VICKY EN SEMANA
Los vuelos de Francia Márquez en helicóptero a Dapa: el monto denunciado sobre el gasto incurrido
No cesa la controversia tras el “de malas” y “pueden llorar” de Márquez en su calidad de vicepresidenta de Colombia. En Vicky en Semana, las cuentas que les hicieron a sus viajes.
El representante a la Cámara Miguel Polo Polo habló con Vicky en Semana. Durante la entrevista, el congresista se refirió al “de malas” y “pueden llorar” de la vicepresidenta de Colombia durante la entrevista que concedió a SEMANA. Tras condenar el accionar de la alta dignataria, el congresista le hizo las cuentas de cuánto se está gastando en los referidos viajes.
“Si bien yo creo que la vicepresidenta de la República o el que ostente ese cargo o esa dignidad tiene derecho a hacer uso de las herramientas que el Estado le da por ostentar esa dignidad, sí creo que en este caso la vicepresidenta tiene que saber utilizar estos recursos y optimizarlos, no despilfarrarlos. Por ejemplo, en este caso, el Estado colombiano le da la oportunidad de tener una casa vicepresidencial al lado de la Casa de Nariño. ¿Por qué ella, en lugar de hacer esos excesivos gastos, no se muda a la casa vicepresidencial?”, aseguró Polo Polo.
Luego, citando la información de un tiktoker, el congresista señaló: “Él se llama Ariel Armel y decía que cada hora de vuelo en un helicóptero como el que utiliza la vicepresidenta cuesta 60 millones de pesos. Supongamos que haga dos vuelos a la semana, ida y vuelta. Al mes son aproximadamente 16 vuelos que estarían dando mil millones de pesos, aproximadamente. Exactamente, 940 millones de pesos. Al año son 11.500 millones de pesos. Y a los cuatro años serían, si la vicepresidenta sigue con ese estilo de vida, casi 50.000 millones de pesos despilfarrados de Cali a Dapa”.
Las cuentas del congresista Miguel Polo Polo sobre los viajes en helicóptero de la vicepresidenta Francia Márquez:
Este fue el apartado específico de Márquez en su entrevista con la periodista Vicky Dávila, directora de este medio. Allí se habló de su residencia en Dapa y de los constantes viajes en helicóptero de la fuerza pública.
V. D.: vicepresidenta, déjeme avanzar y vamos a entrar... A usted le emociona todo este tema político y a mí también me gusta, entonces vamos muy bien en la entrevista. Déjeme entrar a un tema que la toca como vicepresidenta, pero que también la toca personalmente. Quiero que hablemos de toda la polémica que se generó por la casa de Dapa, en las goteras de Cali, que es un corregimiento de Yumbo, Dapa es un corregimiento de Yumbo, y el helicóptero.
F. M.: ayer fui.
V. D.: ayer volvió en el helicóptero.
F. M.: no, el fin de semana fui y subí en el helicóptero. Hoy me vine y salí en helicóptero. Y voy a seguir. Las veces que vaya, voy a ir en helicóptero. Le guste a la élite colombiana o no. Yo soy la vicepresidenta de este país, me eligieron los mismos 11 millones y algo que eligieron al presidente. Me eligieron a mí. Y, por ser una mujer que hoy está ocupando el segundo cargo más importante de este país, me merezco el Estado en su conjunto me cuide a mí para yo asegurar, poder hacer mi trabajo y contribuir al cuidado de todos los colombianos y colombianas. Eso lo han hecho con todos los presidentes y vicepresidentes, todos lo han hecho. ¿Por qué a los otros no les hacen escándalo?
V. D.: ¿quiénes lo han hecho? Que me parece interesante...
F. M.: todos los presidentes de Colombia, todos, y todos los vicepresidentes de Colombia han usado todas las aeronaves que tiene el Estado a su disposición para su seguridad. Todos. Sin excepción de ninguno. Entonces, ¿por qué la vicepresidenta pobre, que viene de abajo, humilde, entonces no lo puede usar? No, Vicky. Eso no debe ser. Y pues lo siento mucho, que vayan y me demanden si estoy haciendo algo ilegal. Pero después de haber vivido un atentado frustrado en la vía que conduce a mi casa, donde me ponen ocho kilos de explosivos, pues no me voy a dar el lujo de facilitarles las condiciones para que me maten más rápido. No voy a hacer eso. Y pueden llorar, pueden gritar, pueden hacer todo lo que quieran. Me pueden ir a demandar, si quieren, y que sea un juez que defina si estoy haciendo algo ilegal o estoy haciendo lo correcto.
Vea la entrevista completa con el congresista Miguel Polo Polo:
V. D.: vicepresidenta, ¿qué les dice a quienes han hecho hasta cuentas? Es que cada ida a la casa de Dapa de la vicepresidenta en el helicóptero vale tantos millones.
F. M.: bueno, ¿por qué no hacen las cuentas de los millones que se gastan cuidando al expresidente Uribe? Y merece el cuidado, no estoy diciendo que hay que descuidarlo. Se merece el cuidado, pero él ya no es un funcionario público y lo cuidan. Le aseguro que mi seguridad como vicepresidenta no cuesta lo que vale la de él. Entonces, ¿por qué no cuestionan eso?
V. D.: ¿por qué cree que no lo cuestionan?
F. M.: pues porque soy una mujer negra y porque soy una mujer que viene de abajo. Porque soy humilde.
V. D.: ¿cree que todo está enmarcado en eso? ¿En que es una mujer negra?
F. M.: claro. El clasismo en este país es evidente, el racismo en este país es evidente. Lo acabamos de hablar.
V. D.: si usted fuera blanca, no habrían hecho ningún escándalo de eso.
F. M.: si fuera blanca y de élite, no estuvieran haciendo escándalo porque es normal. Es normal que a una persona de élite, que nació en cuna de oro, la transporten en esos equipamientos y esas aeronaves, pero no es normal que una mujer que trabajó en una casa de familia y que ahora es la vicepresidenta de Colombia se transporte en eso. Pues de malas, y lo siento. Perdónenme los colombianos por decirlo así, pero de malas. Soy la vicepresidenta de este país y, mientras lo sea, el Estado tiene la responsabilidad de brindarme todas las garantías de seguridad necesarias para yo cumplir con mi tarea como vicepresidenta.
V. D.: le mencionaba de la casa. También hubo polémica por cuenta de que Francia Márquez viviera en Dapa. ¿Eso cómo lo vio?
F. M.: también me parece una ridiculez. Ojalá yo pudiera vivir allá en Suárez. Yo estaría feliz si mi mamá estuviera en Suárez y yo pudiera ir las veces que sea necesario a visitarla allá. A verla allá. ¿Pero sabe qué pasó? Hace tres semanas, a mí mamá la fueron a buscar a Suárez.
V. D.: ¿cómo así?
F. M.: gente desconocida.
V. D.: ¿qué le dijeron? ¿Qué pasó? Cuéntenos...
F. M.: o sea, querían saber dónde vivía la mamá de la vicepresidenta. Dejo a mi mamá expuesta o busco un lugar donde mi mamá esté segura. Ahora vulneraron mi seguridad, porque no sólo ubicaron el lugar, sino que georreferenciaron el lugar donde vivía. Como quien dice, vayan por ella. Eso no se hace, Vicky, eso es cruel y miserable. Ahora mi mamá está angustiada porque no sabe si está segura o no en ese lugar después de tres semanas de haber salido de allá porque la fueron a buscar a su casa. ¿Y entonces qué? Y decirme que con mi sueldo, de lo que me pagan a mí, de lo que me gano con mi trabajo yo no soy libre de alquilar una casa, sea cual sea la casa. No la alquilé por lujo, sino por seguridad. Y le digo a Vicky, antes de tomar la decisión de definir cuál era la casa, me pasé todo el tiempo desde que fuimos elegidos, hasta diciembre buscando. Iban los equipos de seguridad que tengo y les preguntaba. ¿Esto tiene las condiciones? Y coronel me decía: ‘No, señora vicepresidenta, aquí hay mucha vulnerabilidad, no es seguro’, y así casa por casa. A tal punto de hasta pensar en hacer un crédito para ver la posibilidad de comprar una casa. Se lo pedí al banco agrario y eso tampoco es un delito. Que yo le diga al Banco Agrario, ‘necesito que me hagan un crédito para resolver un problema de vivienda’. Entonces la gente está queriendo hacer un reguero donde no lo hay.
V. D.: ¿hizo el crédito en el banco?
F. M.: no lo he hecho.
V.D.: pero lo quiere hacer porque quiere comprar su casa.
F. M.: lo quiero hacer porque no quiero pagar arriendo, quiero comprar mi casa, eso no es delito. Después de que no me hurte los recursos del Estado yo puedo hacer un crédito de vivienda y lo voy pagando con mi sueldo como lo hacen todos los ciudadanos que tienen un empleo estable, hacen un crédito de vivienda y lo van pagando. La ley a mí no me impide hacer eso.
V. D.: ¿cuánto está pagando?
F. M.: en Dapa o donde sea. Donde me diga ‘le vendo’ y yo tenga para comprarla, lo voy a comprar.
V. D.: o sea, se va a comprar una casa y ese es su objetivo personal en estos días.
F. M.: le voy a comprar una casa, pues tengo que garantizar la estabilidad a mi familia y ahora no la tengo. No la tienen, porque otros no tenían que preocuparse por eso. Otros cuando llegaron a la vicepresidencia tenían su mansión, yo tengo un apartamento en el Caney en Cali, donde dos veces vulneraron la unidad. Me preocupé no solo por mí y las personas, eso me obligó a salir a buscar. Si no, o estaría en Cali en el Caney tranquila o estaría allá Yolombó en mi comunidad.
V. D.: ¿cuánto está pagando de arriendo?
F. M.: no le voy a decir, eso no tengo que decírselo al país.
V.D.: se lo pregunto, no por una crítica sino por una razón, a veces es fácil y favorable para uno pagar un crédito que un arriendo, que el arriendo al final se pierde.
F. M.: cuando sea su momento, les pasaré los recibos. Pero así es y eso es lo que pienso hacer. Le hacen un estudio a uno con el sueldo que uno gana y el banco le dice cuánto le pueden prestar y uno se ajusta a eso y ya.