TRANSFORMACIÓN DIGITAL
¿Qué son las empresas biónicas y por qué marcarán el futuro del ecosistema empresarial?
En entrevista con SEMANA, la experta en tecnología y transformación digital de BCG, Karalee Close, habla sobre este nuevo concepto y cómo las organizaciones deben adoptarlo para ser exitosas en el mundo digital.
Ante la urgente necesidad de transformarse digitalmente, las empresas suelen centrarse en la tecnología dejando de lado el rol que desempeñan las personas en ello. Para continuar siendo relevantes, aquellas organizaciones que consigan combinar lo mejor de las personas y la tecnología serán las que consigan desarrollar experiencias y relaciones superiores con los clientes, operaciones más productivas y altas tasas de innovación.
En ese camino, se han dado a conocer nuevos conceptos que hoy las organizaciones deben adoptar para enfrentar con éxito los retos que no solo dejó el coronavirus, sino también los que vendrán de cara a la Cuarta Revolución Industrial.
Uno de ellos es el de las empresas biónicas, aquellas que logran hacer un híbrido entre su talento tecnológico y el talento que se debe enfrentar a los cambios digitales que se vienen.
Karalee Close es la líder mundial de la práctica de Technology Advantage de Boston Consulting Group y miembro central del equipo de Global Senior Management de DigitalBCG, además de ser experta en este nuevo concepto que está llegando al mundo empresarial.
SEMANA: ¿Cuál es el balance que hace de lo sucedido este año en materia tecnológica?
Karalee Close (K.C.): La transformación digital estaba en la agenda de las empresas y en general del mundo antes de la covid-19. Con la coyuntura, lo que se dio fue una fuerte inversión para avanzar en estos planes.
Los cambios que hemos visto este año nunca los habíamos visto en nuestras vidas. Se dieron giros dramáticos en políticas, barreras regulatorias y en la disponibilidad de la gente para adoptar tecnología.
Pero, sin duda, el mayor avance que se dio fue que las salas ejecutivas, los CEO y gerentes de operaciones empezaron a ver lo digital como algo no lateral, sino imperativo para la competencia en los mercados y como una alternativa para sobrevivir durante la pandemia.
SEMANA: Precisamente la pandemia obligó a muchas empresas a adoptar la tecnología para mantenerse en pie, más que como una alternativa para transformar sus operaciones. ¿Cómo evitar que lo que se logró en la pandemia representa una verdadera oportunidad para las empresas?
K.C.: Esto, sin duda, aceleró cosas que queríamos hacer y una de las grandes inquietudes es cómo utilizar esos avances para encontrar oportunidades y no dar un paso atrás.
Mucha gente querrá volver al modo antiguo de trabajo y retomar la normalidad pre-covid, y en esto las empresas deben asegurarse de tomar las medidas necesarias para seguir avanzando sin que represente un retroceso para ellos.
Aquí, por ejemplo, será clave eliminar barreras como conocer el desempeño real de la tecnología que se está implementando, cómo está optimizando la operación y cómo los equipos se están adaptando a estos cambios.
SEMANA: ¿Cuáles son las claves para que las compañías determinen cuáles son las tecnologías que más podrían aportarles?
K.C.: Menos del 30 % de las compañías tienen éxito en su transformación digital y las que lo han tenido es porque no se enfocan en una solución tecnológica en particular. Estas están realmente pensando en digital y dan un giro fundamental en la forma como operan sus compañías.
Así las cosas, las empresas deben mirar dónde está el valor y dónde los cambios digitales transforman las fuentes tradicionales del negocio y le dan una ventaja competitiva. Esto requiere liderazgo y, desde la alta dirección, se debe tener conciencia sobre dónde usarán las tecnologías y cómo su elemento humano podrá complementarlo.
SEMANA: ¿Pero cómo pueden las empresas medir el impacto que tiene la transformación digital en su organización e identificar dónde deben implementarlas?
K.C.: Muchas personas no saben ni siquiera definir qué es la transformación digital y qué límites tiene.
Pero creo que las empresas deben centrarse en donde quieren que haya grandes cambios y buenos resultados. En nuestro caso, hemos identificado que hay tres áreas donde las organizaciones pueden comenzar a hacer esa transformación y que seguramente tendrán un impacto positivo.
Estas son: servicio al cliente, brindando nuevas experiencias a los clientes y operaciones implementando tecnología en las cadenas de suministro, y manufactura. También es vital que las empresas entiendan qué necesitan los clientes y cómo cambia la demanda.
SEMANA: Usted mencionó que en los líderes está gran parte del éxito de la transformación digital. ¿Qué hace falta en los altos ejecutivos para que estos cambios sean un éxito?
K.C.: El modelo de liderazgo de una compañía digital, y en general de las empresas en el futuro, será muy diferente al que conocemos.
Los nuevos líderes, o incluso los que ya están pilotando esta transformación, están llamados a tener más claridad respecto a los objetivos de sus negocios, los cuales deben estar alineados entre la alta dirección y sus equipos de trabajo.
De igual manera, deben vencer el miedo a utilizar tecnologías como la inteligencia artificial y eliminar mitos como que la tecnología reemplazará 100 % al talento humano cuando realmente llega es para complementarlo.
SEMANA: Ya que toca este punto, usted ha liderado la discusión alrededor de las empresas biónicas. ¿Qué quiere decir este concepto?
K.C.: Ese concepto de compañía biónica nace de la película de los años 70, El hombre biónico, donde el personaje tenía superpoderes gracias a la tecnología.
Con esto queremos reflejar cómo la tecnología ayuda a las personas a mejorar sus habilidades y cómo las empresas no solo deben hablar de automatización, sino también de poner en la mesa la conversación de cómo se hacen las cosas de mejor manera y con mayor impacto cuando se juntan las tecnologías con rasgos humanos como la creatividad y la empatía.
En resumen, son empresas que buscan resultados superiores juntando nuevas capacidades tecnológicas con su talento para lograr mejores resultados.
SEMANA: Esto va encaminado a que las empresas elijan entre contratar nuevo talento, que esté contextualizado con el mundo digital, o mantener al que tienen y capacitarlo…
K.C.: Se tienen que hacer ambas cosas. Hay un conjunto de nuevas destrezas que muchos trabajadores no tienen y que las empresas están en la necesidad de contratar, como lo son los científicos de datos.
Entonces, hay unos roles importantes que se deben tener para impulsar y darles valor a los procesos de transformación digital.
Sin embargo, es crucial que las empresas empiecen a encaminarse a un talento híbrido, es decir, juntar al personal que ha estado en el negocio por mucho tiempo, que entiende su dinámica con los nuevos colaboradores.
Esto debe ir acompañado de capacitaciones.
SEMANA: Además del talento, ¿qué otros aspectos definen a las empresas biónicas?
K.C.: Las compañías biónicas son muy fuertes en tres área: inversión en tecnología moderna –operan proyectos de entrega ágil– y, claramente, cuentan con talento digital y programas de capacitación.
La pregunta aquí es cómo empezar a ser una empresa de este tipo. En ese sentido, nosotros generalmente recomendamos que se enfoquen en una o dos partes del negocio que desean transformar digitalmente. Las compañías buscan abarcar todo sin tener los resultados que esperan.
SEMANA: ¿Cómo ve a las empresas latinas en este aspecto?
K.C.: América Latina tiene muchas características interesantes. Habrá una penetración muy alta de la conectividad móvil y hay una oportunidad de dar saltos grandes. También hay economías más establecidas que están experimentando con tecnologías y les está yendo muy bien.
También hay un ecosistema digital y algunas compañías nuevas que se están volviendo globales, y que sin duda están dejando muy bien a la región.
Hay cosas por trabajar, como abandonar tecnologías y formas de trabajar antiguas, pero en general es una región que va encaminada a transformarse.
SEMANA: ¿Qué otros aspectos hay que trabajar para que los países de la región consoliden sus ecosistemas digitales?
K.C.: Las barreras se centran en enfrentar el statu quo y en dar conectividad a la población que no ha podido disfrutar de los beneficios de la tecnología.
En sitios donde se tiene una brecha digital es importante pensar cuidadosamente qué es lo justo y lo apropiado para la sociedad, y cómo se asegura que la tecnología se utilice de tal manera que no genere más sesgos o perpetúe los ya existentes.
También considero que el talento será un factor importante en el que el continente debe trabajar. Hay una escasez de 500 mil profesionales digitales en América Latina, lo que representa una gran oportunidad para formar más personas en las habilidades del futuro con especial énfasis en aquellas poblaciones vulnerables, pues la tecnología les abre un nuevo mundo de posibilidades.