Este pueblo santandereano, patrimonio de Colombia, es imperdible para conocer; queda a pocos minutos de Bucaramanga

Santander es un departamento con diversidad de atractivos turísticos. Tiene una gran riqueza natural, cultural, histórica y gastronómica, que llaman la atención de cualquier viajero que decida visitar y disfrutar en su territorio.

Información del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo indica que este es un destino ideal para el desarrollo de actividades de aventura y deportes extremos, además de que allí hay temas culturales para destacar; por lo que es ideal para conocer en familia, con amigos e incluso solo. La oferta es para todos los gustos.

Dentro de las muchas opciones para conocer está San Juan de Girón, un pueblo que hace parte de Red Turística de Pueblos Patrimonio de Colombia, en la que hay 18 poblaciones. Junto a Barichara y El Socorro, este municipio destaca en ese selecto grupo.

Es un pueblo en el que se pueden apreciar casas hechas en bahareque, tapia pisada, tejas de barro, puertas y ventanas de color marrón y fachadas blancas. Sus calles son empedradas y evocan el pasado, características que le permitieron obtener el reconocimiento de Monumento Nacional en 1963 y hoy en día es considerado Bien de Interés Cultural (BIC).

Esta población, que está a muy pocos kilómetros de Bucaramanga, también se le conoce como la Villa de Ensueño o Ciudad Blanca de Santander y cuenta un bello malecón turístico y con una importante oferta gastronómica, en la que resaltan los platos típicos como: el mute y el cabrito, sin dejar de lado la tradicional fritanga.

Atractivos turísticos

Según la Red Turística de Pueblos Patrimonio, sus atractivos turísticos están representados por el Parque Principal, la Basílica Menor San Juan Bautista, la Plazoleta de Las Nieves y su Capilla de las Nieves, el Parque Peralta, los 6 Puentes de Calicanto, la Alameda de las Nieves, el Malecón Turístico, el Mirador Sagrado Corazón y el Parque Gallineral, rodeado de flora y fauna que permite a los turistas y visitantes disfrutar de la naturaleza.

La Basílica Menor de San Juan Bautista, es una pequeña réplica de la Iglesia de Santa María Mayor de la ciudad de Roma, mientras el Parque Peralta se caracteriza por tener un ambiente tranquilo y romántico. También está el Parque de las Nieves, llamado así por la capilla que se encuentra en este lugar y tiene el mismo nombre.

En las afueras del pueblo está el Cañón de las Iguanas, con naturaleza propia del Cañón del Chicamocha, como cactus, tierras áridas y un pozo para disfrutar de un baño después de realizar la caminata sobre el filo de este último, en un recorrido que dura aproximadamente dos horas. Así mismo, los turistas tienen la posibilidad de disfrutar de una cascada de aproximadamente 60 metros de altura que hace parte de la travesía.

Por último, a un poco más de 20 kilómetros, se encuentra la vereda San José de Motoso, en cuyo recorrido se puede disfrutar de los cítricos como naranjas, mandarinas y cultivos de piña que aromatizan el olfato de los visitantes, allí se encuentra también la iglesia San José de Motoso y la cueva del indio en la finca Buenavista. Siguiendo el recorrido se llega al mirador Altamira donde se observa una panorámica del embalse de Topocoro, una vista imperdible para disfrutar de la naturaleza.