FLORA
Orquídea, una flor emblemática amenazada y seis plantas que siguen su preocupante destino
La deforestación, ganadería extensiva, minería ilegal, extracción ilícita de madera, así como el cambio climático son las principales amenazas a las que se enfrentan estas especies.
Problemáticas como el cambio climático, la deforestación, la extracción de madera ilegal y el avance de la frontera agrícola le siguen pasando una costosa factura a los ecosistemas, poniendo en riesgo centenares de especies de plantas que son determinantes para muchos seres vivos.
Las plantas no solo son fuente de alimento y de materias primas, sino que son ecosistemas en sí mismas. Purifican el aire, regulan los ciclos del agua, conforman hábitats para millones de especies, soportan el sistema de vida del que el hombre hace parte con procesos como la fotosíntesis y polinización.
Muchas de ellas hacen parte de alguna categoría de amenaza tanto a nivel nacional como internacional. Solo en Colombia, en donde hay más de 27.000 especies de plantas registradas, 796 están categorizadas en alguna escala de riesgo.
La tala de bosques para el desarrollo de actividades como la minería ilegal, los cultivos ilícitos y la ganadería extensiva; así como el cambio climático que se ve reflejado en sequías, incendios, olas de calor e inundaciones, hacen parte de la lista de amenazas que impactan a estas especies.
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”La sobreexplotación de muchas especies de flora está ligada a temas comerciales, por ejemplo, en el caso de algunos árboles, las empresas solo utilizan las especies más conocidas en el mercado, que son las vulnerables, y no permiten que se regeneren o cumplan ciclos de reproducción. Tampoco invierten en investigación ni tecnología para el uso de especies menos conocidas que puedan darle un respiro a las más amenazadas”, dice Miguel Pacheco, especialista forestal de WWF-Colombia.
Solo en árboles, Colombia tiene alrededor de 5.700 especies. Sin embargo, las que se enfrentan a mayores presiones de la industria maderera son las que tienen maderas más finas, es decir, las que tienen propiedades las hacen muy resistentes a picaduras de insectos, torceduras, agrietamientos y otros defectos.
“En su mayoría no requieren tanta inversión antes de ser comercializadas, lo que las hace más vulnerables”, apunta Pacheco. Para el experto, informarse sobre las especies que están en vías de extinción o en alguna categoría de amenaza; evitar la compra de vida silvestre y elegir madera legal, son algunas de las acciones que cualquier persona puede tomar para reducir las amenazas que enfrentan las especies vegetales.
Estas son 10 especies categorizadas bajo algún riesgo de amenaza, de acuerdo con una selección realizada por WWF Colombia. Algunas de ellas están amenazadas no solo en el país, sino también en algunos casos a escala mundial y se encuentran reseñadas en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Especies maderables
Abarco (Cariniana pyriformis)
Cedro (Cedrela odorata)
El cedro se distribuye por toda América Tropical y en el territorio nacional ha sido registrada casi en todos los departamentos, excepto en cuatro: Guainía, Norte de Santander, Vaupés y Vichada. Es una madera que se utiliza para la elaboración de muebles, puertas, instrumentos musicales y artesanías, entre otros. El 60 % de sus poblaciones se ubican en regiones de explotación intensiva, razón por la que ha sido declarado en amenaza. En Colombia se encuentra En peligro.
Chanul (Humiriastrum procerum)
Este árbol solo ha sido registrado para los bosques del Pacífico colombiano y ecuatoriano en alturas inferiores a los 800 metros. Crece sobre las colinas en los bosques húmedos tropicales de tierra firme. Su madera tiene una gran cantidad de usos como construcciones navales, vigas, pisos, escaleras y muebles. Todas las zonas en las que se ha encontrado son de alta explotación maderera, razón por la que se encuentra en Peligro crítico.
Palmas
Sin embargo, no solo los árboles maderables enfrentan diversas amenazas. En una condición similar se encuentran algunas de las principales especies de palmas en el país. Precisamente en en estas plantas, Colombia ocupa un lugar privilegiado. De acuerdo con datos de la Red de Jardines Botánicos, en el territorio nacional hay 256 referencias, lo que ubica a Colombia como el tercer país en el mundo después de Malasia y Brasil. Estas plantas se pueden encontrar desde el nivel del mar hasta los 3.200 metros de altura y sus componentes las convierten en una fuente especial de alimentos del bosque tropical para la vida silvestre.
Las palmas conforman la tercera familia de plantas con mayor uso en los trópicos después de las gramíneas y las leguminosas. Se estima que el 20 % de ellas está en peligro de extinción.
Coquito esbelto (Reinhardtia gracilis)
En el país es apreciada como una planta ornamental. La zona de bosque húmedo tropical a la que pertenece ha sido objeto deforestación para actividades agropecuarias, especialmente el piedemonte de la Serranía del Darién. Está categorizada como en Peligro crítico.
Mararay macanillo (Aiphanes graminifolia)
Es una especie conocida solamente en la vertiente occidental de la Cordillera de Oriental, en el departamento de Santander. Crece al interior de un relicto de bosque húmedo premontano, ecosistema dominado por robles en su parte más alta. Por su ubicación reducida, su conservación no está asegurada y por ello también está en Peligro crítico.
Orquídeas
Colombia tiene la fortuna de ser el país con mayor número de especies de orquídeas en el mundo. Se trata de especies que están presentes en casi todos los ecosistemas, excepto en regiones con nieves perpetuas o en ambientes extremadamente desérticos. En Colombia, su principal amenaza está en la destrucción de sus ecosistemas naturales por la deforestación de los boques y la transformación de los hábitats, ya que esta familia de plantas necesita de cobertura boscosa para su establecimiento y desarrollo. Por ejemplo, en un solo árbol en algunos sitios en Colombia, se pueden encontrar diversidad de especies.
Flor de mayo (Cattleya trianae)
Azucena (Cattleya quadricolor)
Esta especie se encuentra en la cuenca alta del río Cauca (y posiblemente en la cuenca del río Garrapatas-San Juan) en los departamentos de Valle del Cauca, Quindío y Risaralda. Hasta la década de 1940, aún era abundante en los remanentes de bosque en el norte del Valle del Cauca, desde Bugalagrande hacia el norte, por las laderas del Quindío y Risaralda. Sin embargo, su recolección excesiva desde hace más de cien años y la disminución de su hábitat por la deforestación ha tenido un impacto negativo sobre sus poblaciones. Hoy está En peligro.
Masdevallia apparitio
Esta especie es conocida de una sola localidad en el norte de la Cordillera Occidental de Colombia en el municipio de Urrao, en el departamento de Antioquia. Tiene un uso ornamental. Su mayor amenaza es la destrucción de su hábitat por cuenta de la deforestación y por ello se encuentra en Peligro crítico.
Restrepia aspasicensis
Se trata de una especie que se ha registrado en la Cordillera Oriental, en la región del municipio de Aspasica (Norte de Santander). Posiblemente también se encuentra en el occidente de Venezuela. Tiene usos ornamentales, a pesar de tener un tamaño pequeño. La deforestación y destrucción de su hábitat es su principal amenaza. Está en Peligro crítico.
Bromelias
Billbergia ambigua
Es una especie endémica del norte de la Cordillera Central de Colombia, conocida solo en la localidad de Providencia (cuenca del río Anorí), en el departamento de Antioquia. Se ha registrado en un bosque húmedo tropical, ecosistema que ha sufrido distintas amenazas: desde la extracción de oro (iniciada en la década de 1940) hasta el establecimiento de cultivos ilícitos. Se encuentra en Peligro crítico de extinción.
De acuerdo con WWF, las categorías de amenaza en las que se encuentran estas diversas especies son establecidas por el Libro rojo de plantas de Colombia, que a su vez sigue los criterios propuestos por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. La clasificación planteada en este artículo toma como fuente principal el Libro rojo.