Las sorprendentes funciones secretas de las llaves de los vehículos

Así como los carros han evolucionado en los últimos años, sus accesorios también han tenido que modernizarse para estar a tono con las nuevas tendencias tecnológicas de la industria automotriz.

Uno de estos artículos, indispensable para activar cualquier automóvil, es la llave. Sin embargo, atrás quedó esa pieza de lata con un mango de plástico, pues ahora son verdaderamente diferentes y actúan con sensores de proximidad que permiten el encendido y otras funciones de los coches de última generación.

La llave ha venido ganando gran protagonismo, pues si bien sirve para poner en marcha el auto, ese no es su uso exclusivo, pues desde allí se puede operar el baúl, encender el vehículo a distancia y hasta controlarlo de forma remota.

La gran mayoría de las marcas ahora utilizan estas llaves para facilitar el acceso de los usuarios a sus vehículos.

Para empezar, si se deja pulsado el botón de apertura o de cierre de puertas por varios segundos, los vidrios delanteros y traseros se activarán, subiéndose o bajándose, respectivamente. Así mismo, hay otros controles que permiten que esta misma acción abra el baúl a distancia, sin tener que introducir una llave o activar una palanca desde el interior del coche.

De igual manera, al combinar estas mismas teclas, se puede abrir, únicamente, la puerta del conductor, algo que seguramente muchos no conocían. Además de esto y como truco para evitar quedarse varado por la falta de batería en el control o el daño del mismo, hay un compartimiento secreto dentro de los controles que se activa con un botón y permite utilizar la llave tradicional para poder abrir y encender el vehículo.

Cuidado: las opciones que nunca debe activar en su carro cuando llueve

Conducir puede parecer complicado, pero realmente es una tarea que, como dicen por ahí, una vez se aprende nunca se olvida. Tener presentes las normas de tránsito, las señales presentes en la vía y conocer el vehículo que se maneja es clave para que no se presente ninguna anomalía mientras se está en marcha.

Pese a esto y a lo precavidos que puedan ser los hombres y las mujeres que están tras el volante, hay situaciones que pueden complicar esta acción, ya sea porque afectan el funcionamiento del vehículo, la estabilidad del mismo o porque impiden la visión del piloto.

Frente a esta última variable, la lluvia es una de las principales causas de accidentabilidad en la vía, pues las condiciones de manejo cambian del cielo a la tierra cuando se está bajo torrenciales aguaceros.

En este sentido, existen diferentes funciones que tiene el vehículo y que pueden ser muy útiles mientras se conduce en condiciones extremas. Así mismo, hay otras que, debido a la cultura popular, se cree que son efectivas, pero no.

Respecto al primer escenario, existe la función de estabilización automática o control de estabilidad, que se identifica en el tablero como ESP. Este desarrollo fue diseñado por Bosch y Mercedes Benz en la década de los noventa y ha significado un gran avance para la industria automotriz en materia de seguridad, ya que la gran mayoría de las marcas la ha ido implementando en sus diferentes modelos.

Este sistema es obligatorio y siempre se encuentra activado, a menos que, de forma manual, el piloto decida apagarlo. El ESP va conectado al sistema de frenos y actúa de manera independiente sobre cada una de las ruedas, en caso de presentarse una anomalía que impida mantener la estabilidad y la trayectoria del automóvil. Por esta razón, por nada del mundo, se debe desactivar esta función mientras se conduce.

Ahora, dentro de las funciones o botones que se activan cuando llueve y no resultan ser tan seguros, se encuentran las luces estacionarias, pues se cree que bajo condiciones de lluvia extrema el vehículo se hará más visible. Al mantenerlas encendidas, se le impide al conductor de un vehículo que viene detrás saber en qué dirección va a girar el auto de enfrente, pues estas luces desactivan las direccionales.

Por este motivo, lo que se recomienda es encender las luces y no hacer uso de las estacionarias, con el fin de evitar colisiones.

Otra de las acciones que no se deben realizar están relacionadas con el freno. Activarlo de manera repetida puede provocar colisiones o bloqueo en las llantas. La recomendación es mantener una velocidad baja y estable para evitar cambios bruscos de velocidad que puedan provocar un accidente o un derrape indeseado.

Así mismo, cabe mencionar que hay que mantener la concentración al máximo. Algunos expertos sugieren evitar cualquier función que distraiga al conductor o que dificulte la percepción de señales que envían otros vehículos. De esta manera, recomiendan no activar los dispositivos de audio o reproductores multimedia, dejar de seguir la pantalla con los mapas y fijarse exclusivamente en el camino.