“No escuché el celular, no tenía batería o no tenía señal”, son algunas de las excusas más comunes entre los ‘millennials’ para no contestar las llamadas, una situación cada vez más frecuente y que ya es materia de estudio.La compañía de tecnología estadounidense Bank My Cell, encuestó a 1.200 ‘millennials’ estadounidenses y sus resultados revelaron que el 81% de los encuestados sufre de ansiedad al recibir o realizar llamadas telefónicas.Los investigadores, quienes catalogaron a los ‘millennials’ como una ‘generación muda’, sostienen que hablar por celular es una practica de riesgo y que genera ansiedad porque a diferencia de las aplicaciones de mensajería instantánea en las que se pueden borrar los mensajes enviados cuántas veces se requiera, las llamadas telefónicas no permiten eliminar las palabras pronunciadas, provocando altos niveles de estrés.Otros hallazgos de la encuesta fueron que el 75% de los jóvenes consideran que las llamadas al celular son una invasión en la vida cotidiana.El 88% de los ‘millennials’ prefiere contar con internet ilimitado en su celular que con minutos, el 29% evita las llamadas de sus amigos, familiares y de trabajo, el 12 % le echa la culpa a la mala calidad de la señal para no recibir llamada y el 63% dice que no escuchó el celular o que lo tenía en modo vibración.