Tecnología
El efectivo truco para identificar una aplicación falsa que busca saquear las cuentas bancarias
Los ciberdelincuentes desarrollan aplicaciones falsas para hacerle daño a los usuarios.
El internet ha revolucionado por completo el mundo de la tecnología, permitiendo realizar múltiples tareas esenciales para la vida cotidiana. Su capacidad para conectar a personas, empresas y sistemas a nivel global facilita el acceso a información, la comunicación y la innovación de manera rápida y eficiente.
Uno de sus mayores beneficios es el acceso a una vasta cantidad de datos y conocimientos en diversas áreas, desde la ciencia hasta el entretenimiento, promoviendo la educación y el aprendizaje continuo. En ese mismo sentido, facilita la comunicación en tiempo real a través de correos electrónicos, redes sociales, videollamadas y otras plataformas, reduciendo las barreras geográficas.
Asimismo, ha transformado la economía, permitiendo a las empresas vender productos y servicios en línea a nivel global, y a los consumidores acceder a una infinita variedad de opciones.
Sin embargo, a pesar de sus numerosas ventajas, también ha abierto la puerta a ciberdelincuentes, quienes buscan robar datos personales y financieros mediante diversas técnicas. Por esta razón, los expertos en ciberseguridad recomiendan a los usuarios ser cada vez más cautelosos, no solo con los sitios web que visitan, sino también con las aplicaciones que descargan, ya que estas son utilizadas frecuentemente por los criminales para infiltrarse en los dispositivos.
“Las aplicaciones falsas son aplicaciones que desarrollan ciberdelincuentes para hacerles daño a usuarios y sus dispositivos. Están diseñadas para parecerse a aplicaciones legítimas, pero, en su lugar, llevan a cabo actividades maliciosas. Estas actividades incluyen supervisar tu actividad, instalar malware, mostrar anuncios molestos o robar tu información personal.”, explican desde Kaspersky.
Este tipo de aplicaciones suelen disfrazarse como servicios bancarios, de streaming o públicos, y se propagan principalmente a través de campañas de phishing. Los delincuentes envían mensajes de texto o enlaces a través de redes sociales que, una vez abiertos, descargan estas aplicaciones, poniendo en riesgo la seguridad en línea y comprometiendo el funcionamiento del dispositivo.
Instalar estas aplicaciones es peligroso, dado que generalmente requieren permisos de acceso a contactos, mensajes, fotos y otra información del celular. Con esta libertad, los ciberdelincuentes pueden extraer datos que luego se utilizan en delitos informáticos o se venden en la Dark Web.
“Las aplicaciones falsas se pueden distribuir de varias maneras: pueden alojarse en tiendas de aplicaciones de terceros o en tiendas de aplicaciones falsas. Los ciberdelincuentes incluso pueden usar las tiendas de aplicaciones oficiales para distribuir aplicaciones falsas, a pesar de las medidas de seguridad implementadas”, indica la fuente mencionada.
Para detectarlas, se deben tener en cuenta varios factores. Es importante revisar las reseñas, porque una calificación baja puede ser una señal de alerta. También es crucial prestar atención a posibles errores gramaticales en las descripciones, verificar la cantidad de descargas, investigar al desarrollador, revisar el acuerdo de permisos y asegurarse de que el ícono de la aplicación sea confiable.