tecnologia
Aparece video premonitorio que apuntaría a un ‘destino fatal’ para la tripulación del submarino que buscaba el Titanic
Un reportero participó en una expedición en noviembre de 2022 y allí recibió un documento en el que le hacían saber que era una nave experimental.
El submarino OceanGate Expeditions tiene en vilo al mundo entero luego de que se conociera que perdió contacto con la base en medio de un viaje turístico al fondo del Atlántico para ver los restos del Titanic, el imponente barco que se hundió en 1912.
Mientras el tiempo transcurre y el oxígeno se agota, se ha vuelto a conocer un video realizado en por la cadena CBS News en el que uno de sus periodistas participó de uno de estos viajes al fondo del mar para ver lo que alguna vez fue el barco más imponente del mundo.
El informe fue hecho por el periodista David Pogue, quien logró, en medio de la expedición, entrevistar a Stockton Rush, CEO de la compañía, y uno de los cinco tripulantes que se encuentran desaparecidos desde el pasado 18 de junio.
El clip se conoció en noviembre de 2022 y, allí, el propio reportero mostró su asombro por lo precario que parecía este sumergible el cual era controlado por mando de videojuegos similar al que se usa en las consolas Play Station antiguas.
Lo más leído
En las evidencias compartidas por Pogue se ve su firma en un documento en el que él manifestaba estar al tanto de que se trataba de un “buque experimental sumergible, (que) no ha sido aprobado o certificado por ningún organismo regulador y podría resultar en lesiones físicas, discapacidad, trauma emocional o muerte”.
Los turistas que participaron de aquella expedición pagaron 250.000 dólares, cada uno, por participar de este viaje a las profundidades del Atlántico. Ahora, rescatistas de todo el mundo están unidos para ayudar a recuperar con vida al multimillonario Hamish Harding, el buzo francés Paul-Henri Nargeolet, un empresario paquistaní llamado Shahzada Dawood y su hijo de 19 años, Sulaiman Dawood, además de Rush.
Fabricante del submarino que se perdió en expedición al Titanic enfrentó una demanda en 2018
El fabricante del submarino Titan, que desapareció el domingo durante una inmersión para visitar los restos del Titanic, OceanGate Expeditions, fue objeto de demandas en 2018 por parte de un exempleado sobre la seguridad de la embarcación, según documentos judiciales consultados por CBS.
OceanGate despidió al empleado David Lochridge, después de que expresara su preocupación sobre la seguridad de la embarcación. La empresa demandó al exempleado ese mismo año (2018), alegando que había incumplido con su contrato de trabajo al revelar información confidencial a la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional en el momento en el que presentó la denuncia ante la agencia.
En respuesta a la demanda, Lochridge alegó que había sido despedido injustamente y que sus acciones tenían como objetivo garantizar la seguridad de los pasajeros en el submarino, proponiendo a la compañía a que realizara pruebas sobre el casco del barco.
Según el documento, el exempleado señaló que la empresa podría “exponer a los pasajeros a un peligro extremo potencial en un sumergible experimental”, ya que los clientes “no estarían al tanto” de este diseño y la falta de pruebas.
Además, varios empresarios enviaron una carta a OceanGate en 2018 expresando reservas sobre la seguridad del submarino, señalando que el enfoque “experimental” pudiera tener resultados potencialmente “catastróficos” que podrían afectar a la industria.
El sumergible desapareció el domingo 18 de junio a unos 700 kilómetros de la costa de Newfoundland, sin que por el momento se tengan pistas sobre su paradero. Perdió el contacto con la superficie menos de dos horas después de iniciar la inmersión y los expertos estiman que el oxígeno a bordo puede durar hasta 96 horas, en el mejor de los escenarios.
El transatlántico de lujo Titanic se encuentra a unos 600 kilómetros de la costa de Newfoundland, en Canadá, a una profundidad de 3.800 metros bajo la superficie marina. Su naufragio se produjo en 1912 y se saldó con más de 1.500 fallecidos, aunque los restos del pecio no fueron localizados hasta 1985.