CENTRO DEMOCRÁTICO

“La expresión subpresidente es grosera y falsa”: Rafael Nieto defiende a Duque

El abogado y exprecandidato presidencial por el CD aseguró que es Duque quien toma las decisiones en el gobierno y no Uribe. Dejó entrever que la relación entre ambos no es fluida por cuenta de estos rumores.

25 de febrero de 2020
| Foto: Semana

La gobernanza del presidente Iván Duque en poco más de 19 meses al frente del gobierno aún deja dudas y plantea debates sobre su rol como mandatario, así como el papel de su jefe de partido, el expresidente y senador Álvaro Uribe Vélez. 

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En diálogo con María Jimena Duzán durante el programa Semana en Vivo, el abogado y miembro del Centro Democrático Rafael Nieto -quien mantiene una postura crítica frente al gobierno- dijo que "la expresión subpresidente es grosera y falsa". Aseguró que el presidente Duque es quien toma las decisiones. Incluso, dejó entrever que la relación entre el actual mandatario y Uribe está maniatada por los rumores de gobernanza. 

“La relación de Uribe y Duque está muy signada por el síndrome del titiritero y la marioneta. Uribe preocupado porque no lo vean como el titiritero y el presidente Duque para que no lo vean como la marioneta. Y en ese ejercicio, lo que debería ser una relación mucho más fluida y directa no lo es. El que toma las decisiones en el gobierno es Iván Duque, no Álvaro Uribe”, dijo Nieto.  

Juan Fernando Cristo, otro de los panelistas, cuestionó fuertemente ese argumento y puso sobre la mesa el planteamiento de que por primera vez Colombia tiene un presidente que no es jefe de su partido, y que, por lo tanto, no cuenta con un liderazgo pleno. “Lo cierto es que el Gobierno tiene dos jefes, uno es el presidente de la República, que fue elegido por los colombianos, y otro es el jefe del partido (Centro Democrático) del presidente, que es Uribe”. 

Para darle fuerza a su teoría, Cristo explicó que la columna vertebral son los ministerios de Defensa, Hacienda, Interior y Cancillería, quienes son ocupados por ministros uribistas. “Ellos son de la entraña del expresidente, consultan con él. Para mí, el poder lo tiene Álvaro Uribe”.

¿Duque está al frente de un gobierno sin un propósito fijo?

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El representante a la Cámara por Decentes, David Racero, y la exministra de Agricultura, Cecilia López, los otros dos panelistas invitados a Semana en Vivo, coincidieron en afirmar que el presidente Duque no tiene un rumbo definido y, por lo tanto, no hay una bandera que caracterice a este gobierno. 

“El presidente Duque no tiene una agenda clara y los acuerdos programáticos se vuelve difíciles. Le cuesta cohesionar a su partido, pareciera que dentro del Centro Democrático hay divisiones que cada vez afloran más”, dijo Racero. Entre tanto, la exministra López manifestó: “Hay falta de un norte y a eso súmele que nombran a personas que no van a poder sacar muchas cosas adelante”.

Sobre este último punto se centró gran parte del debate por las alianzas que Duque hizo recientemente y la entrada al gobierno de los partidos Cambio Radical y La U. 

“Uno tiene dos fuentes de gobernabilidad en un sistema democrático: la popularidad o el apoyo de los partidos que le den mayorías en el Congreso. El presidente Duque no es especialmente popular y tampoco tenía mayoría en el Congreso; por eso, había que hacer alianzas con los que lo apoyaron en segunda vuelta”, manifestó Nieto. 

No obstante, mostró su descontento con la forma en que se están haciendo las alianzas: “Yo creo que el gobierno deber decirle a la opinión pública: mire, estamos en estos acuerdos, porque cómo lo están haciendo crea un manto de dudas sobre la naturaleza de la negociación que no le hace bien al acuerdo”.

David Racero cree que estas negociaciones se hicieron en un momento critico y de debilidad del presidente, lo cual genera que la contraparte haga mayores exigencias. 

“El problema que ha tenido Duque es que no tiene una agenda ni un propósito nacional para invitar a los partidos a acompañarlo a algo. No hay objetivo de nada. Segundo, como no hay propósito, se crea una ambigüedad y al presidente le cuesta trabajo decirle al país: mire, aquí hay un ministro de determinada posición”, concluyó Cristo.

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