¿En qué se diferencia el eclipse lunar del 28 de octubre de los eclipses solares?

A lo largo de este año 2023, los ciudadanos de todo el mundo han tenido la oportunidad de presenciar una serie de emocionantes eventos astronómicos que han dejado una huella en la historia de la exploración del espacio.

Uno de los momentos más destacados ocurrió el pasado 14 de octubre, cuando millones de personas se congregaron en diferentes rincones del planeta para ser testigos de un evento celestial: un eclipse anular de sol, también conocido como anillo de fuego.

Este fenómeno único se produce cuando la Luna se sitúa entre el Sol y la Tierra, pero no cubre completamente la superficie solar. En su lugar, crea un impresionante anillo de luz alrededor de la silueta oscura de la Luna.

Pero la maravilla astronómica no se detiene ahí. Antes de que termine este año, las personas tendrán la oportunidad de presenciar otro espectáculo sorprendente de la ciencia y la naturaleza. El próximo sábado, 28 de octubre, se llevará a cabo un eclipse parcial de Luna, visible desde diversas partes del mundo, incluyendo Europa, Australia, Asia y África.

Aunque este fenómeno no podrá ser observado en Colombia, será una oportunidad única para aquellos apasionados de la astronomía que se encuentren en alguna de las áreas mencionadas.

Ante la asombrosa diversidad de eventos celestiales que las personas han tenido la oportunidad de presenciar en los últimos meses, es natural que se planteen la pregunta: ¿cuál es la diferencia entre un eclipse solar y un eclipse lunar? A continuación, exploraremos las características distintivas de cada uno de estos fenómenos astronómicos.

Diferencia entre un eclipse solar y anular

Conforme a la información proporcionada por el sitio web Space Place, un eclipse solar se materializa cuando la Luna se ubica entre el Sol y la Tierra, lo que conlleva la obstrucción parcial de la luz solar. Esta disposición genera sombras en la superficie terrestre, lo que implica que, durante el día, el cielo adquiere una oscuridad inusual debido al desplazamiento de la Luna frente al Sol.

Por otro lado, en el caso de un eclipse lunar, este fenómeno se desencadena cuando la Tierra interfiere con la trayectoria de la luz solar que se dirige hacia la Luna. El resultado es una alteración en la apariencia de nuestro satélite natural, que a menudo asume un matiz rojizo debido a la dispersión de la luz en la atmósfera terrestre.

Tanto los eclipses solares como los lunares son fenómenos astronómicos que ocurren de manera esporádica y no suelen ser frecuentes. Por ejemplo, un eclipse solar total o el fenómeno conocido como anillo de fuego pueden requerir años para repetirse en una ubicación específica.

Por esta razón, cuando estos eventos se presentan, representan oportunidades únicas para que las personas se asombren ante la belleza de los eventos celestiales.

Los diferentes tipo de eclipses lunares

Según el sitio web de National Geographic, los eclipses lunares ocurren cuando la Luna está en su fase de luna llena. Esto significa que la Tierra, la Luna y el Sol se alinean de tal manera que la sombra de la Tierra se proyecta sobre la superficie de la Luna. Esta alineación es esencial para que se produzca un eclipse lunar.

Es importante destacar que, aunque haya una luna llena aproximadamente una vez al mes, no significa que todos los meses se produzcan eclipses lunares. La razón principal es que la órbita de la Luna alrededor de la Tierra no está perfectamente alineada con la órbita de la Tierra alrededor del Sol.

Por otro lado, según la fuente citada, es importante destacar que no todos los eclipses lunares cubren completamente el disco lunar. Durante algunos eclipses, solo una parte de la Luna pasa a través de la zona más oscura de la sombra de la Tierra, conocida como “Umbra”.