TECNOLOGÍA
De cara a Navidad, atento a esta modalidad de estafa en supuesta venta de PlayStation 5
Cientos de colombianos desean adquirir la consola para sí o para sus hijos y los estafadores, conocedores de que está escasa, pretenden aprovecharlo. SEMANA habló con un timador y así es el engaño.
Con motivo de la Navidad, miles de personas desean adquirir las nuevas consolas de videojuegos que salieron a nivel mundial, las nuevas versiones de la consola de Microsoft, la Xbox Series X, y la de Sony, la PlayStation 5. Sus precios rondan en Colombia por los 2 y 3 millones de pesos.
En medio de este frenesí por adquirirla, bien sea para sí o para un hijo o familiar con motivo de las fiestas decembrinas, se han juntado dos situaciones. Por un lado, y como un acto de responsabilidad de las compañías que fabricaron las consolas, por cuenta de la pandemia por coronavirus se anunció que la venta de la misma se haría de manera virtual. De este modo se busca evitar la aglomeración de personas en las locaciones para adquirirla.
Muchas personas la madrugaron a la preventa de las consolas, en septiembre pasado, y ahora algunas las están revendiendo de forma legal en diversas plataformas tecnológicas o locaciones físicas. Una consola como la PlayStation 5, cuyo monto oscila en los 2′800.000 pesos, ahora se puede conseguir en 5′000.000 millones de pesos o mucho más.
Sin embargo, hay quienes no cuentan con ella, pero sí esperan que la gente que aspire a tenerla les termine consignando en sus arcas, sin responder por nada en absoluto. Uno de los casos funciona así. A través de una supuesta tienda cuyo fan page en Facebook responde al nombre de Games Shop una persona hace publicaciones periódicas señalando que ya cuenta con la nueva consola de videojuegos de Sony.
Tendencias
Unas imágenes de la deseada consola alimentan la expectativa de conseguirla por cuanto, en la publicación, hay unas fotografías, un teléfono y una dirección donde, si no se desea supuesta recibir en su domicilio, se puede recoger. Este número telefónico abre el servicio de WhatsApp, donde alguien da cuenta de las bondades de la consola y la vende en los precios comerciales regulares, una PS5 por alrededor de los 2′800.000 pesos. Su imagen en esta vía de comunicación es de una PS5.
Cuando se le escribe a dicha persona dice que, en efecto, la tiene consigo y da cuenta de cómo se están agotando. De cómo se están vendiendo masivamente y de ahí la necesidad de “reservarla”. Para hacerlo, la persona que la desee debe consignar un monto a una cuenta requerida y esperar por el aviso de que, supuestamente, la consola llegó.
Conversando por WhatsApp con la persona que decía tenerla, se le argumentó que la necesidad de adquirirla era urgente, que se requería contar con ella cuanto antes y que existía mucha cercanía con la dirección que registraba y pertenecientes al municipio de Chía, en Cundinamarca. Según dijo en la conversación, llevada a cabo a las 5 y 30 de la tarde, en 30 minutos cerraría el local y no alcanzaba a entregarla. Cuando se le preguntó si se podía aplazar la entrega para el día siguiente, no hubo respuesta.
Al día siguiente, SEMANA se trasladó hasta la dirección señalada en el fanpage y, mientras tanto, le saludaba por la vía de WhatsApp y le informaba que iba por la consola y, a cambio, le daría le dinero por la misma. En el camino pidió no ir por cuanto, señalaba, ya las había vendido. Ya había vendido las supuestas consolas que, en contraste, exhibe en su sitio en Facebook. A cambio, pedía que le consignaran para apartarla y, en 10 días, la tendría consigo. El monto de la consignación nunca lo señaló.
El asunto es que al llegar a la dirección señalada, en el municipio de Chía, la misma no existe. Dado que la conversación se venía llevando a cabo, se le pidió a la persona que hiciera claridad al respecto, se le advirtió que estaba ahí para recogerla. La conversación terminó y el supuesto vendedor no apareció más. En la zona queda un asadero y, al entrar a él, una de las personas que allí trabaja señaló que era muy común que varias personas aparecieran en su local preguntando, dado que era la dirección más cercana a la locación referida, y siempre el tema era el mismo. Temas relacionados con videojuegos o consolas y gente señalando que ya había hecho unos pagos y nadie aparecía.
El teléfono en WhatsApp sigue funcionando, pero al llamar nadie responde. SEMANA ha querido corroborar con la persona o personas que están ofreciendo dicho servicio si se trata de un error, de falta de comunicación. No obstante, desde que se le informó que la dirección no correspondía, que si existía un error, no respondió más. El usuario sigue en línea, de manera que, se presume, sigue ofreciendo el producto a otras personas. El sitio en Facebook también sigue activo.
Cabe anotar que marcas autorizadas de distribución han anunciado que, con motivo de la alta demanda de la consola, es posible que la misma se demore mucho en llegar si digitalmente se adquiere ahora. “Debido a la contingencia sanitaria podemos presentar retrasos en las fechas escogidas para la entrega de algunos de nuestros despachos. De presentarse algún inconveniente, te comunicaremos la nueva fecha de entrega. En caso de incumplimiento en la entrega y si deseas ejercer tu derecho a la reversión del pago, haz click aquí para obtener mayor información”, se lee en una de ellas.
De otro lado, plataformas reconocidas en Colombia, como Mercadolibre, hacen una advertencia sobre el vendedor y la reputación que tiene en la plataforma para que la persona decida si confiar o no en la misma. En rojo advierte cuando no cuenta con la reputación requerida para ofrecer un determinado producto, sin que ello implique que el vendedor esté cometiendo un ilícito. Tan solo avisa que no cuenta con experiencia y puntaje que lo eleve de categoría dentro de la plataforma.
En el CAI virtual de la Policía, las personas pueden denunciar este tipo de prácticas.