¿Qué tan humanitarios son los vuelos de regreso a Colombia?

Angélica Rojas es colombiana y desde hace más de un año viajó a Sidney (Australia) para estudiar. Su visa venció el pasado mes de abril y cuando se disponía a volver a Colombia --con un tiquete que tenía comprado desde inicio del 2020-- los aeropuertos fueron cerrados en todo el mundo y su estadía se convirtió en un limbo permanente.

“Todos los días revisaba la página de la Cancillería y del Consulado para encontrar una instrucción del Gobierno, algo que me permitiera volver a Colombia, pero todo lo que me enviaban eran papeles y más papeles: formatos engorrosos y burocráticos, absolutamente inentendibles”, relató en entrevista con Semana Noticias.

El pasado 17 de mayo Angélica y otros 366 connacionales lograron acceder a un vuelo humanitario, el cual siguió la ruta Yakarta-Nueva Delhi-Ámsterdam–Bogotá. Este avión recogió grupos de colombianos en Australia, Austria, Bélgica, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, India, Indonesia, Italia, Irlanda, Noruega, Nueva Zelanda, Países Bajos, Portugal, Reino Unido, Singapur, Suecia, Suiza, Tailandia y Hong Kong.

Aunque logró volver al país, Angélica tuvo que usar varias tarjetas de crédito y endeudarse para poder pagar el tiquete aéreo, el cual tuvo un incremento superior al 300% respecto a su valor comercial en circunstancias normales.

“Fue demasiado costoso: el vuelo costó 2.860 dólares, cuando normalmente es un vuelo que cuesta 500 dólares, ida y regreso”, denunció.

La enorme deuda que adquirió no está representada únicamente en el vuelo, sino también en múltiples gastos en los que tuvo que incurrir antes de abandonar Australia: “nos tocó desplazarnos a Melbourne desde donde salía el vuelo, pagar hotel allá, por lo cual fue otro millón de pesos más”.

 Al cambio de ese día, Angélica pagó 11 millones 860 mil pesos por su tiquete aéreo y 2 millones más en hospedaje, comida y transporte. Según el relato de esta estudiante, el Gobierno colombiano no aportó un solo peso de dichos gastos para ayudarla a regresar a Colombia. El Gonbierno ha reiterado, frente a estos casos, que los gastos los asume la persona que regresa. 

No hay plata para volver

Otro colombiano, Edwin Rodríguez, se encuentra en San Francisco (Estados Unidos) y tiene pocas posibilidades de volver a Colombia porque, a diferencia de Angélica Rojas, no tiene recursos económicos para poder costear su pasaje en el avión programado por el Gobierno colombiano.

“Esto no tiene nada de vuelo humanitario: que te digan que tienes que pagar entre 2.000 y 3.000 dólares por una silla para que puedas regresar a tu país, es cruel, y los colombianos que nos encontramos aquí no tenemos la posibilidad de regresar porque no contamos con ese dinero”, contó con desilusión.

Este bogotano solicitó formalmente ayuda a la Embajada colombiana en esa ciudad, ante la extrema necesidad por la covid-19, pero la respuesta recibida fue negativa: Colombia no financiará su tiquete de avión y ahora tendrá que esperar a la programación de otro vuelo y buscar el dinero para pagarlo.

“Esto es muy injusto: para los viajeros de otros países sus gobiernos financian una parte o les brindan créditos; a nosotros nos dejan desamparados y sin cómo sostenernos económicamente aquí, que no es nuestra patria”, puntualizó.