Así funcionan las estafas con códigos QR y cómo no caer en manos de los delincuentes

La época pospandemia ha traído consigo una transformación significativa en la forma en que las personas realizan sus actividades cotidianas. Tareas que antes se daban por sentadas, como hacer compras, visitar restaurantes, bares y otros establecimientos públicos, han experimentado un cambio profundo, a raíz de la crisis sanitaria desencadenada por la covid-19.

En un esfuerzo por garantizar la seguridad de los ciudadanos, estos establecimientos han implementado medidas de seguridad innovadoras. Una de las estrellas emergentes en esta nueva normalidad ha sido el código QR.

Esta herramienta consiste en un módulo que almacena información en un formato de código de barras bidimensional. Se ha convertido en un instrumento esencial en la adaptación de empresas y organizaciones para el mundo. Este código, compuesto por una combinación de barras y cuadros dispuestos en un patrón específico, puede ser leído mediante un lector óptico que transmite los datos a un ordenador.

El uso del escaneo de códigos QR se ha convertido en una tendencia en alza en la era digital actual. Diversos comercios y empresas han adoptado gradualmente este método como una herramienta efectiva para facilitar a los usuarios el rápido acceso a información crucial sobre productos y servicios, por ejemplo, consultar menús, conocer promociones vigentes o realizar pagos digitales.

Con la versatilidad de esta tecnología, los usuarios simplemente deben escanear el código con sus dispositivos móviles y, en cuestión de segundos, tendrán la información al alcance de sus ojos, sin necesidad de navegar por extensas páginas web que complican un poco el proceso. Esto ahorra tiempo y mejora significativamente la experiencia del cliente.

Sin embargo, a pesar de los múltiples beneficios que aporta al mundo digital, también conlleva un riesgo potencial para las personas que lo usan con frecuencia. Los estafadores y ciberdelincuentes han demostrado ser ingeniosos al aprovechar las tendencias tecnológicas para llevar a cabo actividades delictivas que pueden redirigir a los usuarios a sitios web falsos o a descargar aplicaciones que pueden infectar el celular.

Engaños más comunes con códigos QR

Códigos QR falsos

Aquí la modalidad que usan los estafadores es crear códigos QR falsos que pueden parecer legítimos; no obstante, una vez la persona lo escanea, puede verse envuelto en una desagradable situación: aplicaciones maliciosas, páginas web falsas, virus o malware. Esto lo hacen con el fin de vaciar las cuentas bancarias o acceder a datos personales.

Productos falsificados

Es la forma más sencilla y fácil de estafar que encuentran los criminales, es decir, hacen un código QR con productos falsos para que la persona acceda a comprarlos, pero finalmente solo se verán atrapados en una estafa silenciosa.

Ofertas demasiado provocativas

Muchas veces, las personas se cruzan con descuentos o promociones demasiado llamativas para ser reales. Entonces, cuando el usuario escanea el código QR, lo que hace es abrir un sitio web fraudulento para obtener información privada o datos bancarios.

Lo que puede hacer para no caer en la trampa

En este punto es importante que los usuarios estén actualizados de los diferentes modelos de estafa y engaño que utilizar los ciberdelincuentes, lo que puede ayudar a mitigar el impacto. Por ejemplo, verifique siempre la fuente del QR. Antes de hacer el proceso de escaneo, mire de dónde proviene y si es auténtico.

Por otro lado, use una aplicación de escaneo confiable, aunque la mayoría de teléfonos modernos la incorporan en su sistema operativo; si no la tiene, cuando la vaya a descargar, hágalo directamente desde la tienda aplicaciones.

Asimismo, no proporcione información sensible, no haga pagos anticipados ni revele sus datos personales. Así, evitará que los ciberdelincuentes vulneren su privacidad y seguridad en línea.