¿Cuál será el futuro de los videojuegos si se sigue implementando la inteligencia artificial?

La Inteligencia Artificial (IA) se está convirtiendo en una tendencia, sin lugar a duda, incursionando en diferentes áreas de la vida cotidiana. Entre estas, los videojuegos le han apuntado a sacarle provecho. A partir de la innovación que ofrece la herramienta, esta industria le ha sacado provecho.

Bajo ese contexto, Bobby Kotick, directivo ejecutivo de Activision Blizzard, destacó que la IA posee el potencial para generar una revolución en esta industria. En medio de un evento sobre esta industria, Kotick afirmó que estas herramientas le recordaba a lo que sintió cuando se encontró por primera vez con la Macintosh de Apple. El alto directivo sostuvo que cree firmemente que los progresos en este campo tendrán un impacto profundamente constructivo en el desarrollo de videojuegos.

También sostuvo que: “Esto nos posibilitará para realizar actividades que durante mucho tiempo han estado fuera de nuestro alcance”. Estos avances han permitido que los videojuegos exploren en mayor medida la experiencia de los jugadores, lo cual hace algunos años no era contemplado ni posible.

Además, anticipó una revolución de los videojuegos en la próxima media década. Bajo su perspectiva, el gaming experimentará transformaciones significativas en los siguientes cinco - siete años, todas ellas vinculadas a la artificial. Sin embargo, no se adentró en los detalles de cómo estos cambios podrían influir en la evolución de los juegos o impactar en el tamaño de los equipos que los desarrollan.

En Brasil se presentó un proyecto de ley que pretende regular el uso de la Inteligencia Artificial (IA) en el país, para que no caiga en malas manos

La Inteligencia Artificial es lo último en tecnología. En los últimos años el planeta ha sido testigo de los alcances que tiene, a tal punto de ser innovadora en salud, educación, ingeniería, entre otros sectores. Sin embargo, también se ha empleado para acciones negativas, incurriendo en delitos cibernéticos y otras prácticas que dañan la imagen de la IA.

Es por eso que en Brasil le han puesto el ojo a este mal uso y pretender democratizar la herramienta. El presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, presentó un proyecto de ley el cual establece los lineamientos para regular el desarrollo e implementación de la herramienta en el territorio sudamericano.

La elaboración del articulado contó con la colaboración de juristas y profesionales especializados en los derechos de los usuarios en el espectro digital.

Por un lado, el proyecto reconoce que esta tecnología permite construir realidades de forma autónoma, a pesar que su propósito principal no sea ese. De ese modo, es posible emplearla positivamente para analizar y cruzar datos. El articulado cuenta con nueve capítulos que cubren los derechos, manejo, privacidad y protección de datos que cobijan la IA.

El componente principal del documento es plantear una serie de medidas que regulen un mal accionar, evaluando los riesgos que esto implique y trazando sancionen para quienes vayan en contra de la normativa. Asimismo, contempla la hoja de ruta en las situaciones cuando los usuarios se ven vulnerados por esto.

Por ejemplo, si un consumidor considera que hay una afectación en contra suya por los datos e información difundida, la cual considera que no es fiable y, al contrario, se obtuvo de métodos no justificados, podrá solicitar que la justicia intervenga. Entre las multas propuestas, dependiendo de la gravedad del caso, puede alcanzar hasta los 50 millones de reales.

Con respecto a su ejecución, el proyecto de ley plantea que el Ejecutivo debe designar una autoridad competente para cumplir la función de supervisar el manejo que se le da a la Inteligencia Artificial. El articulado fue presentado y está a la espera de los respectivos debates legislativos.

Brasil no es el único país que se ha preocupado por la regulación. La radicación del proyecto de ley se da paralelamente con el visto bueno de la Unión Europea para empezar a construir una norma que democratice el accionar en las naciones del viejo continente.

Durante la jornada del jueves 11 de mayo, el parlamento de la Unión Europea (UE) votó a favor de la limitación del uso de la Inteligencia Artificial (IA) en el continente, sin dejar de incentivar la innovación en esa área.

Los diputados de las comisiones de Libertades Civiles y de Protección solicitaron prohibiciones con el manejo de herramientas de IA, concretamente con el uso de ChatGPT. A través de un proyecto de ley, el órgano legislativo pretende encontrar un equilibrio entre la innovación de los instrumentos con la protección de los derechos de los ciudadanos.

Esta medida no es nueva, debido a que se lleva discutiendo desde hace dos años y todo parece indicar que la regulación está más cerca que nunca. La idea central de la propuesta de la Comisión es tener una lista de actividades catalogadas como de alto riesgo bajo el uso de la IA. Estas acciones abarcarían principalmente la manipulación de la herramienta en asuntos sensibles, como lo son educación, orden público o gestión migratoria.

Adicionalmente, el articulado propone control y vigilancia de alta rigurosidad para tener en el radar la manera por la cual la inteligencia artificial se está implementando. Por ejemplo, está contemplado que cada país miembro de la UE cuente con facultades para supervisar y garantizar el cumplimiento de la norma.