Tecnología
¿Adicto a los videojuegos?: el truco para pasar horas jugando sin que se incremente la factura de la luz
Reducir el consumo de energía es vital para no sufrir un golpe en el bolsillo.
Con el paso de los años los videojuegos se han convertido una opción de entretenimiento muy popular entre personas de diferentes generaciones, por esa razón hoy en día es común que algunas personas usen por un par de horas su Xbox, PlayStation o Nintendo Switch, entre otros, para desestresarse luego de una dura jornada de trabajo, después del colegio o la universidad.
Pero ante un posible incremento en el precio de la electricidad, pasar varias horas jugando videojuegos puede generar un duro golpe al bolsillo de los fanáticos de ese pasatiempo.
Ante esta situación, se hace necesario adoptar medidas que permitan reducir el gasto de energía sin tener que alejarse por completo de los juegos de video.
¿Cómo bajar el gasto de energía mientras se juega en la PlayStation o Xbox?
No depender del modo reposo
Algunos jugadores suelen dejar su consola en modo reposo como un recurso para reducir el consumo energético mientras el dispositivo descarga juegos o actualizaciones de forma automática. Pese a que esa opción disminuye considerablemente el gasto eléctrico, el equipo seguirá consumiendo electricidad de forma continua.
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De manera que se recomienda apagar por completo la consola y desconectarla para así reducir a cero el consumo eléctrico que podría tener el dispositivo.
Cabe recordar que la Xbox cuenta con una configuración de ahorro de energía que también es de gran utilidad para bajar el gasto energético mientras se juega por varias horas. Basta con acceder a los ajustes de la consola para poder activar dicha función.
Mantener a la consola con buena ventilación
La ventilación es un factor clave para garantizar el buen desempeño de una Xbox o PlayStation, por ello es clave ubicar la consola en un sitio fresco en donde se bloqueen las rendijas por donde se expulsa el aire caliente que el dispositivo genera.
Ignorar esta recomendación causará que la consola deba hacer un mayor esfuerzo para funcionar y con ello se generará un incremento en el consumo de energía, agregado a ello, la máquina se expone a sufrir un sobrecalentamiento que podría dañar varios componentes internos.
Reemplazar las barras de sonido por unos auriculares
Generalmente, los fanáticos de los videojuegos prefieren una experiencia de audio potente cuando están jugando, por ello suelen agregar sistemas de sonido a su TV para elevar la calidad del audio de los juegos.
Sin embargo, esta situación eleva el gasto de electricidad al tener que conectar otros dispositivos como barras de sonido, teatros en casa o parlantes especiales. Para eliminar ese consumo energético se sugiere utilizar unos auriculares para gaming, que permitan apreciar el audio de los juegos con buena calidad.
Estos dispositivos funcionan con baterías y se conectan a la consola vía bluetooth, por lo tanto, ayudan a lograr un ahorro y sin tener que jugar con un audio de bajo nivel.
¿Qué consola de videojuegos consume más energía?
Conocer el consumo eléctrico que genera una consola de videojuegos puede ayudar a generar conciencia en el usuario, sobre la cantidad de energía que utilizan sus dispositivos.
A continuación, se expone un pequeño escalafón con el consumo energético que aproximadamente generan las consolas de videojuegos que más se usan hoy en día.
- PlayStation 5: 50 - 220 W/h
- Xbox Series X: 45 - 220 W/h
- PlayStation 4 Pro: 75 - 160 W/h
- PlayStation 4: 70 - 150 W/h
- Xbox Series S: 25 - 100 W/h
- Xbox One S: 35 - 90 W/h
- Nintendo Switch: 10 - 18 W/h
Es importante señalar que la Nintendo Switch es principalmente una consola portátil, que cuenta con un puerto especial para transmitir su imagen y audio a un TV, por ello es el dispositivo que menos energía consume.
Agregado a ello, Las consolas de última generación, como PlayStation 5 y Xbox Series X|S, utilizan discos de estado sólido (SSD) y procesadores de gran potencia para poder brindar gráficos de alto nivel, por ello su consumo es superior en comparación con otros modelos.