Peligrosas costumbres que lo harían quedar en manos de cibercriminales

Las acciones que los usuarios realizan en la vida digital pueden exponerlos a sufrir de ciberdelincuencia. En un mundo cada vez más conectado, es importante ser conscientes de las prácticas que hacen a las personas vulnerables y tomar medidas para protegerse.

Acciones comunes que aumentan el riesgo de ser víctimas de la ciberdelincuencia

• Contraseñas débiles: utilizar contraseñas fáciles de adivinar o compartirlas entre diferentes cuentas es un error común que debilita la seguridad en línea. Es importante utilizar contraseñas únicas y robustas, que contengan una combinación de letras, números y caracteres especiales. Además, es recomendable utilizar autenticación de dos factores siempre que sea posible para agregar una capa adicional de seguridad.

• Descargar archivos adjuntos y hacer clic en enlaces sospechosos: abrir archivos adjuntos o hacer clic en enlaces desconocidos o sospechosos puede llevar a descargar malware o redirigir a sitios web fraudulentos. Es esencial tener precaución al interactuar con correos electrónicos, mensajes instantáneos o publicaciones en redes sociales que provengan de fuentes desconocidas o no verificadas.
• No actualizar software y sistemas operativos: no mantener actualizados los dispositivos y programas deja brechas de seguridad que los ciberdelincuentes pueden explotar. Las actualizaciones suelen incluir parches de seguridad que solucionan vulnerabilidades conocidas. Es importante configurar los dispositivos para que se actualicen automáticamente y estar al tanto de las actualizaciones de software para mantenernos protegidos.

• Uso de redes Wi-Fi públicas sin protección: conectarse a redes Wi-Fi públicas y abiertas sin cifrado o sin una contraseña puede exponer a ataques de intermediarios y robo de datos. Los ciberdelincuentes pueden monitorear el tráfico de red y acceder a la información personal que se transmite, como contraseñas o datos bancarios. Es preferible utilizar redes virtuales privadas (VPN) o redes seguras cuando se necesite acceder a información confidencial.
• Compartir información personal en redes sociales: publicar información personal, como detalles de ubicación, números de teléfono o fechas de cumpleaños, en redes sociales, puede proporcionar a los ciberdelincuentes información útil para llevar a cabo ataques dirigidos o robo de identidad. Es fundamental revisar y ajustar la configuración de privacidad de nuestras cuentas para limitar el acceso a nuestra información personal.

• Descuidar la seguridad de los dispositivos móviles: los dispositivos móviles, como teléfonos inteligentes y tabletas, también son objetivos de los ciberdelincuentes. No utilizar contraseñas o patrones de desbloqueo seguros, descargar aplicaciones de fuentes no confiables o no activar las funciones de seguridad incorporadas aumenta el riesgo de comprometer la seguridad de nuestros dispositivos móviles y la información almacenada en ellos.
• Caer en estafas de phishing: el phishing es una técnica utilizada por los ciberdelincuentes para engañarnos y obtener información confidencial, como contraseñas o datos financieros. Los correos electrónicos, mensajes de texto o llamadas telefónicas falsas pueden pretender ser de instituciones legítimas o empresas conocidas. Es importante tener precaución y verificar cuidadosamente la autenticidad de las comunicaciones antes de proporcionar información personal o hacer clic en enlaces.

• No hacer copias de seguridad de los datos: no realizar copias de seguridad de forma regular de nuestros archivos importantes y documentos nos deja en una situación vulnerable frente a posibles pérdidas de datos o ataques de ransomware. Realizar copias de seguridad en dispositivos externos o en la nube nos ayuda a proteger nuestra información y facilita su recuperación en caso de una eventualidad.

Cabe destacar que estas son solo algunas de las acciones que exponen a los usuarios a sufrir de ciberdelincuencia. Es esencial estar informados y educados sobre las mejores prácticas de seguridad en línea. Mantenerse actualizado sobre las últimas amenazas y utilizar soluciones de seguridad confiables, como antivirus y cortafuegos, son medidas adicionales para proteger nuestros dispositivos y datos personales. Al tomar estas precauciones, se podrá reducir significativamente el riesgo de convertirse en víctima de la ciberdelincuencia y disfrutar de una experiencia digital más segura.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.