La espuma en Mosquera y los malos olores pueden generar enfermedades: defensor del pueblo

La imagen de ver grandes nubes de espuma maloliente sobre casas en las que habitan niños y ancianos en Mosquera, Cundinamarca, le ha dado la vuelta al mundo. La contaminación crece como espuma, literalmente, en el sector de Los Puentes, a la orilla del río Balsillas.

La Defensoría del Pueblo les solicitó este domingo a las autoridades ambientales y territoriales tomar medidas inmediatas para garantizar el derecho fundamental a la salud y el bienestar de los habitantes aledaños a este río.

El defensor Carlos Camargo advirtió que “los altos volúmenes de espuma, además de los malos olores, pueden generar enfermedades en la piel, problemas respiratorios y, sin duda, afecta el bienestar de esta comunidad en Mosquera”.

De ahí que haya hecho el llamado “a las autoridades nacionales, territoriales y a la CAR Cundinamarca para que aúnen esfuerzos y adopten las medidas necesarias para solucionar esta problemática”.

La entidad señala que la situación obedece a que la cuenca hidrográfica del río Bogotá presenta un alto grado de contaminación generada a partir de vertimientos de aguas residuales domésticas e industriales, malas prácticas agropecuarias y un manejo inadecuado de basuras y vertimientos.

Camargo le solicitó a la Alcaldía de Mosquera que continúe el dragado y la limpieza del río en la zona y, de esta manera, se reduzca el impacto generado por la espuma. De igual modo, se pide adelantar cronogramas de mantenimiento en los sitios en los que aparezca este fenómeno.

“Una vez las diferentes autoridades lleven a cabo las visitas de seguimiento y control, desde nuestra delegada para los Derechos Colectivos y del Ambiente y nuestra Regional Cundinamarca convocaremos una mesa de trabajo con el fin de garantizar la protección efectiva de los derechos fundamentales a la salud y a un ambiente sano de las comunidades afectadas”, puntualizó el defensor del pueblo.

Así vive la comunidad

SEMANA visitó el lugar en el que al llegar las personas corren como si estuvieran en una carrera de obstáculos, tratando de evitar que las burbujas los alcancen. La comunidad indica que es lo mismo que viven desde hace aproximadamente cuatro décadas, y que se incrementa en temporada de lluvias.

Debido a que hay una caída de agua que con la fuerza hace que se mezclen y activen los agentes contaminantes, estos pueden ser vertidos en el afluente.

La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) hace un llamado para que tanto los habitantes del sector como quienes laboran en las industrias “tomen conciencia y eviten el uso desmedido de detergentes y químicos. Con el incremento de las lluvias aumenta la turbulencia en los ríos y esto hace que la carga orgánica se agite y se genere la espuma”.

María hace un llamado para que las autoridades tomen medidas de raíz. Asegura que su hijo, de menos de dos años de nacido, presenta infecciones gastrointestinales producidas por el ambiente en el que está creciendo. “El niño intenta jugar con la espuma pensando que son pompas de jabón, además coge las paredes, las sillas y todo esto está contaminado porque por ahí han chocado las nubes contaminadas”.

Hay momentos en los que se evita pronunciar palabra, pues el tapabocas no alcanza a detener la oleada de olores fuertes que se levantan en el barrio. Este jueves organismos de socorro llegaron a limpiar la cuenca hídrica, con miembros de la Defensa Civil, el cuerpo de Bomberos y funcionarios de la CAR. Con la ayuda de maquinaria amarilla empezaron el dragado, retiraron kilos de hierba que hace que el agua no corra con la misma facilidad y genera una mayor producción de espuma.

¿Qué medidas han tomado?

El gobernador Nicolás García Bustos indicó que se apropiaron 130 mil millones de pesos para la recuperación de la laguna de La Herrera y del río que pasa por la zona. “Nosotros desde que llegamos al gobierno iniciamos este proceso”, indicó el mandatario departamental. Desde el viernes se vienen adelantando trabajos de dragado del afluente afectado.

Además, indicaron que la CAR está realizando estudios para determinar con exactitud qué tipo de sustancias hay en el río que generan esa reacción. Algo que también se evidencia en el Salto del Tequendama. Entre las acciones a ejecutar, en los próximos días los organismos de socorro recibirán una sustancia que ayudará a diluir la espuma.