VICKY EN SEMANA
“Gustavo Bolívar cayó en la trampa y eso se convirtió en un caballo de batalla contra él y el propio Gustavo Petro”
“No puede estimular ni aplaudir ninguna forma de violencia, tiene que descalificar la violencia y exigir resultados”, aseguró el senador y precandidato presidencial Roy Barreras.
En el marco de la entrevista que concedió en Vicky en SEMANA el senador Roy Barreras, uno de los temas abordados fue la controversia alrededor del congresista Gustavo Bolívar. Este último señaló que financió a la denominada primera línea y desde entonces afronta toda suerte de críticas de diversos sectores políticos, además de pesquisas en la Procuraduría General de la Nación y la Corte Suprema de Justicia.
Sobre esta controversia, el senador Roy Barreras se pronunció: “Yo trato de ser muy respetuoso de las opiniones de los congresistas de otros partidos políticos y por supuesto Gustavo Bolívar milita en la Colombia Humana y ha ejercido un liderazgo muy claro que el país conoce, unas posiciones también muy valientes. Pero me parece que ha caído en la trampa de cometer un error que le han cobrado muy caro. Es que salir a sugerir, de pronto de buena fe, que había que salir a apoyar con financiación a los jóvenes que se llaman de la primera línea pues le permitió a la extrema derecha y a sus contradictores decir que Bolívar estaba financiando el vandalismo, cosa que por supuesto no ha hecho”.
Y agregó, Roy Barreras: “Es cierto que eso se convirtió en un caballo de batalla no solo contra Bolívar, sino contra el movimiento social y contra el propio Gustavo Petro, que no ha hecho otra cosa que llamar a la ponderación desde la primera semana de mayo. Cayó en la trampa, de buena fe. Son ligerazas, errores. Cuando uno tiene la responsabilidad de ofrecerle a un país un futuro pacífico no puede estimular ni directa de indirectamente ninguna forma de violencia. Y tiene que descalificar todas las formas de violencia y exigir resultados”. Según dijo Barreras, el problema radica en que “ninguna violencia es útil” y Gustavo Bolívar no ha condenado por igual las formas de violencia en Colombia y, por cuenta de sus declaraciones, ha terminando haciéndole daño al propio candidato Gustavo Petro en las intenciones de éste de ser presidente de Colombia.
El congresista Gustavo Bolívar señaló: “Por defender la vida y los ojos de los valientes jóvenes de la primera línea y sus mamás, tengo procesos en la Corte Suprema y la Procuraduría y serias amenazas de muerte. Sería un honor ser condenado por esta causa”. Sus declaraciones motivaron las anunciadas pesquisas de la Procuraduría General de la Nación. Específicamente, la exdiputada Juanita Cataño radicó ante el Ministerio Público una queja disciplinaria en contra del senador de la Colombia Humana, Gustavo Bolívar, por el apoyo económico que ha promovido en redes sociales para la denominada primera línea, que actúa en el paro nacional.
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Cataño pidió al Ministerio Público investigar las actuaciones del senador, ya que él ha promovido por redes sociales varias “colectas” para apoyar a los jóvenes y madres que integran la primera línea. “Decidí radicar una denuncia contra el senador Gustavo Bolívar por presuntas faltas graves al Código Disciplinario”, explicó la exdiputada, quien aclaró que radicó la queja disciplinaria en su calidad de ciudadana.
Por otro lado, está la Corte Suprema de Justicia, toda vez que Gustavo Bolívar es congresista. SEMANA conoció en primicia la citación que hizo la Corte Suprema de Justicia, puntualmente el magistrado Francisco Farfán Molina, al abogado Víctor Mosquera (defensor internacional del expresidente Álvaro Uribe), quien denunció penalmente al congresista Gustavo Bolívar por colecta a favor de la primera línea.
El documento, en poder de SEMANA, señala que por orden del magistrado Farfán, se dispuso “escucharlo en ampliación de denuncia el próximo miércoles 11 de agosto de 2021, a partir de las 9 de la mañana, a través de la aplicación zoom”. Cabe recordar que el senador Gustavo Bolívar compartió una colecta que estaba haciendo el colectivo Manos Limpias, con la que se busca darles recursos a los manifestantes conocidos como “la primera línea”, que en ocasiones han sido los que terminan enfrentados con la policía y el Esmad.