TECNOLOGÍA
CEO de Twitter y Square pretende democratizar los bitcóin con una “billetera física”
El director ejecutivo de estas compañías aseguró que el bitcóin no debería estar reservado solo para conocedores, sino que debería generar confianza de comprarla sin tener que depender de terceros.
El director ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey, dijo este viernes que su empresa especializada en pagos digitales, Square, que también dirige, considera crear una billetera de bitcoines, una suerte de llave USB para guardar criptomonedas en un medio físico y seguro.
Estos objetos se utilizan para almacenar monedas digitales fuera de línea. Sus usuarios los sincronizan con sus aplicaciones financieras compatibles en caso de transacciones en internet.
Hasta ahora los usuarios de esta criptomoneda optan por carteras “virtuales”, confiando a empresas de terceros su dinero, al que pueden acceder por medio de contraseñas. Pero Jack Dorsey cree que el bitcóin no debería estar reservado a conocedores y está buscando formas de generar confianza en la criptomoneda, generando, por ejemplo, una manera de comprarla sin tener que depender de terceros.
“Decidir almacenar los bitcoines uno mismo es complicado”, escribió en Twitter, antes de enumerar los problemas a resolver: disponibilidad, seguridad, facilidad de uso del móvil, etcétera. El empresario tiene en mente una “billetera” cuyo usuario pueda emplear para hacer sus compras, a través de su teléfono inteligente, por ejemplo, sin comprometer su dinero o el sistema de criptomonedas en general.
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“Si lo hacemos, lo haremos completamente abierto, desde el software al dispositivo, en colaboración con la comunidad”, dijo. “Se puede imaginar aplicaciones que funcionen sin Square y quizá también sin el permiso de Apple y Google”, señaló, refiriéndose a los dos sistemas operativos móviles dominantes en el mundo.
Bitcóin es un activo descentralizado sin conexión directa con la economía real, que se basa en tecnologías blockchain y fascina a Jack Dorsey y a muchas figuras de Silicon Valley, como Elon Musk, el director ejecutivo de Tesla.
Esta criptomoneda sigue siendo muy volátil, pero el creciente interés de instituciones y empresas consideradas estables contribuye a que sea cada vez más empleada.
Mina de bitcoines
A finales de mayo, la policía británica detectó signos reveladores de una plantación de cannabis: uso masivo de electricidad, muchos cables y conductos de ventilación. Pero en el lugar descubrió otra operación ilegal: una ‘mina’ de criptomonedas que estaba robando electricidad de la red nacional.
Una redada de la policía de West Midlands descubrió la operación en un polígono industrial al noroeste de Birmingham, la segunda ciudad más poblada del Reino Unido.
“Ciertamente no es lo que esperábamos”, afirmó la sargento Jennifer Griffin. “Tenía todas las características de un montaje de cultivo de cannabis y creo que es solo la segunda mina de criptomonedas de este tipo que encontramos en West Midlands”, agregó.
Las criptomonedas como el bitcóin funcionan gracias a un sistema descentralizado: redes de ordenadores independientes validan las transacciones en todo el mundo.
Los participantes –o “mineros”– utilizan potentes procesadores para realizar complejas ecuaciones que demuestran su participación y reciben automáticamente bitcoines, una actividad que consume mucha energía.
Transformar la electricidad en bitcoines puede ser un negocio muy lucrativo: en el último año, el bitcóin ha ganado casi un 400 % y en estos últimos días se ha vendido a casi 37.000 dólares.
Pero su intenso consumo de electricidad hace que su “minería”, como se conoce el proceso de fabricación, no esté muy extendida en Europa.
Su huella ecológica también llevó al fundador de Tesla, Elon Musk, a rechazar los pagos en esta criptomoneda para sus coches eléctricos.
Según el Índice de Consumo de Electricidad del Bitcóin de Cambridge (CBECI), las minas de bitcoines consumen unos 114 TWh (teravatios) equivalentes a un billón de vatios, es decir, el 0,5 % de la producción mundial de electricidad.
*Con información de AFP