SALUD

Siete signos de problemas de tiroides

¿Sube de peso sin explicación? ¿Se siente cansancio frecuentemente? ¿Sus pies y manos permanecen fríos? Estas son algunas de las señales que pueden indicar que algo no funciona bien con su tiroides.

13 de diciembre de 2016
Según cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) estas afecciones las padece cerca del 10% de la población. | Foto: Archivo Particular

La tiroides es una glándula con forma de mariposa ubicada en el cuello donde se produce la hormona tiroidea (TH), responsable de mantener el equilibrio hormonal y el metabolismo del organismo, la temperatura corporal y el ritmo cardíaco. Por eso, cuando se altera su funcionamiento muchas funciones del organismo también se descontrolan. 

Cuando la glándula no segrega las hormonas tiroideas en cantidades adecuadas se presenta el hipotiroidismo, “en muchos casos debido a una insuficiente ingesta de yodo”, explica el médico Rafael Ordóñez. Otra condición común es el hipertiroidismo, que se presenta cuando hay sobreproducción de la TH.

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Otros estados de esta enfermedad son tiroiditis, es decir, la inflamación de la glándula y se presenta generalmente en la etapa del postparto; nódulos tiroideos, que es la presencia de tumores; cáncer de tiroides, que no es muy común y el bocio, que es el aumento del tamaño de la glándula. “Que la tiroides esté sana es importante porque cada tejido y célula tiene que ver con esta hormona y si se altera, puede verse el impacto en diferentes procesos del organismo”, afirma Ordóñez.

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No hay teoría única que explique por qué se presentan estas alteraciones, pero tener problemas de tiroides es una condición bastante común, sobre todo en mujeres. Según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, una de cada ocho mujeres desarrollará problemas con esta glándula a lo largo de su vida y según cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), estas afecciones las padece cerca del 10% de la población. 

Para diagnosticar algún problema con la tiroides se requiere de un examen de la hormona estimulante de la tiroides (TSH), que se trata de una sencilla prueba de sangre. Si el problema se detecta oportunamente, se puede controlar sin complicaciones y llevar una vida normal. Estas son algunas señales de que algo no anda bien con esta glándula. 

- Cambio de peso: Si se alimente bien y hace ejercicio pero aumenta de peso o le cuesta demasiado bajar unos kilos, está frente a uno de los mayores signos de hipotiroidismo. Este efecto ocurre porque no se está produciendo suficiente hormona tiroidea, lo que hace que el metabolismo se ralentice y que se quemen menos calorías. Pero ojo, si el caso es el contrario, que se reduzca el peso, puede ser indicio de hipertiroidismo, que se origina porque hay demasiada producción de TH y la energía recibida de los alimentos se utiliza más rápido. Esta alteración también puede generar cambios en el apetito: si el problema es de hipotiroidismo, éste disminuye porque el cuerpo utiliza menos energía. Si se trata de hipertiroidismo, el cuerpo pide más comida para funcionar.

- Cambios drásticos en el estado de ánimo: El desequilibrio de las hormonas tiroideas pueden causar que el estado de ánimo se altere fácilmente. Las personas con hipotiroidismo pueden estar frecuentemente tristes y deprimidas. “Se cree que es por el impacto de la función tiroidea sobre la serotonina, la sustancia química que hace que el cerebro se sienta bien”, explica Ordóñez. Por su parte, quienes presentan hipertiroidismo suelen permanecer agitadas, nerviosas y ansiosas porque siempre están aceleradas.

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- Cansancio y fatiga: Si luego de una plácida siesta o una buena noche de sueño se levanta con cansancio, puede ser un signo de hipotiroidismo, pues al producirse menos TH, el cuerpo funciona más lento. El efecto contrario, hipertiroidismo, produce más palpitaciones y sensación de nerviosismo, como si la persona se hubiera bebido demasiado café y estuviera en estado de alerta siempre.  

- Problemas de fecundación: El ciclo menstrual cambia cuando se presentan cambios en la función de la tiroides. Cuando empieza a ser más frecuente y ligero, indicaría hipertiroidismo. Cuando es más demorado y frecuente, entonces se trataría hipotiroidismo. En ambos casos, el ciclo se altera y la ovulación normal se interrumpe, lo que puede aumentar el riesgo de infertilidad. “Se aconseja que las mujeres que quieran quedar embarazadas se aseguren que todo está bien con la glándula para evitar complicaciones”, dice el médico. 

- Piel y cabello quebradizo: Cuando la tiroides es poco activa, la piel empieza a resecarse. No es claro por qué sucede, pero los expertos piensan que es debido a la lentitud de la actividad de las células de la piel y las glándulas sebáceas. Así mismo sucede con el cabello porque los nutrientes no llegan. Así, empieza a resecarse, debilitarse y caerse. 

- Estreñimiento y diarrea: Como la tiroides regula el metabolismo, cuando el problema es de poca producción la digestión se vuelve lenta y genera problemas de estreñimiento. Por el contrario, cuando la tiroides es hiperactiva se pueden presentar más movimientos intestinales de lo normal provocando diarrea. 

- Cambios de temperatura: La sensación permanente de frío puede ser un síntoma de hipotiroidismo. Esto ocurre a causa de un metabolismo lento. Si la sensación es de calor o estar sudando todo el tiempo, podría ser causa del trabajo exagerado de las células, condición común en el hipertiroidismo.