Tecnología
Inteligencia artificial con parámetros éticos, la apuesta de Adobe en creación de contenido
La empresa de software estadounidense continúa implementando soluciones inteligentes basadas en IA.
Recientemente, Adobe presentó Firefly, una nueva familia de Inteligencia Artificial (IA) generativa centrada en crear contenido de alta calidad, aportando más “precisión, potencia, velocidad y facilidad” en los flujos de trabajo de Creative Cloud, Document Cloud, Experience Cloud y Adobe Express, y basando su contenido en parámetros éticos para “proteger a los creadores”.
En ese sentido, la empresa de software estadounidense continúa implementando soluciones inteligentes basadas en IA para complementar el trabajo de los creadores y permitirles “trabajar a la velocidad de su imaginación”.
Esto se debe a que Adobe plantea la IA generativa como “la próxima evolución de la creatividad y la productividad, que transforma la conversación entre el creador y el ordenador en algo más natural, intuitivo y potente”, tal y como afirma el presidente de Digital Media Business de Adobe, David Wadhawani.
Así, Adobe ha presentado su familia de IA generativa Firefly, que formará parte de una serie de nuevos servicios de IA en la plataforma para optimizar procesos de Adobe Sensei y se integrará en todos los servicios ‘cloud’ de la compañía, tal y como ha detallado en un comunicado.
Tendencias
Con Firefly, los creadores de contenido, “independientemente de su experiencia o habilidad”, podrán utilizar texto con descripciones para generar contenidos. De hecho, sus funciones comprenden desde la creación de imágenes y vídeos hasta vectores, incluyendo contenido 3D o, incluso, componentes creativos como pinceles o degradados de color.
La familia Firefly se compondrá de varios modelos adaptados para servir a distintos clientes, trabajando en una variedad de casos de uso diferente. Así, el primer modelo de Adobe se centrará en imágenes de alta calidad y efectos de texto para generar contenido seguro para uso comercial.
Con todo ello, la compañía también ha puesto a disposición de los usuarios la versión beta de Firefly, a través de la cual Adobe planea colaborar con la comunidad creativa y sus clientes “a medida que evoluciona esta tecnología transformadora” para, posteriormente, comenzar a integrarla en sus aplicaciones.
En concreto, la tecnológica de Estados Unidos ha informado de que las primeras aplicaciones en las que planea integrar Firefly son Adobe Express, Adobe Experience Manager, Adobe Photoshop y Adobe Illustrator.
Por otra parte, Adobe también ha recalcado que tiene previsto que Firefly esté disponible a través de una API en varias plataformas, de manera que los clientes “puedan integrarlo en flujos de trabajo y automatizaciones personalizados”.
Protección al creador
En concreto, la compañía ha subrayado que todas las innovaciones que se desarrollen con Firefly, se implementarán de acuerdo con los principios éticos de la compañía para proteger a los creadores. De esta forma, este primer modelo solo se entrena con imágenes extraídas de Adobe Stock, además del contenido con licencia abierta y el contenido de dominio público libre de ‘copyright’.
Los futuros modelos de Firefly, sin embargo, aprovecharán una variedad de activos, tecnología y datos tanto de entrenamiento de Adobe como de “otros”.
Asimismo, la compañía de software asegura que todas las imágenes de Adobe Stock son imágenes de calidad profesional licenciadas, lo que ayuda a garantizar que Firefly no genere contenidos basados en la propiedad intelectual de otras personas o marcas. Incluso, a medida que se implanten otros modelos, Adobe ha asegurado que seguirá dando prioridad a contrarrestar cualquier posible sesgo perjudicial.
Adobe también recuerda que, en el marco de su Iniciativa para la Autenticidad de los Contenidos (CAI), creada para conseguir un estándar global de atribución fiable de contenidos digitales, está impulsando normas abiertas en el sector como la etiqueta universal ‘No entrenar’.
Con esta etiqueta, que aparece en la credencial de contenido de la imagen, los creadores pueden solicitar que su contenido no sea utilizado para entrenar modelos. Además, la etiqueta se mantendrá independientemente de dónde se publique o almacene la imagen.
*Con información de Europa Press.