que habían trabajado con la familia del expresidente Uribe. Y dice que ese señor Monsalve, amigo de él, quiere contar la verdad sobre algo que no había dicho por un supuesto ofrecimiento que le había realizado el senador Iván Cepeda, de asilo, dinero o libertad. Como no le habían cumplido él quería contar la verdad. Y, en esos días, los medios de comunicación habían expuesto por todas partes que al presidente Uribe le habían compulsado copias en una denuncia contra Cepeda que fue archivada. Era la noticia del momento.
SHM: ¿Este señor que le vamos a llamar alias Caliche dice que es amigo de Monsalve y dice que puede conseguir una grabación en la que este señor se retracte y favorezca a su jefe?
AHP: Él no hablaba de retractación, él hablaba de decir la verdad y aseguraba que no la había dicho en su momento por una supuesta participación del senador Cepeda. Yo le pregunté por qué yo. Entonces me dijo por ser cercano al presidente Uribe. Dije ¿y qué quieren que yo haga? Me dijo ‘es muy sencillo, yo voy a ir a Bogotá. Monsalve que es amigo mío, va a grabar un video contando la verdad del caso, se la pasamos a usted para que se la entregue a los abogados. O se la entrega al presidente Uribe ’. Insistían mucho en Lombana y en Granados. En esos minutos él me preguntó si había posibilidad de ayudar a su amigo Monsalve en la JEP. Y tajantemente le dije: ninguna. Eso es con el operador judicial. Y segundo, yo no creo en la JEP. Es un tribunal a la medida de las Farc que estoy tratando de derogar y estamos recogiendo firmas para ello. Ese es el episodio central.
SHM: ¿Qué personas estaban con usted en ese momento?
AHP: Había unas personas que me acompañaban, de logística, personas de seguridad y estaba el señor Rodrigo Vidal. Y en gran parte de la conversación estuvo Mauricio Marroquín. Mauricio después se va y quedan Vidal y Caliche.
SHM: ¿Usted se va a su evento político?
AHP: Para mí fue sorpresa, yo estaba atónito. Como no era muy expresivo, quizá sentían que no le creía. El señor insistía: si quiere llame al señor presidente para que pregunte si existe ese señor Monsalve. Entonces yo lo llamo y el presidente no me contesta. En un momento posterior, me devuelve la llamada y le digo que me ha abordado un señor hablándome de un señor Monsalve y que quiere aportar la verdad.
SHM: ¿Uribe le contesta la llamada cuando estaba con Caliche?
AHP: Él estaba en el vehículo todavía porque cuando yo estaba hablando con ellos, les dije que tenía que dirigirme a la comuna 9. Les dije que si no había problema yo iba avanzando a la comuna y si querían en algún momento se bajaban. Ellos me dicen que no había ningún problema. Yo después cambié el tema porque tenía que trabajar con las personas de mi campaña y seguí. Estando en la comuna, en el asentamiento, había un recorrido caminando. No es un sitio fácil porque hay mucha delincuencia, no hay transporte público fácilmente y a ellos les toca esperar que yo haga todo el recorrido. Se suben al vehículo y yo los dejo en un sito para que tomen el transporte.
El presidente me devuelve la llamada, me pregunta por la campaña y enseguida yo lo abordo. Él me dice que ese señor Monsalve existe y si va a decir la verdad, ojalá. Algo así dijo. Me acuerdo mucho de la expresión: ojalá que diga la verdad. Eso fue todo. Yo colgué. Por supuesto nunca le puse altavoz porque no lo hago con nadie.
SHM: El tema del altavoz es clave por una declaración de Caliche en un primer momento, que le dice a Monsalve que usted puso en altavoz al presidente Uribe y él dijo ‘buenísimo que diga la verdad sobre ese HP, que todo lo que ha hablado es pura miércoles‘, más o menos así…
AHP: Voy a comentar los hechos y luego las contradicciones. Nunca pongo en altavoz a nadie menos al presidente Uribe al que le tengo respeto y menos frente a una persona que me acababa de conocer y que reconocía que era amigo de un bandido.
SHM: ¿Usted les dice que ha hablado con el presidente Uribe?
AHP: Ellos se dan cuenta, yo contesto y digo presidente, lo saludo y luego me despido. Quiero advertir lo siguiente: el presidente Uribe nunca me ha pedido a mí o alguno de mis colegas intervenir en sus procesos judiciales, absolutamente nunca. Él se sorprende de eso.
SHM: ¿Cómo quedan?
AHP: Él (Caliche) me repite lo que ya me había dicho previamente. Dijo que iba esa noche a Bogotá, al otro día estaría en la Picota, Monsalve supuestamente le entregaría un video a él y yo se lo entregaría a los abogados. Punto.
En la comuna 9 tuvimos que interrumpir antes de la jornada porque había unas personas armadas y nos obligaron a no pasar más por allá. Eso me permitió llegar más temprano a mi casa para ver a mis hijos, tengo cuatro hijos pequeños y yo venía de Bogotá y nos los había visto.
Bueno, también en algún momento intercambiamos teléfonos para poder comunicarnos para que cuando ese señor llegara con el video me lo entregara. Estando en mi casa recibo un chat y dice que no viaja a Bogotá por alguna circunstancia porque no hay cupo al otro día, algo así.
SHM: ¿De esos chats hay pruebas?
AHP: Claro. Yo se los aporté a la Corte y también hicimos una rueda de prensa en Rionegro y se los entregamos a la prensa. Eso debe estar en redes.
Yo no contesté el chat. Al otro día, el 21 de febrero, a las 6:00 de la mañana, él me escribe otro mensaje, me dice: dígale al expresidente Uribe que hay un emisario de Juan Monsalve Villegas y que él quiere contar la verdad. Vuelve y repite.
Entonces yo que ya había escuchado eso y que había hablado con Uribe, se me hacía raro que el repitiera eso, sin embargo, no le contesté nada, yo estaba en mi campaña. Ese mismo día me escribió varios mensajes y, en varios de ellos, se contradecía. Yo tampoco le contesto nada y luego me cambia los mensajes. Y a las seis de la tarde me escribe otro mensaje. Ya cuando nosotros nos damos cuenta de lo que es este proceso, que a esa misma hora le está escribiendo a Monsalve que soy yo el que lo ha abordado a él ese mismo día, el 21.
Hago un paréntesis, en los posteriores días él me cambia el mensaje inicial del 20. Yo ese mismo 21 le pierdo credibilidad absoluta porque uno pondera.
Mi interés era mi elección. Ya si ese señor vuelve bien y si no también porque estamos pendientes de la elección. Para la defensa del expresidente Uribe están sus abogados. Ese no es el tema mío.
SHM: ¿Digamos que usted cuando ya ve que están metiendo otro emisario se quita?
AHP: Ya le iba perdiendo cada día más credibilidad a ese señor.
SHM: ¿Y cuál es el siguiente momento? Porque según la Corte había un interés extremo de su parte de que este hombre consiguiera esa declaración…
AHP: Eso es un episodio muy corto. Él me aborda el 20 por la tarde, el día que nos conocemos, y tal vez el 24 es el último mensaje. Él se me apareció en el centro de la ciudad. Todo el mundo sabe dónde estoy yo porque tengo un carro grande. Yo le dije no me abordara más sobre este tema. Yo me acuerdo que hasta el 24 fue el último mensaje que contesté
Posteriormente, él sigue escribiendo mensajes y mensajes. Nunca le contesté. ¿Qué percepción de me quedó de él? Que era un charlatán, ni siquiera entendí que era un plan criminal.
SHM: ¿Entonces por qué la Corte Suprema insiste en que había un interés especial en conseguir una declaración de él el día 23?
AHP: Eso es lo que yo he querido que la Corte me diga, por qué. Eso es lo que yo he querido. Aquí lo que se ha violado es también la presunción de inocencia. En la constitución no solo está consignado como una garantía sino que a partir del 2001 por sentencia de la Corte Constitucional es un derecho absoluto. Aquí resulta que aparecemos como culpables y pareciera que se invirtiera la carga la prueba.
SHM: ¿Usted nunca fue a la cárcel a verse con Monsalve?
AHP: Esa pregunta es muy pertinente por lo siguiente Yo con Caliche nunca volví a hablar. Le escribo el día de mi elección le escribí a gracias a todo el que me felicitaba y con él se me fue ese gracias.
Con el presidente Álvaro Uribe hablamos muchísimo, estábamos en campaña pero nunca de ese tema.
SHM: ¿A usted lo empiezan a chuzar el día 23 febrero?
AHP: Así es. Resulta que con el presidente no volvimos a hablar del tema. Pero un día, en el Congreso, ya elegidos, alguien me manda una columna de un señor que dice ser periodista de apellido Guillén. Ese señor que tiene un odio enfermizo contra el presidente tenía un escrito en un portal donde decía que el presidente de la Corte investigaba a Uribe por una cantidad delitos como manipulación de testigos y fraude procesal. En el escrito dice que el presidente Uribe está tratando de presionar testigos para cambiar su versión. Menciona a dos abogados y al congresista Álvaro Hernán Prada, del Huila. Y dice que yo he ido a la cárcel a presionar al señor Monsalve.
Afortunadamente, no he ido sino una sola vez a la cárcel La Picota. No en el 2018, fui en el 2017 como denunciante del presidente Juan Manuel Santos por el tema de Odebrecht. Entre otras cosas aquí hay que resaltar que una persona que se atreva a denunciar a un presidente como fue Santos, y como tenía cooptadas las ramas del poder público, es porque no tiene rabo de paja. Fui en compañía de la Comisión de Acusaciones a un pabellón distinto.
SHM: ¿No fue usted solo?
AHP: por supuesto que no. Fui con la Comisión de Acusaciones a tomarle declaración a Otto Bula como testigo en ese proceso contra Juan Manuel Santos. No más. Afortunadamente, porque si no quizá hubiesen dicho que si estaba en la cárcel era por otro motivo.
Vuelvo a hablar con el presidente Uribe a mediados de mayo y le digo acuérdese presidente que en algún momento en la campaña lo llamé y le comenté de este tema de un señor que se acercó, le recordé. Y él me preguntó qué pasó con eso. Le dije que me imaginé que fue un charlatán y nunca más le volví a tocar el tema por eso. Pero resulta que lo que hay ahí es un posible plan criminal. Le dije que mirara la columna, la leyó y quedó aterrado.
SHM: ¿Usted lo que está insinuando es que había una trama para terminar involucrándole?
AHP: Es que como dicen en una columna que había ido a presionar a Monsalve…
SHM: ¿En ese momento nadie sabía que usted había tenido esa conversación con Caliche?
AHP: No, nadie. Nadie había dicho nada sobre eso y yo quedé absolutamente sorprendido. ¿Qué pasa? Voy donde Víctor Mosquera, que es mi abogado joven, prestigioso con el que tenía relación en el Congreso por diferentes temas. Ha sido muy cercano a nosotros. A él lo llamé el 20 de febrero. Me fui para la oficina de Víctor Mosquera, le muestro la columna y le expresó la preocupación porque están diciendo en la opinión pública esa gran mentira. Tomamos la decisión de presentar una denuncia en la Fiscalía para que averiguara esos hechos.
SHM: ¿Denuncia contra quién?
AHP: una denuncia en averiguación, pero obviamente con todos los datos de las personas que me habían llamado, que me habían abordado. Me voy ante el fiscal general de la nación a entregar la denuncia. Él asigna un funcionario para que me la reciba y quedan en la Fiscalía todos los hechos.
Luego, el 24 de mayo, le escribo a la Corte porque salen denuncias. Cito alguna de ellas, una de un señor Ackerman diciendo que hay que meter al presidente Uribe y a mí a la cárcel antes de las elecciones presidenciales.
SHM: ¿Y en base a qué? ¿por qué tendrían que meterlo a usted a la cárcel?
AHP: Por una supuesta manipulación de testigos. Basados en lo mismo que venía diciendo Guillén y luego una señora Cecilia Orozco y luego Daniel Coronell, todos además combinando el tema de la elección presidencial con la necesidad de detener al presidente Uribe y a mí. Yo le escribí un derecho de petición a la Corte y le pedí a través de los abogados que nos dijera si había un proceso en mi contra y la Corte me contesta que tengo tres procesos.
SHM: ¿En qué fecha más o menos?
AHP: El 7 de junio. Uno de los procesos es por un abogado que me denuncia basado en una entrevista en Caracol cuando estábamos en la campaña del plebiscito donde yo expongo los riesgos de la JEP como estaba consignado en el acuerdo de paz. Debo decir que me quedé cortico con lo que estamos viendo ahora. Ese señor decía que era mentira y me denunció por engaño al elector. La segunda denuncia era de Iván Cepeda por una columna que escribí en el Diario de Huila y una tercera denuncia de un señor de las Farc, el que trajo el carrobomba de El Nogal. Yo denuncié esos hechos en el Congreso y él me denunció. Pero me ocultan este proceso. No me dicen de este proceso y, posteriormente, nos damos cuenta después de estas columnas, y de la presión mediática que afecta nuestra honra y buena imagen, que la Corte nos llama a indagatoria al presidente Álvaro Uribe y a mí. Nos enteramos el 21 de julio, un día después de haber tomado posesión. Yo inmediatamente salgo a la Corte para notificarme personalmente y saber qué es. Estaba cerrada, entonces voy el día siguiente a notificarme y tengo acceso al proceso.