Turismo
La nueva sensación en las pirámides de Egipto que está cautivando a los turistas; algunos afirman tener una conexión especial
Desde hace un mes este emblemático monumento ha recibido visitantes inusuales que están enamorando a los turistas.
A finales de octubre de 2024, se volvió viral la presencia de un perro en las pirámides de Egipto que causó furor en las redes sociales. Testigos relataron el particular instante en el que vieron al canino en la cumbre de una de las construcciones más icónicas de la humanidad en Giza y hasta tomaron algunos registros fotográficos y en video de lo sucedido.
Pese a que en ese momento fue una novedad que generó gran impacto entre los turistas, todo parece indicar que desde entonces se ha transformado en un plus en este lugar, bajo el abrasador sol egipcio y una multitud de turistas donde, algunos de ellos, fijan sus miradas en una nueva atracción: los perros callejeros que habitan en estas maravillas de la Antigüedad.
Verlos encima de las rocas, tal como lo hizo Apollo, el peludo que se convirtió en una sensación tras ser grabado el mes pasado escalando la Gran Pirámide de Kefrén, ahora es más común de lo que muchos imaginaban.
El parapentista estadounidense Alex Lang fue quien inicialmente grabó al canino y las imágenes fueron compartidas en línea por su amigo Marshall Mosher, mostrando a Apollo ladrando a pájaros desde la cima del monumento a 136 metros de altura. “Actuaba como un rey”, dijo Lang a la AFP.
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La atrevida escalada de Apollo provocó un inusitado interés en los perros que desde hace tiempo han hecho de estas piedras de la antigüedad sus hogares. Por esta razón, varios visitantes han dado su opinión frente a este suceso como Diego Vega, procedente de Argentina, que dice sentir un vínculo especial con estos perros.
“Conectar con ellos es como conectar con los faraones”, asegura mientras acaricia a otro miembro de la manada de Apollo, que ya forma parte de las explicaciones de los guías a los turistas, asegura uno de estos profesionales, Sobhi Fajri.
De hecho, un compañero suyo comparó al canino con Anubis, el antiguo dios egipcio de la muerte representado como un hombre con cabeza de chacal.
La súbita fama de estos peludos también se ha visto reflejada en los negocios de la zona, pues Um Basma, una mujer de 43 años, asegura que sus ventas de souvenirs han subido gracias al flujo de turistas que quieren ver a los perros de las pirámides. “Siempre hemos visto estos perros escalando las pirámides, pero nunca pensamos que serían una bendición para nosotros”, afirma.
Un guardia del monumento, que prefiere mantenerse en el anonimato, afirma que algunos famosos han pagado para obtener permisos para fotografiar a sus perros con el “cachorro de la pirámide”.
Apollo, el guardián de las pirámides de Egipto
Este perro baladí de tres años, forma parte de una manada de ocho miembros que viven desde hace tiempo entre estas ruinas de la Antigüedad, impresionando con su capacidad de sobrevivir en el arduo clima de Egipto.
Nació en una grieta en las piedras de la pirámide donde su madre, Laika, se había refugiado. Desgraciadamente, algunos de sus hermanos no sobrevivieron a los peligros de las alturas del monumento.
No obstante, gracias a el impacto que causó su valentía, ahora algunos grupos de cuidado animal trabajan con el gobierno para instalar estaciones de agua y comida para los perros, los camellos y los caballos de la zona.
Por su parte, el Ministerio de Turismo de Egipto anunció que se creará un centro veterinario permanente en las pirámides que formará a sus trabajadores en el cuidado de los animales, lo que mejoraría su calidad de vida de manera significativa.
“Arroja mucha luz sobre los perros y los gatos que hay aquí”, destacó Vicki Michelle Brown, la otra cofundadora de la American Cairo Animal Rescue Foundation.
* Con información de AFP