La guerra del streaming está candente para Netflix

En los próximos dos meses Estados Unidos vivirá una tormenta de plataformas de streaming, pues varias de las grandes compañías tecnológicas y de producción audiovisual se lanzarán al ruedo para conquistar la nueva era de la televisión en internet. 

Dicho lanzamiento también tendrá como objetivo tomar parte de la torta que dominan Netflix y Amazon, así como diversificar sus fuentes de ingresos, captar nuevos públicos, entre otros.

La batalla por dominar la televisión por internet comenzó con millones de dólares de por medio. Netflix invertirá este año US$13.500 millones en nuevo contenido, la inversión de Amazon se espera supere los US$6.000 millones y Apple planea gastar US$6.000 millones en la producción de programas y películas originales. 

Pero ¿qué otros competidores llegan al mercado del streaming y qué ofrecen al usuario? El primero de ellos es Apple. La compañía de la manzana dio la primera estocada al anunciar el pasado 10 de septiembre que lanzará su plataforma Apple TV+ el primero de noviembre, once días antes de la llegada de uno de sus competidores, Disney+.

Y no solo por las fechas sorprendió al público, sino que también lo hizo por su precio. De acuerdo con la compañía, el servicio de streaming será de US$4,99 al mes o quien compre un dispositivo de la compañía tendrá derecho a un año gratis de este servicio. 

Estos valores categorizan a Apple como uno de los servicios más económicos. Pero hay algo que aún no está claro y es el contenido que tendrá disponible en la plataforma desde su lanzamiento. De acuerdo con el diario estadounidense The Wall Street Journal, esta plataforma estará dirigida a la familia por lo que no tendrá contenido sexual, de violencia o relacionado con drogas.

El siguiente en llegar al mercado es Disney +, que se verá en los dispositivos estadounidenses el próximo 12 de noviembre. La compañía anunció que el precio de suscripción a la plataforma será de US$6,99 al mes o US$69,99 el año. Durante la convención ‘D23’ celebrada en California, el gigante del entretenimiento aseguró que los usuarios podrán ver todas las películas de Marvel, Star Wars, los clásicos de Disney, así como contenido propio y exclusivo para la plataforma. 

También a finales de este año entrará HBO Max, un servicio de streaming que incluirá todos los activos del grupo WarnerMedia. De acuerdo con los creadores de la plataforma, esta contará con más de 10.000 horas de contenido que incluyen todas las series, películas y documentales realizados por HBO, Warner, la BBC y algunos originales. Este tendrá un valor cercano a los US$17 el mes. 

Aun así, Amazon y Netflix seguirán liderando el mercado según señalan algunos medios internacionales, esto debido a su millonaria inversión en contenidos originales y al número de usuarios con el que cuentan. 

Según cifras de Statista, desde el 2017, Amazon Prime Video ocupa el segundo lugar en esta industria, con alrededor de 26 millones de suscriptores en Estados Unidos. Su servicio cuesta cerca de US$8,99 el mes y le ha generado ingresos a la compañía por  US$2.800 millones.

Por su parte, Netflix hasta el segundo trimestre de este año cuenta con 60,1 millones de usuarios y en 2018 recibió ingresos por US$6.100 millones. Adicional a esto, Statista también señala que los títulos de Netflix representaron el 63,1% de la demanda en el primer trimestre de este año. 

Finalmente está Hulu, que se caracteriza por su contenido de clásicos de la televisión - a pesar de una ausencia significativa de contenido propio - y por ser una de las más económicas, la suscripción mensual en el plan básico es de US$5,99. Según datos de Statista, en el 2017 esta plataforma registró ingresos globales por US$2.400 millones y se estima que este 2019 cierre con más de 82,2 millones de usuarios.

Saturación para el usuario

Algunos analistas consideran que la llegada de estas plataformas podría no solo generar daños grandes a Netflix, sino crear una especie de saturación de contenido para los usuarios.

El experto de la firma Deloitte, Kevin Wetcott, citado en un artículo del diario La Vanguardia, aseguró que “con más de 300 opciones de vídeo en Estados Unidos, junto con múltiples suscripciones y pagos, los consumidores pueden entrar en un momento de fatiga”. Y agregó en el mismo diario “los usuarios tienen problemas para encontrar sus programas favoritos en múltiples ofertas”.

Y algunos datos lo demuestran. Un estudio de Deloitte encontró que el 47% de los usuarios estadounidenses se sienten frustrados por el número de suscripciones y servicios que necesitan para ver los contenidos que quieren. Adicional a esto, datos de la American Consumer Satisfactory Index, las cadenas de abonados registraron en 2018 la peor nota de satisfacción de los clientes de los últimos 11 años.

A esto se une la insatisfacción por los precios. Cálculos realizados por la revista Fortune estimaron que si un ciudadano de los Estados Unidos decidiera suscribirse a todas las plataformas de streaming que hay en el mercado, se gastarían cerca de US$115 al mes, casi diez veces lo que vale una sola suscripción.

¿Una burbuja audiovisual?

Esta situación ha llevado a que algunos analistas consideren la proliferación y el nacimiento de nuevas plataformas de streaming como un anuncio de una nueva burbuja del siglo XXI: la del mundo audiovisual. 

De acuerdo con Guillermo Valencia, director Macrowise, dicha burbuja estaría explicada en la situación actual que vive Netflix y en la necesidad de las grandes compañías de reinventarse. Según el experto, esta plataforma logró una disrupción significativa en el modelo de negocio de contenido de video ya que democratizó el acceso al cine y desarrolló un monopolio alrededor de esto. 

Sin embargo, llegar al punto donde está Netflix no ha sido fácil. “Netflix de alguna u otra manera les mostró el camino a sus competidores y ahora está haciendo un gasto muy grande en producciones y esto no está siendo muy efectivo”, señaló. 

Para Valencia, la competencia ya no está en conquistar nuevo público sino en la creación de contenido que hasta ahora experimenta Netflix pero que competidores como Disney le llevan la delantera. “Contrario a Netflix, Disney hace contenido muy barato y ese es su fuerte, además que cuenta con los principales creadores de la industria del entretenimiento como lo es Fox”, afirmó. 

Ante esto, señala que la guerra del contenido incluso no podría estar anclada únicamente en Estados Unidos, sino que se trasladaría a países como India donde Disney adquirió la cadena Star India. “India cuenta con 1,2 billones de habitantes, hay un auge creciente por la industria del cine desde Bollywood y demanda contenido propio”, aseguró Valencia.