Yenny Carolina Capador, hermana de Duberney Capador
Yenny Carolina Capador, hermana de Duberney Capador | Foto: SEMANA

VICKY EN SEMANA

Familiares de militares capturados en Haití dicen que los dejaron solos

Vicky en SEMANA habló con los seres queridos de los connacionales detenidos y muertos en ese país. Piden ayuda hasta con la CPI.

16 de septiembre de 2021

Tras el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise, el 7 de julio pasado, los familiares de los colombianos detenidos por estos hechos, incluso los familiares de los colombianos fallecidos, viven una pesadilla. Yenny Carolina Capador, hermana de Duberney Capador, un colombiano que resultó muerto en Haití, aseguró en Vicky en SEMANA que no pide impunidad sino justicia. Y en su caso específico pide el cuerpo de su hermano para darle sepultura.

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De acuerdo con Capador, la Cancillería les dijo que el cuerpo de su hermano estaba bien. No obstante, dijo, el Gobierno colombiano los dejó a su suerte. Aparte, denunció, a los colombianos detenidos los están torturando sin que nadie pueda decir nada.

El general Jorge Vargas, director de la Policía Nacional, dijo en su momento que la investigación adelantada señala que los exmilitares colombianos Duberney Capador y Germán Rivera planearon el asalto a la vivienda del presidente de Haití, Jovenel Moïse, asesinado el pasado miércoles 7 de julio. Sobre el particular, su hermana indicó que busca el cuerpo de su hermano y que el Ejecutivo colombiano no los deje solos.

A su turno, Julián Gómez, Hermano de Jhon Jairo Rodríguez, detenido en Haití, dijo que su hermano tiene una herida abierta en el pie y una quemadura con aceite. Él se preguntó si los 20 años de su ser querido en las Fuerzas Militares colombianas no son suficientes para ayudarlo. Según dijo, él no busca impunidad sino respeto. “Como si no valiera nada, no sabemos nada, mi hermano está muy mal, yo pido ayuda”.

De su lado, José Espinosa, vocero de las familias de los militares colombianos detenidos en Haití, dijo que ellos fueron contratados para seguridad y defensa y terminaron siendo condenados por mercenarios y asesinos sin un proceso alguno. Según dijo, el caso lo puso en conocimiento de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

También señaló que hay cartas que dan cuenta de torturas que están sufriendo los colombianos y por ello han pedido ayuda hasta de la Corte Penal Internacional. “Se radicaron oficios también oficios a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a la Organización de Estados Americanos, el Gobierno no nos responde. Que miren lo que está pasando con esos 18 hombres allá”, indicó.

La situación en Haití

El primer ministro haitiano, Ariel Henry, nombró el miércoles por la noche a un nuevo ministro de Justicia tras destituir al fiscal que había pedido su imputación en la investigación del asesinato del presidente Jovenel Moise el 7 de julio. Liszt Quitel fue nombrado ministro interino de Justicia y Seguridad Pública, según la edición especial del diario oficial Le Moniteur del 15 de septiembre. Ya ocupa la cartera de Interior desde el 20 de julio.

Este nombramiento se produce en un momento de particular agitación en Haití, más de dos meses después del asesinato del jefe de Estado en su residencia privada, en plena noche, por un comando armado. El martes por la mañana, el comisario del gobierno (equivalente al fiscal) de Puerto Príncipe pidió al juez encargado del caso que inculpara a Henry.

El fiscal Bed-Fort Claude había escrito el viernes al jefe del gobierno invitándolo a presentarse voluntariamente ante la fiscalía para explicar el contenido de las llamadas telefónicas que supuestamente mantuvo con uno de los principales sospechosos del asesinato. Se trata de Joseph Félix Badio, exdirectivo de la unidad de lucha contra la corrupción del Ministerio de Justicia, que habría sido geolocalizado en el barrio donde se encuentra la residencia privada de Jovenel Moise cuando tuvieron lugar las llamadas realizadas a Ariel Henry a las 4:03 y a las 4:20 de la noche del magnicidio.

El sábado, el primer ministro, en la cuerda floja, denunció el planteamiento del fiscal y lo calificó de ser una distracción. La destitución el miércoles del ministro de Justicia, Rockfeller Vincent, se produce en un momento en el que el primer ministro ha recibido el apoyo de la comunidad internacional, que durante mucho tiempo ha permanecido en silencio ante esta crisis política.

Diplomáticos del Grupo Central (que incluye a representantes en Haití de las Naciones Unidas, la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos y las embajadas de Brasil, Canadá, Francia, Alemania, Estados Unidos y España) se reunieron con Ariel Henry y emitieron un comunicado en su apoyo el miércoles de noche.

“El Grupo Central (...) alienta los esfuerzos emprendidos por el primer ministro, los actores políticos y la sociedad civil haitiana para encontrar un acuerdo consensuado que permita el establecimiento de un gobierno inclusivo y para acelerar el retorno al funcionamiento normal de las instituciones democráticas mediante la celebración de elecciones”, según la declaración publicada el miércoles por la noche.

El cuerpo diplomático insiste también en que “se arroje toda la luz sobre el asesinato del presidente Jovenel Moisey que se busque a los autores y se les haga comparecer ante la justicia”.

Ante las luchas internas por la gestión del poder, los ciudadanos se desilusionan al ver que sus urgencias cotidianas quedan relegadas a un segundo plano. Haití, ya plagado de pobreza extrema, se ha sumido en una crisis humanitaria tras el fuerte terremoto que devastó el suroeste de la isla el 14 de agosto, causando la muerte de más de 2.200 personas.