Hudson Yards, el barrio joven de Nueva York

Antes de Hudson Yards, y particularmente de The Vessel, la monumental intervención escalonada, en el nuevo barrio de moda de Nueva York solo estaba el West Side Yard, uno de los depósitos ferroviarios más importantes de Manhattan. En 2001, la ciudad decidió que era hora de hacer algo más con el terreno, escondiendo los rieles —que todavía funcionan— bajo una plataforma de concreto.

La idea inicial era construir una nueva estación de metro, un área de oficinas y un estadio de fútbol americano auspiciado por los New York Jets. Una propuesta que no gustó entre los vecinos, que presionaron para tener un distrito inmobiliario, comercial y cultural. Con una inversión de 25.000 millones de dólares, se dio inicio en 2012 a Hudson Yards, el proyecto de urbanismo mixto más ambicioso en la historia de Manhattan e incluso de Estados Unidos.

Allí, en la plataforma que “flota” sobre los rieles, el panorama consta de ocho edificios: siete de cristal —que le han costado todo tipo de críticas por su diseño— de los cuales uno es de uso mixto, con consultorios médicos y un hotel; otro es residencial, cuatro son para oficinas, uno más funciona como centro comercial y el último como centro cultural.

Para visitar:

• The Vessel: la estructura de cobre, que tiene 16 pisos, 2.500 escalones y forma de espiral, está inspirada en los fosos escalonados de la India. El ingreso a esta creación del británico Thomas Heatherwick es gratuito.

• The Shed: un centro cultural montado sobre rieles que le permiten expandirse, según el espectáculo. Además del teatro cuenta con dos galerías, un espacio de ensayo y un laboratorio. Hasta marzo se expone Absolutes and Intermediates, de Agnes Denes.

• The Shops & Restaurants at Hudson Yards: el centro comercial del barrio. Un espacio de 66.890 metros cuadrados y siete plantas dedicado a las principales marcas del mundo. Entre las opciones gastronómicas: desde cadenas como Shake Shack, Sweet Green y Maison Kayser hasta firmas gourmet como las de Thomas Keller, con TAK Room; David Chang, con Kawi; y Anya Fernald, con Belcampo.

• Edge at Hudson Yards: ubicada en el piso 100 del 30 Hudson Yards, abre sus puertas el 11 de marzo de este año y será una de las plataformas de observación más altas del hemisferio occidental, a 344 metros. El costo del ingreso oscila entre $36 y $58 dólares.

• High Line Park: no es una novedad per se, ni una atracción exclusiva de Hudson Yards. Sin embargo, inauguró recientemente una nueva sección que rodea Hudson Yards, con acceso desde la plaza central del barrio.

Artículo publicado originalmente en el edición 81 de la revista Avianca