BYD podría sorprender a Tesla y arrebatarle el primer lugar en ventas anuales de carros eléctricos

La firma automotriz china BYD Co., que ha impactado de forma determinante el mercado mundial con sus vehículos eléctricos, sigue dando señales de su poderío y de su fortalecimiento a nivel global, tanto así que la brecha con Tesla, la firma estadounidense que lidera el mercado, es cada vez menor.

Y es que según las cifras dadas a conocer por la multinacional asiática, en 2024 logró superar los 4,25 millones de unidades, lo que significa un asenso sostenido en los últimos años, algo que la pone casi al mismo nivel de la empresa del multimillonario y amigo de Donald Trump, Elon Musk.

Con la mira en convertirse en la líder mundial en la comercialización de vehículos eléctricos, BYD, cuya sede está instalada en Shenzhen, puede calificar como un acierto la decisión tomada en 2022 de dejar atrás la fabricación de carros a combustión para dedicarse exclusivamente a la producción de vehículos con tecnologías limpias.

Y es que BYD logró un hito en diciembre al superar su récord de ventas mensuales. Este crecimiento fue impulsado por una combinación de subsidios gubernamentales y ofertas adicionales dirigidas a los compradores. Según reportes de la compañía, durante ese mes vendió 509.440 vehículos híbridos enchufables y totalmente eléctricos, con 207.734 unidades pertenecientes a la categoría de eléctricos puros, lo que eleva a 1,76 millones su volumen total anual de ventas de vehículos eléctricos.

Este ascenso en las ventas de BYD se produce en un contexto de dificultades para gigantes automovilísticos tradicionales como Nissan, Volkswagen y Stellantis, los cuales han visto una disminución en sus ventas en China y han quedado rezagados en la transición hacia la electrificación.

Tesla, en la mira de BYD

Tesla, por su parte, revelará los datos de sus ventas correspondientes al cuarto trimestre de 2024 en los próximos días. La empresa de Elon Musk requería al menos 515.000 entregas en este periodo para cumplir con sus expectativas de un “ligero crecimiento” anual, lo que le permitiría alcanzar 1,81 millones de vehículos entregados, un récord histórico. Los analistas prevén que la cifra se quede en 510.400 unidades, ligeramente por debajo de las metas de Tesla.

Aunque BYD ha estado detrás de Tesla en cuanto a ventas trimestrales a lo largo del año, en el tercer trimestre la firma china reportó 1,16 millones de vehículos eléctricos vendidos, un volumen que estuvo 124.100 unidades por debajo del total alcanzado por su competidor estadounidense. Sin embargo, el fuerte repunte en las ventas durante el último trimestre ha permitido a BYD reducir esta diferencia.

Con los resultados de diciembre, BYD se encuentra a punto de superar a Tesla en ventas anuales, un logro que únicamente alcanzó en los tres últimos meses de 2023, cuando la firma china logró superar a su competidor a nivel trimestral.

BYD sigue firme en el mercado

El sólido desempeño de BYD refuerza su estatus entre los fabricantes de automóviles más grandes del planeta. Su notable crecimiento de ventas lo ha colocado en una posición competitiva frente a marcas como Ford y Honda, y es probable que sus ingresos superen los 100.000 millones de dólares anuales por primera vez en su historia.

El éxito de la compañía se debe, en gran parte, a la sólida demanda interna en China, con un impulso adicional proveniente de las subvenciones gubernamentales a los compradores de vehículos eléctricos en la segunda mitad del año, cuyo objetivo es fomentar el reemplazo de los autos de combustión por opciones más ecológicas.

Desafíos internacionales

A pesar de su crecimiento, BYD no ha logrado cumplir su meta de vender aproximadamente medio millón de vehículos fuera de China debido a la resistencia de la Unión Europea, que ha implementado aranceles adicionales a los autos eléctricos chinos. Este obstáculo ha frenado su expansión en mercados clave fuera de su territorio.

En Brasil, uno de los principales destinos para sus vehículos, BYD enfrenta un desafío adicional: está siendo investigada por presuntas condiciones laborales de explotación en la construcción de una nueva planta para la producción de vehículos eléctricos, lo que añade un capítulo polémico a su expansión internacional.