NACIÓN
¿Con Salvatore Mancuso en Italia se esfuma la verdad?
Panelistas de "El Debate" insisten en que el exjefe paramilitar debe responder por sus delitos ante la justicia colombiana, que con este caso “demostró tener incapacidad e ineficacia”.
A pesar de múltiples intentos del Gobierno nacional y de las entidades competentes, no pudo ser posible extraditar al exjefe paramilitar Salvatore Mancuso para que comparezca ante la justicia colombiana y oficialmente se le notificó su deportación hacia Italia, pedido que había hecho insistentemente su abogado. Uno de los argumentos que usó la defensa, el abogado Jaime Alberto Paredes, para lograr su deportación a Italia, es que el exparamilitar tiene doble nacionalidad, tanto colombiana como italiana.
Además, la defensa alegó que Colombia falló en varias oportunidades en solicitar de manera adecuada la extradición y que, a pesar de que el propio presidente Iván Duque anunció públicamente que haría la solicitud, se habría demorado o lo hizo de manera indebida.
En su fallo, un juez estadounidense aceptó los argumentos del abogado de Mancuso, quien pidió que su cliente fuese deportado hacia territorio europeo, medida que se deberá cumplir como máximo el 4 de septiembre. Si bien esta decisión judicial es definitiva y dejaría a Colombia con las manos atadas, tanto el Ministerio de Justicia como la Fiscalía y otras entidades elevarían el caso hasta la justicia internacional, tal y como lo había manifestado el presidente Duque.
“Si piensa ser deportado a Italia, acudiremos a los principios de jurisdicción universal por crímenes de lesa humanidad. Sus crímenes no quedarán en la impunidad”, dijo Duque en su momento. Incluso desde la Defensoría del Pueblo se planteó la posibilidad de acudir a la Corte Internacional.
Esta decisión judicial no le cayó nada bien al país, a las autoridades judiciales ni a las diplomáticas. El debate ahora se concentra en Mancuso. Esta es la opinión de los panelistas del nuevo espacio de SEMANA:
Para el exalcalde de Bogotá Luis Eduardo Garzón, el embajador en Estados Unidos, Francisco Santos, “hizo todo lo posible para que regresara Mancuso… pero a Italia“. Para el exmandatario, “la incapacidad del embajador es terrible y las víctimas se quedaron viendo un chispero“.
En ese sentido, Garzón recordó que Mancuso “reveló que había financiado al expresidente Álvaro Uribe para las elecciones presidenciales de 2002“, comicios en los que participó el exalcalde. Por esto, el panelista aseguró que se hubiera declarado una víctima del caso.
Por su parte, el exalcalde de Medellín Federico Gutiérrez, señaló que “Mancuso, al igual que todos su compinches, son unos criminales que dejaron miles de víctimas y que ha pagado 12 años de cárcel pero debe ser extraditado a Colombia para pagar la cuenta pendiente que tiene con la justicia y contar la verdad“.
En cambio, el caricaturista Matador felicitó al presidente Iván Duque porque “en dos años de gobierno, este es el único mandado que le ha salido bien. El Gobierno sabía hace años cuándo salía Mancuso, entonces ¿cómo es posible que en cuatro intentos que hizo el Gobierno todos hayan fallado? Esto es un mandado de Uribe“, aseveró.
Así mismo, la economista María Andrea Nieto lamentó que con el exjefe paramilitar en Italia se esfume la verdad, además que “se reafirma la incapacidad de la justicia para reparar a las víctimas y para tener un Estado más democrático y menos violento“. Añadió que “con él en Italia ganan los corruptos y el narcotráfico“.
Para el exministro de Defensa Juan Carlos Pinzón “es muy triste ver que en Colombia aquellos bandidos terminan teniendo derechos y yendo al Congreso a hablar y con cualquier tipo de beneficios de carácter jurídico. El Estado tiene el deber de perseguir a estas personas hasta le fin del universo, y esto es lo que se tiene que hacer con Mancuso y otros criminles que niegan sus actividades“.
Pinzón agregó que “la verdad contribuye a la reconciliación, pero no puede seguir ocurriendo que se burlen de los colombianos con los bandidos jugando a la política“.
¿Quién se beneficia de la decisión de EE. UU. sobre Mancuso?
De manera enfática, Matador aseguró que la principal pesona que se beneficia “es Uribe, porque Mancuso tiene mucha información de toda la historia paramilitar del país, de quiénes son los patrocinadores y los beneficiadores. Esta decisión beneficia a Uribe y además Pacho Santos quiso extraditar a Mancuso porque él lo mencionó y dijo que junto con el exprocurador Ordóñez tenían pensado abrir un bloque paramilitar en el año 2000“.
En contraste, el exministro Pinzón comentó que “culpar al Gobierno de la decisión de un juez de Estados Unidos no es prudente, sin ninguna prueba no está bien. Es relevante que la justicia colombiana y la Fiscalía están en el deber y la obligación de tramitar todo tipo de gestiones jurídicas para traer a Mancuso y hacer todos los interrogatorios desde allá“.
Por su parte, el exalcalde Garzón aseguró que “lo cierto es que a los que más denuncia Mancuso son empresarios, militares y todo lo que representa el Gobierno de 2002 y 2008“.
El panelista Gutiérrez insistió en que “Mancuso formaba parte de la Justicia y Paz, y al no decir la verdad y seguir delinquiendo desde la cárcel, pierde los beneficios y tuvo que ser extraditado. Por lo menos él (Mancuso) ha pagado cárcel así sea en Estados Unidos“.
Mancuso, ¿a la JEP?
El caricaturista comenzó por decir que la visita de Mancuso al Congreso, cuando fue aplaudido, era “el fiel reflejo de Colombia en los años de Uribe, el 60 por ciento del Congreso era dominado por paramilitares. En ese entonces, los paramilitares y el narcotráfico eran un proyecto político. Yo creo que Mancuso debería acogerse a la JEP para que cuente la verdad, porque el proceso al que se acogió no sirvió de nada“, opinó.
En contraste, Gutiérrez insistió en que “no está bien saltar de un lado al otro; él fue parte de Justicia y Paz para que dijera la verdad y reparar las víctimas. Mancuso y toda su pandilla no dijeron la verdad y siguieron delinquiendo en las cárceles. Este tipo no debe tener ningún beneficio y si entra a la JEP tendría beneficios“.
Por su parte, Matador replicó y dijo que “los uribistas le tienen miedo a la verdad y tienen miedo de que los militares y paramilitares lleguen a la JEP“.
Para Nieto, “los Acuerdos de Paz a punta de mentira no llevan a la reconciliación. Cuando vemos a Mancuso siendo venerado en un Congreso es lo mismo que pasa, pero desde la virtualidad: los congresistas de la Farc siendo aplaudidos en las redes sociales. Ayer, Alape dijo que no había reclutamiento y que al contrario, cuando había niños huérfanos, ellos los acogían y entonces que cómo se nos ocurría a los bobitos de los colombianos que ellos reclutaban. Él luego salió de la JEP y una cantidad de gente lo aplaude“.
Pacho Santos en el caso de Mancuso
Lucho Garzón, quien manifestó que la decisión judicial de Estados Unidos sobre el exjefe paramilitar tuvo que ver con el embajador Santos, aseguró que no tiene pruebas de que él lo haya hecho intencionalmente, pero “sí hubo negligencia y hubo suspicacia porque Mancuso se fue o bien para evitar el castigo o para pasear“.
Matador insistió en que esto es “una jugada maestra de Uribe, es como si Duque mandara a Pacho Santos a la tienda por un Mancuso, pero nunca lo trajo“. En ese sentido, el caricaturista trajo a colación de la existencia de las fosas paramilitares que todavía existen. Por su parte, Pinzón criticó la postura de Matador y le preguntó: “¿Cómo cree que se sienten las víctimas de las Farc? Usted se rasga las vestiduras por unos casos, pero no por otros“.
En ese sentido, el caricaturista respondió y dijo que había que recordar que “21 testigos del caso de Uribe han sido asesinados, aquí los matan con cianuro, en la mafia no hablan porque le cogen a la familia y la matan. ¿Cómo van a decir la verdad si exponen a su familia?“.
Al respecto, la panelista Nieto aseguró que “en este país por estigmatizar matan y masacran, pero también vemos masacres en las redes sociales y cómo acaban con la dignidad y con la vida profesional (...) Mientras unos colombianos debatimos con civilidad, en el Congreso están los hampones con las manos chorreando sangre (...) Yo quiero un país con paz y verdad, no de un lado y otro“.