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¿En cuánto tiempo Colombia se quedaría sin agua? Inteligencia artificial lanza inquietante pronóstico
En Bogotá ya rige un esquema de racionamiento ante los bajos niveles de agua en los embalses.
Colombia se encuentra ante una de las crisis más graves en su historia reciente, debido a que los con niveles de agua en los embalses disminuyen a un ritmo alarmante.
Las altas temperaturas, falta de precipitaciones y el uso irresponsable del agua han generado un escenario en donde está en riesgo el suministro de este recurso vital para millones de personas.
En el marco de esta situación, algunos cibernautas han decidido acudir a la inteligencia artificial (IA) como un recurso para obtener una predicción sobre la crisis que enfrenta el país y el tiempo que le quedaría a Colombia para que se quede sin agua.
¿En cuánto tiempo se quedaría Colombia sin agua?, según la IA
De acuerdo con Gemini, inteligencia artificial generativa de Google, si las condiciones de pocas lluvias, altas temperaturas y uso desperdicio se mantienen, Colombia podría quedarse sin agua en unos tres o cinco meses.
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Puesto que los embalses que abastecen a las principales ciudades, como Bogotá, Medellín y Cali, llegarían a un nivel crítico.
Cabe recordar que hace unos días Natalia Avendaño, gerente de la Empresa de Agua y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) manifestó que si no hay un ahorro significativo de agua y tampoco se produce una sola gota de lluvia el sistema Chingaza, que brinda un 80 % de agua potable para Bogotá estaría a unos 55 días de secarse.
No obstante, es importante resaltar que a pesar de que el sistema Chingaza se quedara sin agua, la ciudad aún cuenta con los sistemas Tibitó y Sumapaz los cuales entregan el 30 % del líquido que se consume en la ciudad, especialmente en el sur de la capital del país.
Por lo tanto, Bogotá aún podría tomar agua de esa fuente, pero los habitantes de la ciudad tendrían una suministro del líquido muy limitado.
¿Por qué hay una crisis del agua?
El chatbot con IA de Google indicó que la actual situación de Colombia es producto de una combinación de varios factores, entre los que están:
- Cambio climático: el aumento de las temperaturas globales causa sequías más frecuentes e intensas en el mundo.
- Variabilidad climática: fenómenos como El Niño y La Niña tienen una incidencia en los patrones de lluvias y ello puede provocar sequías más fuertes.
- Deforestación: la tala de árboles reduce la capacidad del suelo para absorber y retener agua.
- Uso irresponsable del agua: el consumo desmedido de agua está agravando la crisis.
¿Qué dispositivos se pueden usar para disminuir el consumo de agua en los hogares?
Cabezales eficientes para las duchas
Gracias a este dispositivo se puede controlar la cantidad de agua que sale de una ducha, esto ayuda a reducir el desperdicio cuando los habitantes de un hogar se bañan.
Expertos señalan que esta medida puede ayudar a lograr un 21 % de ahorro. Hoy en día existen varios modelos de cabezales eficientes, que brindan beneficios adicionales, como un chorro de agua más potente, entre otras opciones.
Aireadores para los grifos
Este dispositivo pequeño se instala en el grifo del lavaplatos o lavamanos y su función es reducir la cantidad de agua que sale al abrir la llave, sin disminuir la presión con la que sale el líquido. Con ello las personas pueden lavar platos o sus manos con eficiencia y gastando una menor cantidad de agua.
Los aireadores son una opción económica y sencilla de instalar, además, su uso brindar un ahorro del 40 % en el gasto de agua en un hogar.
Sensores para lavamanos
Mediante estos dispositivos es posible pude controlar el flujo de agua mientras una persona se lava las manos o se cepilla los dientes. Con este recurso se impide que una persona mantenga la llave abierta y así se erradica el gasto innecesario del líquido.
Electrodomésticos inteligentes
Actualmente, hay lavadoras que están diseñadas para optimizar el consumo de agua en función del tipo de prendas que debe lavar. Esta tecnología puede ayudar a ahorrar una cantidad significativa de agua, puesto que regulan la cantidad de líquido que necesitan para limpiar una carga de ropa.