Aislamiento inteligente: Duque con países de Latinoamérica evaluó impacto de la cuarentena

A raíz de la incertidumbre que reina en Latinoamérica por el crecimiento de la pandemia del coronavirus que ha llegado con fuerza a países de la región como Ecuador, el presidente de la República Iván Duque evaluó en compañía de los mandatarios integrantes del Foro para el Progreso de América del Sur (Prosur), las medidas para contener la enfermedad como el aislamiento total.

Duque en una video conferencia que adelantó el lunes de esta semana desde la Casa de Nariño con el presidente de Chile, Sebastián Piñera, con su homólogo de Bolivia Jeanine Añez con el de Ecuador Lenín Moreno, Paraguay Mario Abdo Benítez, con el mandatario de Uruguay Luis Lacalle Pou, y el de Perú Martín Vizcarra. También intervino en la sesión el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.

Según trascendió de la reunión virtual que duró más de dos horas, los mandatarios y sus cancilleres compartieron experiencias y fortalecieron los mecanismos de coordinación frente a la manejo para la prevención, contención y mitigación de la pandemia del covid-19.

De acuerdo con fuentes de alto nivel del a Gobierno Nacional el presidente colombiano puso sobre la mesa la necesidad de aunar esfuerzos y coordinar el trabajo en la región para minimizar la letalidad, evitar el colapso del sistema de salud ante la emergencia por el coronavirus.

También se abordó como plan para Latinoamérica garantizar la protección social a los sectores más vulnerables, la reactivación de la productividad y realizar compras unificadas de pruebas rápidas de detección del coronavirus, máquinas de automatización para pruebas reactivas, hisopos y respiradores.

Además, los mandatarios que hacen parte del Foro para el Progreso de América del Sur (Prosur), consideraron analizar las experiencias de cada país en relación a la forma cómo se manejarán las denominadas cuarentenas o aislamientos preventivos obligatorios.

Finalmente se hablo de la pertinencia de elaborar y consolidar una posición unificada de los países de la región frente a la búsqueda de recursos crediticios de organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para financiar los programas para afrontar la pandemia en Latinoamérica.