Tecnología
Cinco malas costumbres que dañan definitivamente la batería del celular
Muchos usuarios ignoran que sus hábitos pueden afectar la batería de sus teléfonos.
Desde el momento en que se hizo popular el uso de los teléfonos celulares, en todos sus usuarios surgió una dependencia por la duración de la carga de batería en el dispositivo. Aunque en los últimos años se han incorporado grandes avances tecnológicos como la carga inalámbrica junto a potentes sistemas de carga rápida, esta situación sigue robando la tranquilidad a las personas.
Por esta razón es que es muy normal que un usuario enfrente algunas dificultades cuando la batería de su equipo presenta una poca duración y en ciertos casos se ven obligados a mantener el teléfono conectado a su cargador para poder conservar la carga de energía.
Sin embargo, muchas personas ignoran que esa circunstancia fue causada por una serie de malos hábitos que han tenido con su smartphone, los cuales terminaron dañando la batería del celular.
A raíz de esta situación, SEMANA consultó con expertos para conocer cuáles son los errores más comunes que los usuarios de teléfonos inteligentes comenten con sus equipos, junto a una serie de recomendaciones para corregir esa situación.
Cinco malas costumbres que dañan la batería del celular
Mantener la carga al ciento por ciento
Especialistas recomiendan mantener la carga de batería del teléfono inteligente entre el 20 y 80 %, pues de esta manera se puede impedir que las celdas de energía sufran un desgaste innecesario, esto puede evitar que se agote su vida útil de manera prematura. De igual manera, es un error recargar el celular cuando su energía ha llegado a cero.
Lo aconsejable es realizar la carga de energía cuando es dispositivo se encuentre en un 10 % o 15 %, y se debe desconectar de inmediato el equipo cuando la energía llega al 100 %.
Deje de chatear o ver series mientras carga el teléfono
Algunas personas tienen el hábito de utilizar el dispositivo mientras el equipo se está cargando, sin considerar que esa práctica afecta la calidad de la carga de batería y genera un esfuerzo en el dispositivo. Esa situación no solo afecta el desempeño de la batería, también perjudica el rendimiento de otros componentes del equipo y con el tiempo se pueden ver afectados otros elementos del teléfono.
Desactive funciones que no necesite
El uso de los dispositivos de manera consciente es clave para optimizar la duración de su batería, pues muchas personas tienen la costumbre de mantener activadas funciones como Wifi o Bluetooth cuando no son necesarias. De acuerdo con Juan Maldonado, PR Manager de OPPO Colombia, esta situación produce un desgaste innecesario de la batería y por ello el usuario tendrá que recargar el equipo con una frecuencia innecesaria, lo cual acelera el deterioro de la pila.
No permita que la batería se recaliente
Carolina Ceballos, Gerente de Relaciones Públicas de Xiaomi, le indicó a SEMANA que uno de los factores más importantes para la buena conservación de la batería es evitar que eleve su temperatura. Pese a que hay factores que pueden hacer que el celular se sobrecaliente, como lo es la exposición al sol o a superficies calientes como el parabrisas del carro, es relevante tener presente que algunos videojuegos o aplicaciones muy exigentes pueden elevar la temperatura interna del equipo y producir una seria falla en los componentes internos.
Usa el cargador original
Generalmente, los teléfonos inteligentes cuentan con una capacidad de carga recomendada por sus fabricantes, dicha capacidad puede variar dependiendo el amperaje y los vatios que pueda soportar la batería. Por esa razón es crucial emplear siempre el cargador original del celular o utilizar una opción aprobada por la marca, para así impedir un posible un sobrecalentamiento o forzar la batería a un desgaste mayor.
¿Un ‘smartphone’ puede explotar si lo cargan con un cargador más potente?
Es importante aclarar que el usar un cargador distinto no representaría una situación que ponga en grave peligro al usuario de un celular. Pese a que los cargadores modernos incorporan tecnologías para controlar el flujo de energía y disminuir las altas temperaturas que generan, la base de su funcionamiento sigue siendo la misma a la que tenían los conectores de hace 20 años.
Por lo tanto, casi todos los cargadores funcionan bajo el estándar de energía de salida máxima, en consecuencia, un cargador de 150 W no emite esa misma cantidad de energía a un teléfono, pues, el flujo de electricidad se adapta al equipo conectado.
De modo tal, que los cargadores pueden manejar una potencia variable y esta situación no supondría problema alguno para el conector.
Así las cosas, si un teléfono posee un tope de energía máxima de 30 W, el cargador que se use para realizar la recarga ofrecerá esa misma cantidad de energía. En caso de que se utilice un cargador de alta potencia, este la reducirá para poder ofrecer el flujo de electricidad que el teléfono inteligente solicita y por ello es poco probable que se produzca una sobre carga que pueda causar una eventual explosión de la batería del celular.
En conclusión, el emplear un cargador de alta potencia en un teléfono que demanda menos energía no representaría un problema, pues el cargador solamente se adaptará al flujo de energía que el dispositivo móvil le pida.