La semana pasada tuvo lugar una reunión inusual. El presidente del Jockey Club, Alfonso Dávila Ortiz, decidió que era conveniente que algunos socios del club pudieran conocer y escuchar los planteamientos de Horacio Serpa, quien no frecuenta mucho ese establecimiento. Serpa aceptó y se reunió en un reservado con lo más granado de la sociedad bogotana. Allí estuvieron José Samper, Ignacio Umaña de Brigard, Roberto García y Rodrigo Llorente, entre otros. Resultado: todos salieron descrestados con el candidato.