Lo que comenzó como un enigma en el espacio profundo fue finalmente resuelto en la Tierra por un padre y su hija, quienes lograron decodificar una señal extraterrestre de Marte.
Una señal marciana que desconcertó a expertos ha sido descifrada por un padre y su hija, quienes descubrieron un mensaje que podría aportar claves sobre el origen de la vida. | Foto: Composición de SEMANA: con imágenes del portal ESA y Getty

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Padre e hija logran descifrar una enigmática señal extraterrestre procedente del planeta Marte

Un misterioso mensaje proveniente de Marte ha sido descifrado por un padre y su hija, en un logro que podría abrir nuevos horizontes en la búsqueda de vida extraterrestre.

Redacción Tecnología
31 de octubre de 2024

En un asombroso logro que une la ciencia y la creatividad, un padre y su hija han descifrado una señal extraterrestre transmitida desde Marte. Esta señal, compuesta por puntos blancos dispuestos en cinco grupos sobre un fondo negro, representa un emocionante avance en la búsqueda de vida más allá de nuestro planeta y demuestra el poder de la colaboración entre científicos y ciudadanos.

La señal enigmática

El descubrimiento de la señal se remonta al 7 de junio de 2024, cuando la artista multimedia Daniela de Paulis recibió en su bandeja de entrada una imagen que parecía sencilla, pero que contenía un mensaje cósmico.

Este mensaje, transmitido desde el orbitador de gases traza ExoMars (TGO) de la Agencia Espacial Europea (ESA) en mayo de 2023, representaba cinco aminoácidos, fundamentales para la formación de la vida. La imagen era la solución a un rompecabezas cósmico creado como parte del proyecto artístico multidisciplinario “A Sign in Space”.

En un evento sin precedentes, la Agencia Espacial Europea anunció la recepción de una señal de Marte, que contenía un mensaje codificado con patrones de puntos blancos, captando la atención de investigadores y curiosos.
La señal extraterrestre fue captada por primera vez en la Tierra el 7 de junio de 2024, cuando una imagen misteriosa llegó al buzón de la artista Daniela de Paulis, quien había lanzado un proyecto artístico inspirado en el espacio. | Foto: Captura de pantalla tomada de ESA

La señal fue interceptada por tres observatorios de radioastronomía en la Tierra, marcando el inicio de un año de arduo trabajo para extraer y descifrar su contenido. En un tiempo récord de diez días, una comunidad de 5,000 científicos ciudadanos se unió en línea para lograr el primer objetivo: extraer la señal de los datos brutos. Sin embargo, la segunda parte del desafío, la decodificación del mensaje, resultó ser más compleja y requirió un enfoque creativo y colaborativo.

El trabajo de decodificación

Ken y Keli Chaffin, un equipo de padre e hija, se adentraron en la tarea de descifrar el mensaje utilizando su intuición y realizando simulaciones exhaustivas. A medida que avanzaban, se dieron cuenta de que la señal no solo era estática, sino que contenía un componente de movimiento.

Este descubrimiento sugirió la posibilidad de formaciones celulares y, por ende, la existencia de formas de vida. La revelación de que los aminoácidos y las proteínas, componentes esenciales de la vida, estaban presentes en el mensaje atrajo la atención de la comunidad científica y del público en general.

Un enigma cósmico fue resuelto por un equipo inesperado: un padre y su hija, quienes descifraron una señal extraterrestre captada en la Tierra desde el planeta Marte.
La sorprendente hazaña de un padre y su hija, quienes lograron decodificar una señal procedente de Marte, ha despertado el interés de la comunidad científica y del público. | Foto: Captura de pantalla tomada de ESA

La colaboración con Daniela de Paulis, así como con un pequeño grupo de astrónomos y científicos informáticos, fue crucial para el éxito de la misión. Con el respaldo de la ESA, el Instituto SETI y el Observatorio Green Bank, el equipo logró elaborar el mensaje y ahora se enfrenta a la intrigante tarea de interpretar su significado. Al igual que en cualquier obra de arte, la interpretación del mensaje permanece abierta, lo que alimenta aún más la curiosidad y el debate.

Ahora que la señal ha sido descifrada, comienza una nueva etapa en la investigación: la interpretación de lo que realmente significa. Este proceso no es solo un desafío científico, sino también un ejercicio artístico que involucra la creatividad y la imaginación. La comunidad científica está ansiosa por comprender las implicaciones de este descubrimiento y su relación con la posibilidad de vida en otros planetas.