La experiencia única de estar en un hotel temático

Para muchos turistas, la estadía en un hotel hace la diferencia entre un buen o un mal viaje y por eso muchas empresas del sector han decidido irse por el lado de la hotelería temática, con el fin de brindarle a sus huéspedes una cercanía con aquellos ambiente que le encantan.

La idea es ir más allá de un simple alojamiento, es brindarle una experiencia a través de la vivencia de ciertos temas que son de su interés. La filosofía de los hoteles temáticos es ofrecer a los huéspedes una experiencia única e inolvidable relacionada con un tema central que les hace distinguirse de otros alojamientos de su categoría.

¿Qué características debe tener un hotel temático?

Los hoteles temáticos buscan proporcionar a los visitantes una estancia inmersiva y memorable relacionada con su tema central, tal y como se explica en el portal Estudia Hostelería.

Son muchos los factores que entran en juego para proporcionar esta experiencia exclusiva a los clientes. Entre los aspectos que hay que tener en cuenta para desarrollar este tipo de proyectos está la decoración, la gastronomía, las actividades que se ofrecen para los huéspedes y la ambientación total del hotel.

Por otra parte, los hoteles temáticos sueñen tener un personal muy bien entrenado y especializado que ofrece un trato personalizado y adaptado a las necesidades y preferencias de los clientes.

Diseño y decoración temática:

Esta es tal vez la característica principal de este tipo de establecimientos. De hecho, el diseño y la decoración debe reflejar perfectamente un tema en particular. Puede ser una época histórica, una cultura específica, una película, un libro o un videojuego, cualquier tema funciona, mientras sea relevante para las personas que van a alojarse en el hotel.

Experiencia inmersiva:

La idea es que el huésped se meta totalmente en el tema y se le olvide temporalmente del mundo exterior. Es la oportunidad para vivir con sus personajes preferidos o en aquellos ambientes en los que siempre soñó estar.

Esto puede incluir desde la decoración de las habitaciones hasta la arquitectura del edificio y las áreas comunes.

Actividades y entretenimiento temático:

Por lo general, los hoteles tienen preparadas actividades relacionadas con la temática del hotel con el fin de ofrecer las mejores experiencias a sus clientes.

Restauración temática:

Los restaurantes y bares dentro también siguen la temática, por lo que usted encontrará bebidas y platos inspirados en el concepto general. Esto contribuye a la experiencia global del huésped.

Servicios personalizados:

Algunos hoteles temáticos ofrecen servicios personalizados como disfraces temáticos para los huéspedes, servicios de spa temáticos o incluso servicios de conserjería especializados.

Ubicación Estratégica: En muchos casos, los hoteles temáticos eligen ubicaciones estratégicas que complementan su tema. Por ejemplo, un hotel temático de playa podría estar ubicado en una zona costera.

Estos hoteles están tomando cada vez más fuerza, ya que ofrecen una experiencia única para sus clientes quienes buscan hacer realidad sus sueños y fantasías. Es una estrategia totalmente emocional y personalizada que busca sacar los sentimientos más profundos de su clientela para que esta lleve en su mente los mejores recuerdos de su estadía.

Son capaces de atraer y fidelizar a un segmento de mercado muy específico, que busca algo más que un simple alojamiento: quiere vivir una aventura, un sueño, una fantasía.

Es así como las cadenas hoteleras han aprovechado las características de este tipo de hoteles para diferenciarse de la competencia y posicionarse como una opción de calidad y prestigio, atrayendo a turistas de todas partes del mundo.

Muchos de estos hoteles, además, cuentan con alianzas estratégicas con algunas agencias de viajes, para hacer mucho más confortable el viaje de los turistas que viene a disfrutar de su encanto.