Vicky en Semana
“Nadie se vuelve rico con un salario de congresista”: Jorge Enrique Robledo
En Vicky en Semana, el candidato a la Alcaldía de Bogotá reflexionó sobre el ejercicio político y las razones por las que hay quienes terminan cediendo ante la corrupción.
Jorge Enrique Robledo es uno de los aspirantes a la Alcaldía de Bogotá en la presente campaña. Su trayectoria política ha destacado puntualmente en la Rama Legislativa, pues se desempeñó como senador de la República durante varios periodos.
En el espacio de Vicky en Semana, el exsenador recordó su paso por el Congreso y reflexionó sobre el cáncer que yace en su interior: la corrupción. Para su análisis, tomó como punto de partida el salario que devengan los congresistas y la ambición que nace dentro de algunos de ellos.
“Nadie se vuelve rico con un salario de congresista”, enfatizó Robledo en su introducción. A renglón seguido, precisó que, si se presenta ese escenario, existen dos razones posibles: “O se corrompen o sacan; por otro lado, es heredero de una fortuna o cosas por ese corte”.
El exsenador indicó que desde siempre tuvo una ventaja, pues cuando comenzó su carrera política, hace unos 50 años, renunció a una idea popular que influenciaba la mentalidad de algunas personas de su generación: “Estudie duro, cásese bien y consiga plata”.
“Yo me casé muy bien, pero no conseguí plata. Y no conseguí plata porque la decisión que tomé de vida en la política incluyó que mi vida no iba a ser volverme rico. No tenía ese interés. Y tomé una decisión que sigo sosteniendo y es que, en política, si yo tengo que escoger entre el interés personal y el interés común, escojo el interés común, así tenga que sacrificar intereses personales”, señaló.
Según argumentó, su decisión de vida implicó obligatoriamente una negativa a la idea de corromperse, pues no aprovecharía su posición política para obtener beneficios de ningún tipo.
“Descubrí otra cosa rápidamente, y en eso Carmen (su esposa) es superjuiciosa, tenemos la misma posición. Es mucho más fácil disminuir el gasto que aumentar el ingreso. Entonces, nosotros hemos sido de vida austera toda la vida. Vivimos lo mejor que podemos y nos damos nuestros gustos, porque me lo ha permitido mi vida, pero no somos personas -y Carmen mucho menos- que necesitemos grandes cosas para estar contentos o ser felices”, trascendió Robledo en el espacio de Vicky en Semana.
“Una parte muy grande de la política se hace a punta de corrupción”
No es un misterio que el salario que devengan los congresistas es voluminoso, sin embargo, no resulta suficiente para inflar el patrimonio de una manera exagerada. Para el exsenador, en este ámbito figura una de las tristes realidades de la política.
“Una parte muy grande de la política, no toda, se hace a punta de corrupción. O sea, si no es con mucha plata, no son capaces de elegirse. En cambio, en mi caso, todos mis votos son de opinión, y si no salgo elegido, pues no salgo y no me importa (...). En la política tradicional, si no es con plata, es muy difícil”, analizó.
La sumatoria de estos elementos, bajo la lectura de Robledo, deriva en que ciertos políticos caigan en la corrupción con relativa facilidad.
“(...) Y más grave aún, el caso Odebrecht es el clásico, se roban la plata del Estado y, después, con esa plata, compran las elecciones, o sea que se las roban. Eso le hace un daño descomunal a la lógica democrática porque, entonces, usted puede ser el peor político del mundo y ganar las elecciones porque las está ganando es con todas las formas fraude”, sintetizó el candidato a la Alcaldía de Bogotá.
Finalmente, Jorque Enrique Robledo mencionó que “uno tiene que estar dispuesto a perder”, y la política no es la excepción. “Si se pone la ambición como el propósito de la vida a cualquier precio, pues de ahí a corromperse no hay sino un paso”, concluyó el exsenador en el espacio de Vicky en Semana.