Tecnología
La verdad de los smartwatch: ¿qué tan confiable es su reloj inteligente? Esto reveló un estudio reciente
Según la investigación, es crucial que los usuarios sean conscientes de ciertas limitaciones al utilizar estos relojes para monitorear su salud.
Dispositivos como las bandas y relojes inteligentes o smartwatches se han popularizado en los últimos años a tal punto que es difícil encontrar una persona que no lleve en la muñeca uno de estos wearables (tecnología ponible o vestible). La principal causa de que tanta gente tenga un reloj inteligente es la creciente preocupación por su salud y condición física, ya que estos aparatos permiten no solo marcar la hora, sino llevar un control de los pasos diarios, las calorías quemadas y hasta la calidad del sueño.
Pero, como era de esperarse, no todo lo que brilla es oro, ya que un reciente estudio revela que los smartwatches realmente no son tan confiables o precisos en el seguimiento diario y la información que proporcionan acerca del estado de salud y el estado físico de una persona.
¿Qué reveló el estudio?
Los expertos en medicina deportiva Cailbhe Doherty, Máximo Balduino, Alison Keogh, Brian Caulfield y Rob Argent han publicado un estudio en la web SpringerLink en el que confirman que los smartwatches no tienen demasiada precisión a la hora de medir la frecuencia cardíaca, las calorías consumidas o la calidad del sueño.
Dicho estudio ha evaluado la fiabilidad de los datos proporcionados por diferentes marcas de smartwatches como Apple Watch, Fitbit, Garmin, Samsung y Polar, entre otras, desvelando que, aunque estos dispositivos son efectivos en la medición de la frecuencia cardíaca y la detección de arritmias, presentan variabilidades importantes en muchas otras métricas de salud.
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La investigación analizó 24 revisiones sistemáticas que incluyen 249 estudios de validación, con 430.465 sujetos en total. Los resultados indican que, aunque los relojes inteligentes tienen un sesgo promedio de ±3% en la medición de la frecuencia cardíaca y una alta precisión en la detección de arritmias (100% de sensibilidad y 95% de especificidad), su exactitud disminuye en otros parámetros.
En cuanto a la capacidad aeróbica (VO2max), los dispositivos tienden a sobreestimarla, con un error promedio de ±15.24% en reposo y de ±9.83% durante el ejercicio. La medición de la actividad física mostró una gran variabilidad, con errores que oscilan entre el 29% y el 80% dependiendo de la intensidad. Además, los smartwatches subestiman el conteo de pasos en un rango de −9% a 12% y el gasto energético en aproximadamente −3 kcal por minuto. En cuanto a la saturación de oxígeno en sangre, se observó una diferencia promedio de hasta un 2%.
Otras limitaciones
La precisión en el seguimiento del sueño también es cuestionable, ya que los dispositivos tienden a sobrestimar el tiempo total de sueño, con errores porcentuales absolutos superiores al 10%. Esto plantea dudas sobre la fiabilidad de los smartwatches para un seguimiento detallado del sueño.
Las limitaciones del estudio también se centran en la diversidad de algoritmos y metodologías utilizados por diferentes dispositivos. Es decir, los sensores y algoritmos propios de cada marca contribuyen a la variabilidad en los resultados, lo que sugiere que no todos los smartwatches ofrecen el mismo nivel de precisión y que pueden presentarse discrepancias significativas en las lecturas.
Esta diversidad tecnológica contribuye a la falta de uniformidad en los resultados y crea la necesidad de estándares de validación más rigurosos, así como colaboraciones entre la industria y la comunidad científica y deportiva.
En resumidas cuentas, aunque los relojes inteligentes son herramientas útiles para ciertas mediciones de salud, su variabilidad en parámetros como el VO2max, la actividad física, el conteo de pasos y el seguimiento del sueño, plantea interrogantes sobre su fiabilidad general. Es crucial que los usuarios sean conscientes de estas limitaciones al utilizar smartwatches para monitorear su salud.