Ciencia
Aparece extraño signo de interrogación en el espacio que tiene estupefacta a la comunidad científica
El extraño signo de interrogación se ha convertido en un enigma que inquieta a los cientificos.
Un equipo de investigadores de Agencia Espacial Europea (ESA) realizó un importante descubrimiento gracias al Telescopio espacial James Webb, que parece exponer la existencia de un nuevo misterio en el cosmos.
Imágenes reveladas por la ESA revelan una extraña formación galáctica, cuyo origen es un enigma para los astrónomos. Se trata de una formación que tiene la apariencia de un signo de interrogación.
De acuerdo con una publicación del portal hipertextual, inicialmente se estaba observando a dos estrellas jóvenes en formación las cuales se encuentran a una distancia de 1.470 años luz de la Tierra, dentro de los límites de la Constelación de Vela.
Los científicos estaban estudiando cómo las estrellas, denominadas Herbig-Haro 46 y 47, interactuaban con un disco de material que las alimenta. Debido a que dicho elemento es una pieza fundamental en el proceso de crecimiento de los astros jóvenes, los expertos tenían el objetivo de recaudar más información sobre cómo ocurre el desarrollo de las estrellas a lo largo de millones de años.
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Sin embargo, también se detectó un detalle que captó la atención del equipo científico: justo debajo de las estrellas se pudo observar la presencia de una estructura cuya forma es muy similar a un signo de interrogación.
Dicha figura está ubicada en el espacio profundo y pudo ser visible gracias a su intenso color rojizo, que le ayuda a destacarse en medio de la oscuridad del espacio exterior.
¿De qué se trata el extraño signo de interrogación espacial captado por el James Webb?
Actualmente, la comunidad no tiene una respuesta concreta para poder explicar la existencia de esa figura en el espacio exterior; sin embargo, algunos detalles han permitido generar una teoría sobre la presencia de ese curioso fenómeno espacial.
Según establece una publicación realizada en el portal Space.com, un equipo de expertos del Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial (STScI), en Baltimore, sostiene que se trata de una formación que está a enorme distancia de la Tierra y probablemente las cámaras infrarrojas del James Webb hicieron posible tener las primeras imágenes de esa formación espacial.
En ese sentido, los científicos del STScI creen que posiblemente se trata de una galaxia distante; de igual manera, precisaron que la forma de signo de interrogación es producto de varias galaxias interactuando entre ellas.
Dicha interacción habría causado que se deformasen hasta generar la apariencia diferente a las galaxias que han sido observadas por los astrónomos, pero debido a que se trata de cuerpos espaciales que están a una colosal distancia de la Tierra, desde nuestro mundo se pueden apreciar como una formación similar a un signo de interrogación.
A su turno, Matt Caplan, docente de Física en la Universidad Estatal de Illinois, señaló que dicha figura podría ser producto de la fusión de dos galaxias. La colisión de ambas fuerzas habría generado la enigmática forma.
Sin embargo, tanto el STScI como Caplan han reconocido que aún no se cuenta con la información suficiente para establecer de forma certera la naturaleza de esa extraña formación. No obstante, los expertos sí han desestimado que se trate de una estrella de gran tamaño, puesto que en las observaciones no se perciben los picos de refracción que suelen producir esos astros en los espejos que emplea el telescopio James Webb.
Por el momento, varios equipos de investigadores están tratando de recopilar la mayor cantidad de datos posible para así poder estudiar con mayor profundidad este fenómeno y lograr determinar cuál es el origen y la naturaleza de la figura con signo de interrogación que proviene del espacio profundo.
Sin duda alguna, el telescopio James Webb será una pieza clave en esta investigación y posiblemente el proceso se podrían aparecer otras extraordinarias figuras que están en el cosmos. Como fue el caso de las recientes imágenes que se captaron de la Nebulosa del Anillo, también conocida como Messier 57.
Las imágenes, publicadas el pasado 3 de agosto por un equipo internacional de astrónomos dirigido por el profesor Mike Barlow (UCL, Reino Unido) y Nick Cox (ACRI-ST, Francia), con el profesor Albert Zijlstra de la Universidad de Manchester, muestran la belleza intrincada y etérea de la nebulosa, con detalles sin precedentes, brindando a los científicos y al público una vista fascinante de esta maravilla celestial.