Aplazan debate del proyecto que busca prohibir los plásticos de un solo uso en el país

Esta iniciativa legislativa no ha tenido un camino fácil. Es la segunda vez que este proyecto hace curso en el Congreso, pero su avance es lento debido a que son muchos sus detractores. El primer proyecto presentado se hundió el año pasado por esta misma época y en esta oportunidad la iniciativa ya lleva un año en trámite y solo ha surtido un debate.

Lo grave de esta situación es que estos elementos a los que el mundo busca declararles la guerra, han recobrado fuerza a raíz del coronavirus, para desgracia del medio ambiente, que se ve gravemente impactado por esta problemática y por ello las medidas que se adopten para limitar su utilización son determinantes.

El representante a la Cámara, Juan Carlos Losada, autor de la iniciativa, ha insistido en que este es un proyecto urgente, pues se requiere ponerle freno al consumo de este tipo de productos que tanto impacto causan en el medio ambiente y que se ha disparado por cuenta de la pandemia.

La iniciativa superó su primer debate en la Cámara en diciembre del año pasado y la segunda discusión en esta misma Corporación estaba agendada para este miércoles, 9 de junio. Sin embargo, luego de que se votara de manera positiva el informe de ponencia, algunos representantes, entre ellos: Christian Munir Garcés, Gabriel Jaime Vallejo y Armando Zabarain, radicaron proposición de aplazamiento, aduciendo la necesidad de revisar el proyecto con los gremios relacionados al sector de la producción y comercialización de plásticos y con el Gobierno Nacional.

Losada precisó que estos parlamentarios desconocen que este proyecto se ha radicado en dos ocasiones y que, durante ambos trámites se han realizado alrededor de 11 audiencias públicas y diferentes mesas de trabajo con la Asociación Nacional de Empresarios (Andi), Acoplásticos y Tetrapack, entre otros, para revisar y ajustar el articulado.

El congresista aseguró que “por culpa de la inconciencia, la avaricia y la codicia de unos pocos que se llenan los bolsillos a costa de la destrucción del planeta”, el proyecto no avanza e invitó a sus colegas a recordar que deben legislar para la vida.

Luego del aplazamiento de la discusión en segundo debate, la Mesa Directiva de la Cámara creó una subcomisión que estudiará la iniciativa, con el fin de discutir y analizar los temas que generan preocupación en los detractores de la misma.

Cifras alarmantes

Para Losada, las cifras que se mueven en torno a la contaminación con plástico son alarmantes y requieren tomar acciones rápidas, pues sus impactos sobre el medio ambiente no dan espera.

Dice que para el 2050 habrá en el mundo alrededor de 12.000 millones de toneladas de basura plástica en los vertederos y espacios naturales. “Los estudios muestran que el 90 % del agua embotellada y el 83 % del agua del grifo contiene microplásticos y si atáramos las bolsas plásticas que se usan cada hora podríamos envolver la Tierra 7 veces. Son cifras impresionantes para elementos que máximo se usan dos veces y duran cientos de años en la tierra como basura”.

La iniciativa, que fue radicada por segunda vez el 20 de julio del año pasado, luego de realizarle ajustes basados en las audiencias públicas realizadas para alcanzar consensos, busca prohibir en el país los siguientes elementos de plásticos de un solo uso: bolsas desechables utilizadas para embalar periódicos, revistas, facturas, alimentos a granel, así como las utilizadas en las lavanderías; mezcladores y pitillos para bebidas.

De igual forma, en el proyecto se incluye la prohibición de soportes plásticos para las bombas de inflar; envases y recipientes para contener o llevar alimentos de consumo inmediato; láminas o manteles para servir, empacar, envolver o separar alimentos de consumo inmediato; vajillas plásticas, soportes plásticos de los copitos de algodón o hisopos flexibles con puntas de algodón; entre otros.

Las prohibiciones tendrían una gradualidad distinta según los análisis que se han realizado frente a la posibilidad de sustituir estos elementos con otros más amigables con el ambiente.

También establece unos porcentajes de recolección y aprovechamiento para elementos plásticos que pueden ser reciclados como las botellas que contienen bebidas y que, usualmente, están elaboradas de PET, así como medidas para evitar la contaminación plástica en zonas protegidas o en latitudes de la geografía nacional que no cuentan con la capacidad de gestionar los desechos plásticos que llegan, por ejemplo, con el turismo o en los aviones.

Sin embargo, en este momento no es claro el futuro del proyecto que, de no ser agendado antes del 20 de junio de este año, deberá esperar a la siguiente legislatura para cursar los tres debates que le restan antes de convertirse en Ley de la República.