Turismo
Islas Bora Bora, la joya de la Polinesia Francesa que debería visitar al menos una vez en la vida
Este destino es catalogado como un paraíso para el romance.
¿Por qué viajar a Bora Bora? Esta joya de la Polinesia Francesa es uno de los destinos más emblemáticos y deseados del mundo por su encanto natural y las emocionantes actividades náuticas que ofrece para vivir una experiencia única.
Ubicada a 277 kilómetros al noroeste de Tahití, esta increíble isla cautiva a sus visitantes por su impresionante laguna de agua turquesa, sus playas de arena blanca, sus exuberantes montañas volcánicas y otras tantas maravillas que la convierten en un paraíso especial para el romance.
Allí muchos enamorados llegan a celebrar su luna de miel, pero también hay quienes visitan este lugar en busca de una escapada de lujo, que promete varias aventuras y, al mismo tiempo, un espacio de relajación y contemplación de la belleza natural que la compone.
De acuerdo con la página oficial de la Agencia Nacional de Turismo en Francia, Bora Bora es una isla rodeada de islotes situada a 50 minutos de vuelo de la isla de Tahití, que emergió de las aguas hace 13 millones de años, cuya historia está llena de misterio y fascinación.
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Antes de su formación, el sitio indica que se trataba de un volcán que hoy en día se asienta sobre una encantadora laguna, la cual luce una gama de más de 45 tonos de azul que parecen un efecto de magia, casi sobrenaturales.
Las playas de Bora Bora
Playa pública de Matira
Esta es una de las playas de Bora Bora considerada como una de las más bellas de la isla y del mundo. Su nombre fue elegido en honor a un ballenero llamado Mathilda que pasó por aguas del Pacífico hacia 1790, señala la página de Turismo de Tahití.
Es un lugar ideal para practicar una gran variedad de actividades náuticas como snorkel y disfrutar de la vida marina.
Playas de los hoteles
Otro de los detalles que caracteriza a Bora Bora es que cuenta con varios hoteles junto al mar, cada uno con sus propias playas que, en general, conforman ese destino de ensueño para los viajeros que buscan vivir una experiencia única, relajante y cómoda, tanto si se desean explorar aguas, hacer un crucero al atardecer, disfrutar de una cena romántica o simplemente contemplar su hermosa laguna.
Un acuario extraordinario
Las aguas turquesas de Bora Bora se encuentran protegidas por una barrera de sorprendentes arrecifes de coral, que crean un espectáculo natural imperdible, que todo amante del mar debería apreciar al menos una vez en la vida.
Allí es normal ver varios peces de colores paseando por los jardines de coral, de donde surgen mantarraya que, en algunos casos, se acercan y juegan con los bañistas provistos de gafas y tubos de snorkel por expertos de la zona que certifican dicha actividad.
También es posible disfrutar de encuentros garantizados y seguros con tortugas e incluso tiburones para disfrutar al máximo este destino natural, que resulta mucho más atractivo de visitar durante la temporada seca, que va de mayo a octubre.
Esta época es la más recomendada porque su clima es más estable, con temperaturas que oscilan entre los 24°C y los 28°C, indica la revista de viajes con sede en la ciudad de Nueva York, Travel+Leisure.