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Inteligencia artificial destapó el tipo de películas que suelen ver las personas menos inteligentes
Hay creencias que encierran ciertos gustos con el coeficiente intelectual de algunas personas.
El cine es una forma de entretenimiento universal que abarca una amplia gama de géneros, temáticas y estilos. Las preferencias cinematográficas varían enormemente de una persona a otra, influenciadas por diversos factores como la edad, la cultura, la educación y, en algunos casos, el nivel de inteligencia. A lo largo de los años, se ha generado un debate sobre si existe un vínculo entre el tipo de cintas que una persona elige y su nivel intelectual.
En este contexto, ha surgido la idea de que ciertos tipos de películas podrían atraer más a personas con menor capacidad intelectual. Aunque este concepto es polémico, se pueden identificar algunas características comunes en las películas que suelen ser vistas por este grupo.
Simplicidad en la trama
Uno de los factores que parecen atraer a las personas con menor nivel intelectual es la simplicidad de la trama. Las películas con argumentos sencillos y fáciles de seguir, donde los personajes y las situaciones no requieren un esfuerzo cognitivo considerable para ser comprendidos, son a menudo preferidas. Estas cintas tienden a evitar complejidades narrativas, giros inesperados o temas profundos que podrían requerir una mayor concentración o análisis.
Por ejemplo, las comedias ligeras o las películas de acción sin un desarrollo intrincado de la trama suelen ser populares entre este público. El enfoque se centra más en el entretenimiento inmediato y la gratificación rápida, en lugar de en una reflexión profunda sobre la historia o los personajes. La falta de ambigüedad en las tramas permite que los espectadores sigan el desarrollo de los acontecimientos sin tener que esforzarse demasiado en interpretarlos.
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Humor básico y vulgar
El tipo de humor presente en las películas también puede influir en las preferencias de las personas con menor nivel intelectual. El humor basado en situaciones simples, chistes físicos o elementos burdos, como el humor escatológico o las bromas sexuales, tiende a ser más atractivo para este público. Las comedias que se basan en la exageración de situaciones cotidianas o en estereotipos son comúnmente preferidas, ya que no exigen un gran esfuerzo mental para ser comprendidas.
Películas como las de la franquicia Scary Movie o algunas comedias de Hollywood que hacen uso de bromas directas y a veces groseras suelen tener una gran aceptación entre aquellos que buscan un tipo de entretenimiento más superficial. En este caso, el humor actúa como una vía de escape simple y directa que no requiere una gran reflexión.
Dependencia de efectos especiales
Otro rasgo distintivo de las películas preferidas por personas con menor capacidad intelectual es la abundancia de efectos especiales y escenas de acción sobrecargadas. En estos casos, el espectáculo visual reemplaza a la profundidad de la historia o al desarrollo de los personajes.
Películas que dependen en gran medida de explosiones, persecuciones y secuencias de luchas épicas a menudo atraen a este tipo de público, ya que proporcionan una gratificación sensorial inmediata sin la necesidad de involucrarse emocional o intelectualmente con el contenido.
Este tipo de cine, que prioriza la acción y los efectos sobre la narración, suele estar orientado a un público que busca entretenimiento puro, sin complicaciones, y que no requiere un análisis posterior de lo visto. Ejemplos de este tipo de películas pueden encontrarse en algunas producciones de Hollywood, particularmente en el género de superhéroes o acción exagerada.
Ausencia de temas profundos o controversiales
Las películas preferidas por personas con menor nivel intelectual también tienden a evitar temas profundos, filosóficos o controversiales. La ausencia de discusiones complejas sobre la vida, la muerte, la política o la moralidad es un factor que define muchas de las películas de este tipo. En cambio, se centran en tramas ligeras o, en algunos casos, en la resolución simple de problemas superficiales.
Cintas que abordan conflictos de manera predecible y que ofrecen finales felices sin complicaciones son a menudo más atractivas para este público. La falta de dilemas morales profundos o de desafíos intelectuales dentro de la narrativa permite que los espectadores disfruten de la película sin enfrentarse a cuestiones incómodas o que requieran un análisis posterior.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.