Vicky En Semana
“Piedad Córdoba era la directora del ‘teatro’”: Jaime Felipe Lozada, hijo de Gloria Polanco
En diálogo con ‘Vicky en Semana’, el congresista aseguró que Hugo Chávez definió un libreto político con la liberación de los secuestrados.
Piedad Córdoba está hoy en el ojo del huracán a raíz de los fuertes señalamientos que la vinculan con un supuesto plan para beneficiar a las entonces Farc en el marco del canje de prisiones por secuestrados en que se trabajaba para el año 2007.
En diálogo con Vicky en Semana, el congresista Jaime Felipe Lozada, hijo de Gloria Polanco —quien permaneció secuestrada por las Farc entre 2001 y 2008—, manifestó que él estuvo en Venezuela con Piedad Córdoba y Andrés Vásquez, su exasesor.
“Yo pude constatar que Piedad Córdoba era una persona, no solo muy cercana al régimen venezolano o al presidente Chávez, sino que era la persona encargada de articular y coordinar la agenda política de las liberaciones de los secuestrados”, comentó Lozada.
Tendencias
En principio, sobre las declaraciones hechas por el exasesor de Piedad Córdoba en relación con que ella era la misma Teodora, de las Farc, Lozada señaló que se trató de una revelación que “no le sorprendía”.
“Yo conocí a Andrés Vásquez en Venezuela, en Caracas, cuando vivimos dos meses esperando la liberación de mi mamá en el año 2008, y sabía que era no solo el hombre de confianza de Piedad Córdoba, sino la persona encargada de articular y organizar la agenda de Piedad Córdoba con la guerrilla de las Farc en territorio venezolano”, afirmó.
Según narró Lozada, Córdoba era la encargada, con el mismo Hugo Chávez y con Iván Márquez (quienes se reunían constantemente), de definir quiénes iban a ser liberados.
Así mismo, mencionó que él y sus hermanos le decían a Córdoba que les ayudara a liberar a su mamá, Gloria Polanco, y ella decía que en eso estaba, que debían esperar, pues “se estaban haciendo las gestiones correspondientes”.
“Por su cercanía con el gobierno venezolano y con la guerrilla de las Farc, por la confianza que ella les generaba a las partes, [era] la encargada de coordinar y de articular las gestiones y la agenda de las liberaciones”, anotó Lozada.
Un “teatro” en el que secuestrados y familiares fueron “títeres”
En ese sentido, Jaime Felipe Lozada aseguró que “el gobierno de Hugo Chávez definió un libreto político con la liberación de los secuestrados y Piedad Córdoba, he dicho yo, fue la directora de la ‘orquesta’ o del ‘teatro’ para lograr que este libreto político pudiese tener réditos electorales, bien fuera para Hugo Chávez o —como lo ha dicho su exasesor Andrés Vásquez— para ella misma”.
“Nosotros los familiares de los secuestrados y los mismos secuestrados fuimos títeres de ese montaje, de ese ‘teatro’; fuimos actores de ese ‘teatro’ montado por Hugo Chávez, por la guerrilla de las Farc, y que Piedad Córdoba lideró para sus fines políticos electorales”, agregó el hijo de Gloria Polanco, hoy representante a la Cámara por el Partido Conservador.
Este detalle, precisamente, es el que —dice Lozada— los “lacera” y hoy ven con “profundo desazón y tristeza”, que las liberaciones de los secuestrados no tenían netamente un fin humanitario, sino uno político y electoral.
“Para que Hugo Chávez se fortaleciera en la región, para que ganara el referendo en Venezuela y, por supuesto, para tener una exposición mediática como dirigente y líder humanitario en el continente y en el mundo”, agregó a su declaración.
Al respecto, Lozada reiteró que fue Piedad Córdoba quien articuló e hizo esas gestiones posibles para beneficio tanto de Hugo Chávez como para la guerrilla de las Farc.
No obstante, Jaime Felipe Lozada reconoció que sin la intermediación de Piedad Córdoba, no solo su madre (Gloria Polanco), sino los demás secuestrados que fueron liberados, no hubiesen podido salir del cautiverio y, probablemente, habrían fallecido.
Sin embargo, reiteró que “el tema, además de esa gestión, es cómo se llevó la demora —por lo que dice su exasesor— de otras liberaciones y cómo se ponía en un libreto quiénes salían primero y quiénes no, dependiendo del vaivén político y de las relaciones políticas entre Piedad Córdoba, el gobierno venezolano y del interés político también de la guerrilla de las Farc”.
“Sin lugar a dudas, en mi caso, debo agradecer que mi mamá fue liberada, gracias a Dios, pero en segundo caso también debe la justicia investigar y debemos las víctimas conocer la verdad sobre el trasfondo político y poco humanitario que tuvo en estas gestiones Piedad Córdoba”, concluyó Lozada.