Creadores de ChatGPT le harían la vida más difícil a las personas; estos son los lapidarios planes que tienen para el teletrabajo

La pandemia significó para muchas personas en el mundo un nuevo comienzo luego de perder a sus seres queridos, de tener que dejar su empleo, o simplemente porque las costumbres cambiaron para siempre.

Uno de los sectores que más se vio afectado fue el laboral, en el cual hubo cambios drásticos que abrieron las posibilidades a algo que antes no era contemplado: el teletrabajo o trabajo en casa.

Desde 2020 las compañías se abrieron a esta modalidad de empleo y tanto los trabajadores como los empleadores se dieron cuenta de que no era necesario estar presente en una oficina para cumplir con las obligaciones; con el paso de los días y la vuelta a la normalidad, el teletrabajo siguió reinando y muchos patrones decidieron que lo mejor para sus bolsillos y sus colaboradores era que siguieran trabajando desde casa.

Pese a esto, hay líderes de empresas tecnológicas que han dejado claras sus posturas sobre esta modalidad de empleo, pues consideran que es el momento de que todos regresen a trabajar a sus oficinas, tal y como ocurría desde antes de la aparición del Covid-19.

Uno de esos líderes que cree que la presencialidad es necesaria, es el San Altman, líder de OpenAI, empresa que ha desarrollado el poderoso ChatGPT, boot de inteligencia artificial que ha dado mucho de qué hablar en los últimos meses.

El ejecutivo había señalado en marzo pasado que había sido un “error” haberse apresurado a trabajar desde la casa y que las consecuencias hasta ahora estarían comenzando a notarse al interior de las corporaciones.

“En mi opinión, la mayoría de las empresas tecnológicas que se apresuraron a trabajar a distancia de forma permanente cometieron un grave error, y las grietas están empezando a aparecer”, fue la opinión de Altman.

Ahora, durante su participación en un encuentro organizado por la startup Stripe, el ejecutivo dejó claro lo que piensa sobre esta forma de trabajo y ratificó lo expuesto en marzo.

En este sentido, el CEO de OpenAI aseguró que la era del trabajo en casa había llegado a su fin y que el sector de la tecnología no está preparado para que las personas laboren desde sus hogares, pues considera que estar en la oficina es muchos mejor a la hora de crear nuevos productos.

Estas recientes declaraciones están muy alejadas de lo que Altman pensaba en 2014, cuando en su cuenta de Twitter se mostró a favor del trabajo en casa: “para que conste, lo que pienso sobre el trabajo remoto: es genial en muchos casos”.

La nueva postura del ejecutivo de OpenAI está en sintonía con lo que el jefe de Meta, Mark Zuckerberg, ha expuesto en los últimos meses y con las movidas que ha hecho este hombre al interior de Facebook, Instagram y WhatsApp, empresas en las que ha realizado cambios para forzar el regreso de sus empleados a las oficinas.

Meta ha sido una de las empresas inconformes con la ausencia en las oficinas y ha ordenado a sus colaboradores en Reino Unido retornar a sus sedes; sin embargo, la instrucción de Zuckerberg fue más allá y pidió una reubicación de sus colaboradores, pero en las oficinas que tiene la empresa en Nueva York.

Esta medida cobija a todos los empleados sin importar su cargo, incluso a los jefes como Adam Mosseri, responsable de Instagram y quien tendrá que dejar atrás sus proyectos tras haberse mudado a Londres, para regresar a la capital del mundo.

Meta, en específico Mark Zuckerberg, ha denominado a 2023 como el ‘año de la eficiencia’ en el cual busca aumentar su productividad, mejorar el rendimiento, reducir los gastos operativos y obtener mejores resultados, todo esto luego del despido de 20.000 empleados.

En este sentido, las prioridades de Meta ahora estarán centradas sobre Instagram, plataforma a la que le han apostado luego de dejar relegados sus planes con el metaverso, proyecto en el que gastaron demasiado dinero y sobre el que decidieron sacar el pie del acelerador.

Entretanto, se ha conocido que las oficinas en Londres quedarán ocupadas por los trabajadores estrictamente necesarios, pues con el afán de potencializar Instagram y su segmento de reels, la idea es que los trabajadores estén mucho más cerca de los creadores de contenido, y para nadie es un secreto que Nueva York es una de las ciudades donde más habitan estos personajes.