VI Cumbre de Sostenibilidad
Así funcionan las droguerías incluyentes de Colsubsidio
En total son 83 establecimientos los que se adaptaron para atender población en condición de discapacidad en Bogotá, Cundinamarca, Antioquia, Valle del Cauca, Bolívar, Santander, Magdalena y Atlántico. Cuentan con intérprete virtual en Lengua de Señas y marcación de medicamentos con sistema Braille para identificarlos y conocer su fecha de vencimiento, entre otras novedades.
Debido a las dificultades que tienen las personas con discapacidad para acceder de manera autónoma y segura a los medicamentos y productos para el cuidado de la salud, Droguerías Colsubsidio diseñó un modelo de atención incluyente. Según María Isabel Buitrago, líder de la estrategia de Sostenibilidad de Droguerías Colsubsidio, el objetivo es que las personas con discapacidad física, auditiva y visual tengan acceso a la dispensación de productos para el cuidado de la salud en condiciones que minimicen las barreras físicas, tecnológicas, de comunicación e información y se tenga un uso seguro y racional de los medicamentos.
Desde el año 2019, explica Buitrago, Droguerías Colsubsidio se enfocó en este objetivo y mediante talleres, entrevistas y encuestas, además de la interacción con entidades que conocen el sector, logró conocer las necesidades y expectativas de los usuarios en atención.
De los 538 establecimientos con los que cuenta la cadena, 83 ya tienen una adaptación incluyente en Bogotá, Cundinamarca, Antioquia, Valle del Cauca, Bolívar, Santander, Magdalena y Atlántico. Buitrago detalla que los colaboradores fueron capacitados en protocolos de atención para cada tipo de discapacidad, humanización del servicio, Lengua de Señas Colombiana, sistema Braille, entre otros aspectos.
A continuación, presentamos algunas de las novedades que Droguerías Colsubsidio desarrolló pensando en el bienestar de esta población:
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Accesibilidad en la infraestructura
De acuerdo con Buitrago, las Droguerías Colsubsidio cuentan con guías táctiles en el piso y mapa para el reconocimiento y ubicación de áreas y productos que están clasificados en categorías. “En algunos establecimientos las góndolas tienen un diseño que facilita el acceso a los productos de manera fácil y segura, mientras que los corredores permiten el desplazamiento en silla de ruedas”, señala. Así mismo, las droguerías cuyo espacio lo permite cuentan con baños que cumplen con los requerimientos de diseño y tienen un sistema de alarma que en caso de emergencia se activa con sonido y luz.
Comunicación inclusiva
Para orientar a los usuarios se utilizan herramientas como señalización en lengua de señas, Braille e idioma inglés y español. En algunos establecimientos incluyentes, asegura Buitrago, se cuenta con videos con audio, interpretación en lengua de señas y closed caption para informar sobre la prestación del servicio, el uso racional de medicamentos, la promoción de la salud y prevención de enfermedades.
“Con la finalidad de identificar los medicamentos con Braille para facilitar el uso de personas con discapacidad visual, propiciar una mayor independencia y disminuir el riesgo de equivocación se realiza la marcación individual de los envases y/o empaques con etiquetadoras”, precisa.
Por último, la cadena diseñó un manual de pictogramas que forma parte de una estrategia para realizar la adecuada dispensación a las personas sordas no usuarias de Lengua de Señas, con discapacidad cognitiva, adulto mayor y población que no lee o escribe. “De esta manera se les indican las recomendaciones para la toma de sus medicamentos mediante dibujos”.
Tecnología incluyente
En las droguerías incluyentes se dispone del servicio de interpretación en lengua de señas Colombiana (LSC) a través de un aplicativo, que por medio de videollamada comunica con un intérprete, quien hace de mediador de la comunicación entre la persona sorda y los auxiliares de la farmacia en el momento de la atención, garantizando la orientación durante el servicio y la entrega de información sobre el tratamiento, además de recomendaciones de autocuidado.